La sentencia dictada contra El Chapo Guzmán en Nueva York da cierta sensación de justicia. Pero no tendrá eficacia disuasiva en quienes deciden ser un engranaje de la inmensa maquinaria del tráfico mundial de drogas.
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La sentencia dictada el 17 de julio en una corte de Brooklyn, New York, contra el narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera, mejor conocido como El Chapo, se hizo viral en todo el mundo. La cadena perpetua, más treinta años de prisión, y la orden de confiscar los supuestos 12 mil 666 millones de dólares que habría acumulado en 20 años de carrera criminal dejó un buen sabor de boca para muchos de los neófitos en el tema que siguieron como serie de televisión el llamado ‘juicio del siglo'. Sin duda el más publicitado mundialmente en la historia reciente gracias a la cobertura mediática y redes sociales.
Es irónico. Al final El Chapo logró ser famoso en todo el mundo, lo que tanto había ambicionado desde que a los siete años tuvo que abandonar la escuela primaria para trabajar con su padre en los cultivos ilícitos de drogas en Sinaloa. Aunque seguramente no imaginó que sería así. Sentado en la corte de Brooklyn durante tres meses, encerrado en una fría celda sin ningún privilegio por primera vez en su vida, escuchando las declaraciones de catorce ex socios y empleados, y hasta una ex congresista mexicana que fue su amante. Sus voces llenaron la sala y los medios de comunicación con las historias más bizarras de violencia, venganza y crueldad.
Obligado a guardar silencio y a no declarar siquiera a su favor por consejo de sus abogados, ya que cualquier declaración solo empeoraría las cosas, las últimas palabras públicas que pronunció el capo antes de que el juez dictara la sentencia seguramente tampoco eran las que le habrían gustado como epílogo de su historia. "No hubo justicia aquí”, dijo, y se quejó de los "tratos inhumanos” que sufre en la prisión. "Estados Unidos no es mejor que cualquier otro país corrupto”, sentenció.
Así, la leyenda construida por el gobierno de Estados Unidos y el de México, socializada a través de series de televisión, llegó a su clímax. El campesino de la sierra de Sinaloa que apenas sabía leer y escribir con su potente mente criminal y espíritu enamoradizo pudo convertirse en uno de los hombres más ricos del mundo. El David Copperfield de la cocaína, que con chasquido podía hacerla desaparecer en un extremo del mundo y reaparecer del otro extremo. Todo con la ayuda de un puñado de socios narcotraficantes y asesinos, y unos cuantos funcionarios públicos incluyendo a los dos últimos expresidentes de México, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, y al ex secretario de seguridad pública de México, Genaro García Luna, de acuerdo a las declaraciones de los testigos de la Fiscalía, retenidas a la fuerza por la propia Fiscalía.
Desde el inicio del juicio el juez vetó que se hablara a detalle del sistema de corrupción del Cartel de Sinaloa dentro y fuera de México para que las cosas no se salieran de control. Para justificar la censura, Cogan argumentó el 14 de noviembre en una audiencia a puerta cerrada, de la cual obtuve transcripción, que quien estaba a juicio no era el gobierno de México sino lo que estaba a juicio era saber si Guzmán Loera era culpable o no de los 10 delitos que le imputaban: conspiración internacional para traficar drogas, distribución internacional de drogas, lavado de dinero, y uso de armas de fuego, entre otros.
Pero ¿cómo explicar los crímenes de El Chapo y su impacto, si no se habla de la corrupción dentro y fuera de México que ha permitido que él, y muchos como él puedan traficar desde México drogas en todo el mundo? ¿Cómo explicar que el Cartel podía ganar impunemente millones de dólares por cada tonelada de droga sin mencionar el sistema financiero legal que le permite reciclar ese dinero para usarlo en nuevas transacciones legales e ilegales? ¿Cómo justificar que el Cartel de Sinaloa sigue siendo una pieza central en el tráfico de drogas mundial aunque Guzmán Loera está encerrado en una prisión de máxima seguridad desde hace dos años en New York?
Luego de 14 años de investigar directamente la historia, estructura y operaciones del Cartel de Sinaloa sé que la realidad va mucho más allá y es más compleja que el reduccionista juicio de El Chapo.
Según el Instituto de Defensa y Análisis (IDA por sus siglas en inglés), asesora de la Secretaría de Defensa de Estados Unidos, el Cartel de Sinaloa tiene presencia en ochenta por cierto del territorio de este planeta: en todo el continente americano, en países como Inglaterra, Francia, Italia, Holanda, España y Alemania, y en África Occidental. En Asia en ciudades en India y China. Y llega hasta Australia y Nueva Zelanda.
La presencia territorial del Cartel y los impresionantes números de las ganancias netas del tráfico de drogas, obliga a hacer otro tipo de reflexión.
De acuerdo a un contador, cuyo testimonio en el juicio pasó totalmente desapercibido, el Cartel de Sinaloa compra en Colombia, Perú o Bolivia el kilo de cocaína en 2.500 dólares. Cuando ese kilo llega a México tiene un precio comercial al mayoreo de 15.000 dólares. Según el contador con la quinta o cuarta parte del valor comercial se cubre el costo bruto del producto incluyendo el transporte, el resto son ganancias. No importando a qué lugar del mundo llegue ese kilogramo, el Cartel tiene un margen de ganancias por kilo que va del 300 al 400 por ciento.
Los números se hacen más interesantes entre más lejos viajan esos mil gramos de droga. En Los Ángeles, California, el valor comercial al mayoreo es de 20.000 dólares; en Chicago, 25.000; en Nueva York, 35.000. En Italia 55.000, y en Australia 140.200 dólares. Es el dinero y no el talento criminal de El Chapo lo que permite que el negocio fluya más allá de las fronteras mexicanas. ¿Quién puede si quiera pensar que puede frenar un negocio que genera ese margen de ganancias encarcelando únicamente a Guzmán Loera? ¿Quién se queda realmente con la mayoría de esas ganancias?, esa es la pregunta que debió responderse en el juicio de El Chapo, pero que a ninguno convenía responder.
Estas cifras contrastan con uno de los secretos mejor guardados del gobierno de México: ¿Cuantas propiedades, empresas, dinero en efectivo, joyas, cuentas bancarias y cualquier otro tipo de bien se ha asegurado a Joaquín Guzmán Loera o a su familia, o personas vinculadas a él del año 2006 a diciembre de 2018, es decir durante los sexenios de Calderón y Peña Nieto y la "feroz” e "implacable” guerra contra el narcotráfico?
Solicité esta información a través de la ley de transparencia al nuevo gobierno de izquierda de Andrés Manuel López Obrador. Se negaron a darme los datos argumentando que podrían poner en peligro la seguridad nacional y las investigaciones en curso. Finalmente a través de recursos legales obtuve la secreta cifra: 3 relojes, 1 propiedad, 5 armas de fuego, 171 cartuchos, 5 cargadores, 1 equipo de cómputo y 3 teléfonos celulares. Las ridículas cifras y la celosa custodia de ellas hablan por sí mismas.
El gran juego de poder que significa el tráfico anual de toneladas de drogas a Estados Unidos y otras partes del mundo el cual controla el Cartel de Sinaloa sin la presencia de Guzmán Loera, continúa. Los amos del juego, los verdaderos amos, siguen, Joaquín Guzmán Loera es solo una ficha, un jugador, no es el dueño del juego.
La sentencia recién dictada contra El Chapo Guzmán en Nueva York tendrá una eficacia efímera en la opinión pública porque da cierta percepción de justicia. Pero no tendrá eficacia disuasiva en quienes deciden ser un engranaje de la inmensa maquinaria del tráfico de drogas mundial, mucho menos para los verdaderos jefes y beneficiarios de esa maquinaria. Ninguno de ellos es El Chapo, los principales responsables aún no están en prisión.
La periodista y autora Anabel Hernández escribe desde hace años sobre los carteles de la droga y la corrupción en México. Después de amenazas de muerte, tuvo que abandonar México y desde entonces vive en Europa. Por su trabajo recibió el premio DW Freedom of Speech Award 2019 en el Global Media Forum de la Deutsche Welle en Bonn.
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Periodistas asesinados en México entre diciembre de 2018 y julio de 2023
En Venezuela, Brasil y Nicaragua se viola cada vez más la libertad de prensa, pero México sigue siendo el país más mortífero para los periodistas: más de 30 han sido asesinados desde el 1 de diciembre de 2018.
Imagen: Daniel Cardenas/AA/picture alliance
Nelson Matus Peña († 15 de julio de 2023)
Nelson Matus Peña, director de la página de noticias Lo Real de Guerrero, fue asesinado a balazos el 15 de julio 2023 en la ciudad turística de Acapulco, en la costa del Pacífico mexicano. Tenía 15 años de experiencia como periodista y estaba especializado en la cobertura de información sobre violencia, comentó a la AFP Balbina Flores, delegada en México de Reporteros Sin Fronteras.
Imagen: Franciso Robles/AFP via Getty Images
Luis Martín Sánchez Iñíguez († 5 de julio de 2023)
Luis Martín Sánchez Iñíguez, corresponsal del periódico La Jornada en el estado de Nayarit, fue hallado el sábado, 7 de julio, sin vida en el poblado de Huachines, en el municipio de Tepic. Sánchez Iñíguez, de 59 años, se encontraba desaparecido desde el miércoles 5 de julio. De acuerdo con la organización Artículo 19, un total de 157 periodistas han sido asesinados en México desde 2000.
Imagen: La Jornada/AFP
Marco Aurelio Ramírez Hernández († 23 de mayo de 2023)
El 23 de mayo, el periodista y exfuncionario municipal Marco Aurelio Ramírez Hernández fue asesinado a tiros en la ciudad de Tehuacán, estado de Puebla, centro de México. Ramírez Hernández, de 69 años de edad, fue atacado a tiros mientras viajaba en su automóvil tras haber dejado su domicilio, cuando hombres armados le dispararon en varias ocasiones, provocando su muerte.
Imagen: ALFREDO ESTRELLA/AFP via Getty Images
Fredid Román († 23 de agosto de 2022)
El periodista y columnista mexicano Fredid Román fue asesinado en Chipancingo, capital del estado de Guerrero, en el sur del país. El crimen es el decimoquinto asesinato ocurrido en México contra periodistas en lo que va de 2022. Román fue atacado a tiros cuando estaba en su automóvil. Fue fundador del extinto diario impreso La Realidad, y actualmente escribía la columna La Realidad Escrita.
Imagen: Jesus Guerrero/AFP/Getty Images
Juan Arjón López († agosto de 2022)
El cuerpo del periodista Juan Arjón López, quien trabajaba como reportero independiente en la ciudad de San Luis Río Colorado, fue encontrado sin vida, según informó la Fiscalía General de Justicia del estado de Sonora (16.08.22). El periodista se encontraba desaparecido desde hacía una semana. Se trata del 14° asesinato de un periodista registrado en México en 2022.
Imagen: Pedro Pardo/AFP/Getty Images
Ernesto Méndez († 2 de agosto de 2022)
Un comando armado mató al periodista mexicano Ernesto Méndez en el estado de Guanajuato, hecho que representa el décimotercer asesinato de un comunicador en México en este año, según informó la asociación Artículo 19. La organización internacional precisó que el director del medio "Tu Voz" ya "tenía antecedentes de amenazas", por lo que se pidió a la Fiscalía especializada investigar el caso.
Imagen: article19mex/Twitter
Antonio de la Cruz († 29 de junio de 2022)
El periodista Antonio de la Cruz murió en un atentado en el que resultaron heridas su esposa e hija, con lo que suman 12 los reporteros asesinados este año en el país.
De la Cruz, periodista del diario regional Expreso, fue atacado en la mañana cuando salía de su casa en Ciudad Victoria, en el estado de Tamaulipas.
Imagen: REUTERS
Yessenia Mollinedo Falconi († 9 de mayo de 2022)
Yessenia Mollinedo Falconi, directora del portal de noticias El Veraz de Veracruz fue asesinada en un estacionamiento junto con la periodista Sheila Johana García Olivera. Con estas dos periodistas son once los asesinados en México en lo que va de año, según informa la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Sheila Johana García Olivera († 9 de mayo de 2022)
Sheila Johana García Olivera, camarógrafa del portal El Veraz de Veracruz fue asesinada en un estacionamiento junto con la periodista Yessenia Mollinedo Falconi. Con estas dos periodistas son once los asesinados en México en lo que va de año, según informa la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Imagen: Artur Widak/NurPhoto/picture alliance
Luis Enrique Ramírez Ramos († 4 de mayo de 2022)
El periodista mexicano Luis Enrique Ramírez Ramos, de 59 años, fue asesinado en el estado de Sinaloa (noroeste), convirtiéndose en el noveno comunicador que muere violentamente en el país en lo que va de 2022, informaron este jueves la Fiscalía y Reporteros Sin Fronteras. Ramírez era articulista del diario local El Debate y fundó el sitio de noticias Fuentes Fidedignas.
Imagen: Fuentes Fidedignas/REUTERS
Armando Linares († 15 de marzo de 2022)
El periodista Armando Linares, director del portal Monitor Michoacán, fue asesinado en el oeste de México, convirtiéndose así en el octavo comunicador víctima de homicidio en el país en lo que va de 2022. La fiscalía del estado de Michoacán confirmó el homicidio, ocurrido en un domicilio del municipio de Zitácuaro. El comunicador tenía impactos de arma de fuego.
Imagen: RSF_esp/twitter
Juan Carlos Muñiz († 4 de marzo de 2022)
El reportero Juan Carlos Muñiz, del medio Testigo Minero, fue asesinado a balazos el 4 de marzo en el municipio de Fresnillo, en el norteño estado mexicano de Zacatecas. Zacatecas es actualmente uno de los estados más golpeados por la violencia del narcotráfico en México, debido a una guerra entre los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, según autoridades y analistas.
Imagen: ZonaDocs/twitter
Jorge Camero († 24 de febrero de 2022)
Camero, quien dirigía el portal de noticias "El Informativo”, recibió varios disparos con un arma de fuego el jueves 24.02.2022, cuando se encontraba dentro de un gimnasio en la colonia Libertad del municipio Empalme, en el estado norteño de Sonora, anunció la Fiscalía General estatal. En el lugar se recolectaron ocho casquillos de bala calibre 9 milímetros. (24.02.2022).
Imagen: facebook.com/jorge.camerozazueta
Heber López Vázquez ( † 10 de febrero de 2022)
Heber López Vázquez, de 39 años, dirigía el sitio "Noticias Web" cuando fue baleado el 10 de febrero 2022, al salir de un estudio de grabación en la localidad de Salina Cruz, Oaxaca. Ya suman cinco los periodistas asesinados en 2022 en México, según registran medios y organizaciones defensoras de la libertad de prensa. Heber López cubría noticias sobre corrupción y había recibido amenazas en 2019.
Imagen: REUTERS
Roberto Toledo ( † 31 de enero de 2022)
El periodista Roberto Toledo, de 55 años, fue asesinado a balazos en el municipio de Zitácuaro, en el occidental estado mexicano de Michoacán. Toledo trabajaba para el medio Monitor Michoacán. El periodista fue atacado por tres sujetos armados en el estacionamiento del edificio donde se ubica Monitor Michoacán.
Imagen: Raquel Natalicchio/ZUMA/picture alliance
Lourdes Maldonado ( † 23 de enero de 2022)
Menos de una semana después de que un fotógrafo fuera asesinado en Tijuana, fue asesinada a balazos en esa misma ciudad la reportera Lourdes Maldonado, quien había denunciado amenazas ante el presidente. Tres día después, miles de periodistas de todos los estados de México se manifestaron para exigir justicia por los recientes asesinatos a informadores y para que se ponga fin de la violencia.
Imagen: Daniel Cardenas/AA/picture alliance
Margarito Martínez Esquivel ( † 17 de enero de 2022)
El fotoperiodista Margarito Martínez Esquivel, quien colaboraba para distintos medios locales impresos y digitales en Tijuana, fue asesinado a balazos a las afueras de su casa. Margarito Martínez Esquivel trabajaba como reportero gráfico para portales como Semanario Zeta, Cadena Noticias, Pulso Ciudadano, La Jornada Baja California y Punto Norte, entre otros.
Imagen: Sergio Maldonado/REUTERS
José Luis Gamboa Arenas ( † 10 de enero de 2022)
José Gamboa Arenas era director del medio digital Inforegio, y en su trabajo también daba difusión a problemas de inseguridad y temas políticos. Fue asesinado en un supuesto asalto en el Puerto de Veracruz, el 10 de enero de 2022.
Imagen: Colourbox
Alfredo Cardoso Echeverría ( † 31 de octubre de 2021)
El periodista Alfredo Cardoso, director de la revista Dos Costas, de la ciudad de Acapulco, falleció el domingo 31.01.2021 tras haber sido atacado a tiros el viernes anterior. Cardoso había sido secuestrado en la noche del jueves por sujetos encapuchados, quienes irrumpieron en su domicilio. Su familia había recibido amenazas, según detalló la organización Reporteros sin Fronteras.
Imagen: Manuel Velasquez/AA/picture alliance
Fredy López Arévalo ( † 29 de octubre de 2021)
En San Cristóbal de las Casas (foto) fue asesinado de un disparo el periodista mexicano Fredy López Arévalo, en la puerta de su vivienda, cuando salía de una celebración familiar. López Arévalo era editor de la revista Jovel y había pasado por diversos medios, includio El Universal, para el que fue corresponsal en Guatemala en la década de 1990.
Imagen: Reuters/E.Garrido
Jacinto Romero ( † 19 de agosto de 2021)
Jacinto Romero Flores, de 60 años, trabajaba para Oriestereo FM, estación en la que conducía un programa. Se encontraba en la comunidad de Potrerillo, en el municipio de Ixtaczoquitlán, cuando fue atacado. Según la oficina en México de la organización defensora de la libertad de expresión Reporteros sin Fronteras (RSF), el comunicador había denunciado que recibió amenazas en fecha reciente.
Imagen: Felix Marquez/AP/picture alliance
Cuatro asesinados más en pocos meses
La Sociedad Interamericana de Prensa condenó en una resolución del 22 de octubre de 2021, durante su 77 Asamblea General, los "impunes" asesinatos de seis periodistas mexicanos, incluidos Jacinto Romero y Benjamín Morales Hernández, ya recogidos en esta galería, a los que se suman a la fecha Ricardo Domínguez López, Abraham Mendoza, Saúl Tijerina Rentería y Gustavo Sánchez Cabrera.
Julio Valdivia trabajaba en el periódico "El Mundo" de Córdoba, Veracruz. Su cuerpo fue encontrado en Tezonapa cerca de su motocicleta. Dos meses más tarde sería asesinado el periodista Israel Vázquez Rangel, en Guanajuato. El 10 de diciembre de 2020 ocurrió lo mismo con Jaime Castaño Zacarías, en Zacatecas, y en mayo de 2021, con Benjamín Morales, de Sonora.
Imagen: Reuters/Diario El Mundo
Pablo Morrugares ( † 2 de agosto de 2020)
Pablo Morrugares es el séptimo periodista asesinado en México en 2020. Morrugares fue asesinado a disparos en Iguala el 2 de agosto. Morrugares es el segundo periodista que muere asesinado este año, a pesar de estar bajo protección federal para periodistas amenazados.“Las autoridades deben poner fin a la impunidad en los ataques contra la prensa", dijo Jan-Albert Hootsen, del CPJ.
Fidel Ávila Gómez ( † 8 de enero de 2020)
Fidel Ávila Gómez era periodista radiofónico y se convirtió en el primer comunicador asesinado mexicano del 2020. Su cuerpo fue encontrado en el interior de su propio vehículo con heridas causadas por proyectiles de armas de fuego. Llevaba desaparecido desde noviembre de 2019.
Imagen: Twitter/@FiscaliaMich
Nevith Condes Jaramillo ( † 24 de agosto de 2019)
El director de un portal informativo del Estado de México, Nevith Condés Jaramillo murió apuñalado en Tejupilco, con lo que ya son 13 los periodistas y comunicadores sociales asesinados en lo que va del año. Condés Jaramillo, de 42 años de edad, era director del portal de noticias Observatorio del Sur de Tejupilco, en el que reportaba sucesos cotidianos de la localidad y denuncias ciudadanas.
Imagen: elobservatoriodelsur.com
Jorge Celestino Ruiz ( † 2 de agosto de 2019)
El reportero Jorge Celestino Ruiz, del diario El Gráfico de Xalapa, fue atacado a tiros en el municipio de Actopan, en la región central del estado de Veracruz, confirmó el alcalde de la ciudad, Paulino Domínguez. "Se trató de un ataque con armas de fuego directo contra él", dijo el alcalde en conversación telefónica.
Imagen: eluniversal.com.mx
Rogelio Barragán ( † 30 de julio de 2019)
"El periodista Rogelio Barragán, director de Guerrero al Instante, fue asesinado. Su cuerpo fue encontrado hace algunas horas, maniatado y con señas de tortura al interior de un vehículo abandonado en el estado de Morelos", informó la Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos.
Imagen: red-crucero2.com
Norma Sarabia ( † 11 de junio de 2019)
Norma Sarabia fue asesinada a balazos a la entrada de su vivienda en Huimanguillo, estado de Tabasco. Mientras las autoridades investigaban el móvil del crimen, el director editorial del diario Tabasco Hoy, del que fue corresponsal durante 15 años, dijo a la agencia efe que Sarabia había manifestado varias veces temor por su seguridad. Periódicos como El Universal también informaron del caso.
Francisco Romero († 17 de mayo de 2019)
Francisco Romero fue hallado muerto sobre la avenida 115, afuera del bar Gotta, en la colonia Ejidal, en Playa del Carmen, Quintana Roo. Romero era administrador y director de la página de Facebook “Ocurrió Aquí”, además trabajaba para medios. Uno de sus últimos trabajos fue un reporte sobre una balacera en el bar Cervecería Chapultepec en donde falleció una persona y hubo 11 lesionados.
Imagen: www.sopitas.com
Telésforo Santiago Enríquez († 2 de mayo de 2019)
Telésforo Santiago Enríquez, fundador y presentador de la radio comunitaria 98.7 F. M. "El Cafetal", dirigida a la comunidad indígena de San Agustín Loxicha, en Oaxaca, fue asesinado este 2 de mayo. El periodista recibió múltiples impactos de bala durante una emboscada. En sus programas de radio, el comunicador analizaba y críticaba a funcionarios tanto municipales como del gobierno de Oaxaca.
Imagen: jornada.com
Omar Iván Camacho († 24 de marzo 2019)
El periodista deportivo Omar Iván Camacho fue asesinado, y su cuerpo encontrado bajo un puente en La Escalera, Salvador Alvarado, estado de Sinaloa. Su cuerpo presentaba signos de violencia y huellas de esposas. Iván Camacho fue el segundo periodista asesinado en solo 10 días.
Imagen: efe.com
Santiago Barroso († 15 de marzo 2019)
Santiago Barroso fue asesinado en la puerta de su casa San Luis Colorado, Sonora, la noche del 15 de marzo. Era anfitrión de “Buenos Días San Luis” de 107.1 FM Río Digital y director de Red 653. Fue columnista de Contraseña y profesor en la Universidad de San Luis Río Colorado. El fiscal señaló sus críticas al narcotráfico y personas en la frontera EE.UU.- México, como posible motivo del crimen.
Imagen: efe.com
Reynaldo López Salas († 16 de febrero 2019)
El periodista fue asesinado cuando el vehículo en el que viajaba junto con el exreportero de Televisa Sonora Carlos Cota, fue interceptado y baleado en el Boulevard Francisco Reynaldo Serna en Hermosillo, Sonora. Claudia Indira Contreras, de la Fiscalía de Justicia de Sonora, aseguró que el ataque contra López, el 16 de febrero, fue por "una confusión con un vehículo similar".
Imagen: sinembargo.mx
Jesús Eugenio Ramos Rodríguez († 9 de febrero de 2019)
Jesús Eugenio Ramos Rodríguez fue asesinado a balazos por un sicario en la mañana del 9 de febrero mientras desayunaba en un restaurante con un exalcalde y un exrector universitario. Ramos trabajaba desde hacía cerca de 20 años para la emisora Oye 99.9 FM, en el municipio Emiliano Zapata, del estado de Tabasco (sudeste del país).
Imagen: uniradioinforma.com
Rafael Murúa Manríquez († 20 de enero 2019)
Su cuerpo fue hallado con impactos de bala en una cuneta cerca de Mulegé, Baja California Sur. Desde 2017, según la ONG "Article 19", el reportero recibía "mensajes de un sujeto que le exigía eliminar una nota periodística sobre una persona sentenciada, así como publicar notas en contra de la Secretaría de Marina (Semar)". Murúa había sido incorporado al Mecanismo de Protección de Periodistas.
Imagen: vanguardia.com
Diego García Corona († 6 de diciembre 2018)
Este reportero del Semanario Morelos se convirtió en el 2° periodista en ser asesinado, al cumplirse 6 días de la nueva presidencia. García, de 35 años, fue asesinado en su auto en Ecatepec, estado de México. El vocero de la Presidencia condenó su muerte en Twitter y agregó que "trabajamos en plan de prevención, protección y acceso a la justicia que dé garantías a periodistas".
Imagen: adnpolitico.com
Jesús Alejandro Márquez Jiménez († 1° de diciembre 2018)
Justo el día en que AMLO asumió como presidente, fue asesinado el periodista Jesús Alejandro Márquez Jiménez, fundador del portal Orion Informativo que reportaba sobre casos de corrupción y malversaciones de fondos públicos.