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Isaac Rabin conmemorado en Israel

6 de noviembre de 2016

El grupo laborista israelí financió el homenaje al primer ministro Isaac Rabin, asesinado el 4 de noviembre de 1995. Por primera vez en 21 años el acto estuvo a punto de ser cancelado por falta de recursos económicos.

Israel Tel Aviv Gedenken an Tod von Jizchak Rabin
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Sultan

Para recordar al primer ministro israelí Isaac Rabin (1974-1977), decenas de miles de personas se concentraron este sábado (5.11.2016) en la plaza de Tel Aviv que lleva su nombre; el mismo lugar donde fue asesinado el 4 de noviembre de 1995 por el extremista judío Jigal Amir. "El arma que fue disparada aquí fue una promoción de la película de terror que estamos viviendo ahora y que sigue cobrando víctimas”, dijo Yuval, hijo del político. Rabin fue conmemorado el viernes (4.11.2016) por sus familiares y altos funcionarios estatales.

En 1993, Rabin firmó los Acuerdos de Oslo con Simon Peres, expresidente y ex primer ministro de Israel, y Yasir Arafat, presidente de la Organización para la Liberación de Palestina y la Autoridad Nacional Palestina; un pacto que allanaba el terreno para solucionar el conflicto palestino-israelí, pero que no caló bien entre los radicales de lado y lado. Aunque recibió el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos diplomáticos un año después, su figura y su muerte siguen siendo objeto de polémicas políticas en el país mediterráneo.

David Bitan, un personaje prominente de la coalición religiosa de derecha que apuntala al Gobierno de Benjamin Netanyahu, causó controversia recientemente cuando declaró que la muerte de Rabin no había sido un "asesinato político”. A nadie ha extrañado que la ceremonia conmemorativa de este 5 de noviembre haya sido usada como plataforma para criticar al Ejecutivo de Netanyahu. En la plaza Rabin, el líder opositor Itzhak Herzog acusó al actual primer ministro de haberle "declarado la guerra a la democracia”.

El grupo laborista financió un homenaje que por primera vez en 21 años estuvo a punto de ser cancelado cuando los organizadores anunciaron que no contaban con fondos para llevarlo a cabo y que lo sustituirían por encuentros más pequeños, conferencias y mesas redondas. Según el diario "Haaretz”, era necesario reunir 800.000 shekels –unos 190.000 euros–para gastos técnicos y de seguridad. "El evento siempre ha sido organizado por partes privadas”, explicó Herzog días atrás.

"Pero, considerando que estamos hablando de nuestro líder asesinado, insistimos en celebrar un acto alternativo, supeditado al programa y con las condiciones necesarias para un acontecimiento de este tipo”, acotó el político opositor. La decisión dio paso a una disputa en el seno de la plataforma y también de la sociedad israelí, con posturas encontradas sobre si la ceremonia debía ser o no un espacio politizado desde el cual criticar al actual Gobierno y defender la democracia.

ERC ( EFE / dpa )

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