El juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón procesó hoy por integración o colaboración con ETA a 13 dirigentes de las formaciones vascas Askatasuna y D3M, cuyas actividades fueron suspendidas en febrero por la Justicia. Según el magistrado, se trata de "marcas políticas sucesivas" a la proscrita Batasuna (Unidad), que hasta su ilegalización en 2003 actuó como brazo político de ETA en las instituciones. "Han discurrido desde su inicio por la senda de la legalidad formal, pero bajo la dirección y control de una organización terrorista como es Batasuna-ETA", sostiene Garzón en su auto.

De los 13 procesados, 11 lo han sido por integración en ETA y los otros dos, por colaboración con el grupo armado que desde 1968 ha matado a más de 800 personas en su pretensión de lograr la independencia del País Vasco del resto de España. El Tribunal Supremo anuló el pasado febrero las candidaturas de Askatasuna y D3M de cara a las elecciones autonómicas del 1 de marzo en el País Vasco por considerarlas sucesoras de Batasuna. Poco después, esa anulación fue avalada por el Tribunal Constitucional.

El juez Garzón decretó también entonces la suspensión de todas sus actividades durante tres años prorrogables a cinco. Así, se clausuraron sus locales y se ordenó el embargo de sus cuentas, entre otras medidas.

DPA