Gauck, de 72 años, el undécimo presidente de Alemania, comenzó ya con sus primeras tareas en el Palacio de Bellevue, sede de la Presidencia en Berlín.

Un día después de ser elegido por una abrumadora mayoría del 80 por ciento en la Asamblea Federal, Gauck llegó a Bellevue acompañado por su pareja y nueva primera dama, la periodista Daniela Schadt.

"Me late fuerte aquí dentro", dijo brevemente a los periodistas reunidos en el lugar señalándose el corazón. "Siento un gran respeto. Tengo mucho que aprender en muy poco tiempo".

Tras asumir el cargo, Gauck instó a sus conciudadanos a confiar, a evitar "miedos" que mermen el valor como la confianza en uno mismo, algo que en su opinión es tan decisivo que no se puede perder. En su primer discurso ya como presidente en plenas funciones, el teólogo dijo que Alemania es "un país del milagro democrático".

Además, el presidente alemán también se refirió a la crisis del euro y abogó por no dudar de la idea de Europa. Justo en tiempos de crisis, señaló, existe una tendencia muy marcada a refugiarse en el nacionalismo. "Pero justo en la crisis lo que vale es: Queremos más Europa".

Para mi generación, Europa era una promesa. Para mi nieto, Europa es desde hace tiempo en realidad de vida con una libertad que permite cruzar fronteras y las posibilidades y preocupaciones de una sociedad abierta. Y esa ganancia no es sólo una realidad para mi nieto".

El presidente del parlamento alemán, Norbert Lammert, calificó la elección de Gauck un símbolo de cómo ha ido avanzando continuamente el Este y el Oeste del país. El teólogo es el primer jefe de Estado que ha crecido en la ya extinta República Democrática Alemana y ha vivido en persona la falta de libertad. Las expectativas depositadas en él son muy elevadas, añadió Lammert.

El expastor protestante y disidente en la hoy desaparecida Alemania comunista (RDA), de 72 años, fue recibido frente al palacio por su antecesor en el cargo, Christian Wulff, forzado a renunciar a la presidencia por un escándalo de presunto cohecho.

En la recepción participó también Horst Seehofer, presidente de la Cámara alta (Bundesrat) que asumió la jefatura de Estado de forma interina desde la renuncia de Wulff.

Gauck juró el cargo de undécimo presidente alemán desde la Segunda Guerra este viernes en las dos cámaras del Parlamento alemán.

Su primer viaje al extranjero será a Polonia.

En los próximos días tendrá que ocupar varios puestos vacantes en la presidencia. Nuevo jefe de la Presidencia Federal podría ser el teólogo y jurista David Gill, hombre de confianza de Gauck desde hace años.

dpa
Editor: Pablo Kummetz