El Bayern Múnich no logró llegar a un acuerdo con el ex entrenador Jürgen Klinsmann sobre el monto de una indemnización, por lo que le seguirá pagando el millonario salario a pesar de que lo despidió hace dos meses.

El manager del Bayern, Uli Hoeness, confirmó hoy que no tiene contacto alguno con el defenestrado entrenador y que las negociaciones, ahora fracasadas, fueron exclusivamente con su agente.

"No llegamos a ningún acuerdo", dijo Hoeness a la revista deportiva "Sport Bild". El club no está dispuesto a aceptar las exigencias de Klinsmann de que se le pague una indemnización –no cuantificada-, sino que prefiere seguir pagándole el salario, estimado en poco menos de cinco millones de euros (siete millones de dólares) anuales.

El club apuesta por que Klinsmann vuelva a conseguir trabajo en otro club, con lo que se rescindiría entonces el contrato vigente hasta mediados de 2010.

Klinsmann cesó el 27 de abril, cuando faltaban apenas cinco fechas para que terminara el campeonato alemán. En su lugar fue designado, por un mes, Jupp Heynckes. El entrenador para la próxima temporada es el holandés Louis van Gaal.

DPA