DW: El primer año de la era Klinsmann está por cumplirse. De los nueve partidos internacionales jugados bajo su conducción, Alemania sólo ha perdido uno, en Corea del Sur, y ha ganado cinco. ¿Cuál es su balance personal?

Jürgen Klinsmann: Pienso que nuestro balance es muy, my positivo. Sobre todo nos hemos integrado como equipo, no sólo a nivel de los entrenadores. Nos complementamos muy bien. También embarcamos a personas que nos han aportado mucha calidad. Pienso, por ejemplo, en el campo de la preparación física, en el que pudimos traer a entrenadores de Estados Unidos, en un sicólogo deportivo que incorporamos...

...y en las nuevas camisetas rojas?

Las camisetas se ven muy bien, pero no meten goles. Pienso que simplemente es magnífica la forma en que el equipo se ha presentado en los últimos 10 meses en cada partido, con mucho empuje, con mucho entusiasmo. Es un gusto enorme trabajar con este equipo. Hay mucho potencial disponible, que nos da la confianza necesaria para decir que en el Mundial que jugaremos en casa queremos competir por el título.

Antes del Mundial tendrá lugar la Copa de Confederaciones, del 15 al 29 de junio. Ocho países disputarán el trofeo, entre ellos, además de Alemania, selecciones de alto nivel como la de Brasil y Argentina. ¿Cuál es su pronóstico? ¿Quién ganará?

Naturalmente espero que nosotros. Es lo lógico. Si uno dice que quiere ganar el título mundial en el propio país, el mismo objetivo vale para este mini-Mundial, como se suele llamar a la Copa de Confederaciones.

¿Se trata para Ud. efectivamente de un ensayo general?

Es un ensayo general y un examen para nosotros. Cada partido nos permite evaluar el rendimiento del equipo y también se ve marcado por la ambición: cuando uno participa en un torneo como ése, no sólo se mide con muy buenos equipos de otras partes del mundo sino también quiere vencer a naciones como Argentina y Brasil. Aunque la temporada fue muy larga para los jugadores, éste es aliciente suficiente para nosotros.

¿Qué ocurrirá si no le resultan sus planes para el Mundial? ¡Se siente presionado?

Si, pero en el fútbol es totalmente normal que, si se tiene responsabilidad y las cosas no salen bien, se lo echen en cara, y ese sería de seguro el caso si nos fuera mal. Pero si pensara así no estaría bien en mi papel. Acometo esta labor con mucho optimismo. Y si las cosas no resultan, de todos modos no se podría parar la avalancha. A cualquier otro le ocurriría lo mismo.

Si pudiera Ud. elegir entre jugar lindo o ganar ¿qué le resulta más importante?

Las dos cosas. Ambas son importantes. Naturalmente quisiéramos jugar un fútbol atractivo. Pienso que en los últimos diez meses hemos sentado las bases para ello. Tenemos un equipo que puede jugar hacia adelante, que puede hacer un juego agresivo y muy rápido. Asumimos una filosofía en la que muchos jugadores se sienten reflejados - ellos se identifican con la selección nacional...

¿Podrá beneficiarse también Alemania de ese ánimo optimista de la selección? ¿Qué significaría un triunfo en el Mundial 2006 para Alemania? ¿Cuán importante es un buen desempeño de la selección alemana?

Naturalmente queremos generar un ánimo positivo, queremos que los jugadores tengan conciencia de que en cierto sentido representan un papel de embajadores de Alemania. Todo el mundo nos observará con mucha atención en este Mundial. Se informará de todo, ya sea que se trate de la selección nacional, de las ciudades o de las personas que viven en Alemania. Simplemente queremos transmitir una imagen excelente; queremos ser abiertos y mostrarle a la gente que Alemania ha evolucionado en forma increíblemente positiva, también después de la reunificación.

Ud. no vive en el Alemania. ¿Cómo evalúa la imagen del fútbol alemán en el extranjero?

Creo que en general se tienen gran respeto y admiración por el fútbol alemán en el extranjero. En ello ha influido ciertamente el hecho de que la selección alemana cuenta con tres títulos mundiales, tres títulos europeos y se sabe que siempre que entra a un torneo, el quipo alemán logra concentrarse en lo esencial. Sabemos que los contrincantes nos respetan. En lo que respecta a los clubes, ciertamente la situación no ha sido demasiado buena este año, porque los equipos quedaron eliminados relativamente temprano de la copa europea. Ahí perdimos algo de crédito, pero ese crédito se puede volver a ganar rápidamente.