En el acto formal de inauguración de la presidencia irlandesa de la Unión Europea (UE) en el castillo de Dublín, el primer ministro irlandés Bertie Ahern, quien releva a Silvio Berlusconi como presidente en turno de la UE, indicó que se propone acercar las posturas sobre la futura Constitución Europea y destacó el reto que supone que bajo su mando se integren diez nuevos países a la UE.

Tras el polémico mandato del primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi, Ahern se enfrenta al reto de tratar de acercar las posturas sobre la futura Constitución, cuyas negociaciones se interrumpieron a mediados de diciembre por discrepancias sobre el reparto de poder.

El 1 de mayo se integrarán en la UE diez nuevos países, ocho de ellos del Este de Europa -República Checa, Estonia, Letonia, Lituania, Hungría, Polonia, Eslovenia y Eslovaquia- además de Malta y Chipre. Se trata de la mayor ampliación de la UE de un solo golpe.

Europeos-Trabajando Juntos

Bajo el lema de la actual presidencia de seis meses "Europeos-Trabajando Juntos", Irlanda se ha fijado tres objetivos prioritarios: el crecimiento de le economía, lograr una UE más segura y dar un mayor papel a la Unión en el contexto internacional. Irlanda centrará sus trabajos en integrar a los nuevos miembros, extender los actuales programas y políticas de la UE e incluirlos lo antes posible en el acervo de Schengen y en el proceso de coordinación de políticas económicas.

Con el fin de sacar adelante el proceso para la elaboración de una nueva Constitución Europea, Irlanda pretende celebrar consultas con el resto de los socios europeos para valorar la situación y presentar un informe al Consejo Europeo de primavera, que se reunirá en marzo, para determinar los pasos necesarios. Bertie Ahern se opone a una posible intención de países como Alemania y Francia, de apostar por una Europa de dos velocidades, pues esto causaría divisiones al crear disparidades y divergencias, lo que no sería bueno para el conjunto de la población europea.

Estrategia de Lisboa

La presidencia de Irlanda comienza cuando la economía europea empieza a dar signos de recuperación. Irlanda pretende estrechar la colaboración en favor del crecimiento económico poniendo mayor énfasis en la Estrategia de Lisboa, que prevé hacer de la UE la economía más dinámica del mundo basada en el conocimiento. La estrategia será revisada por los jefes de Estado y Gobierno de la Unión en el mes de marzo.