Kosovo: fracasan negociaciones en la ONU
21 de julio de 2007Los países occidentales se pronunciaron en Nueva York a favor de continuar el proceso fuera de la ONU y traspasar el tema al Grupo de Contacto de Kosovo.
Tras una nueva amenaza de veto por parte de Rusia, las naciones occidentales desistieron de su planificada resolución sobre Kosovo en el Consejo. En una declaración conjunta, EE. UU., Francia, Gran Bretaña, Italia, Bélgica y Alemania expresaron que el mayor organismo de la ONU no pudo alcanzar una solución que conformara a todos. Indirectamente acusaron a Rusia de mantener una posición de bloqueo.
El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vitali Churkin, saludó el fin de las conversaciones de la ONU. El representante de Moscú consideró que de esta manera los países occidentales admitieron de hecho que hace falta más tiempo para negociar.
Rusia colaborará activamente en el Grupo de Contacto de Kosovo y participará también de la próxima reunión en Viena el 21 de julio. “No hay pausa en el proceso político y diplomático”, aseguró Churkin.
Grupo de Contacto: no hay derecho a veto
El Grupo de Contacto está formado por Rusia, EE. UU., Francia, Gran Bretaña, Italia y Alemania. A diferencia del Consejo de Seguridad de la ONU, en esta instancia no hay derecho a veto.
“Tendremos un nuevo proceso que no estará expuesto al veto ruso”, señaló el embajador estadounidense Zalmay Jalilzad.
La base de las negociaciones será de acuerdo con el deseo de Occidente la propuesta del enviado especial de la ONU Martti Ahtisaari, que prevé una independencia limitada de la provincia serbia de Kosovo bajo supervisión de la Unión Europea (UE).
“(Esta propuesta) es justa y equilibrada, y ofrece la mejor solución para una mayor estabilidad, no sólo en Kosovo, sino en toda la región”, señaló el comunicado conjunto. Rusia rechaza esta propuesta, respaldando la posición de Serbia.
¿Declaración unilateral de independencia?
Por su parte, el presidente del gobierno de Kosovo, Agim Ceku, propuso hoy el 28 de noviembre como fecha para una declaración de independencia de la región separatista del sur.
Ese día, celebrado por los albaneses de todo el mundo como el día de las banderas, el Parlamento de Kosovo podría declarar unilateralmente la soberanía de un nuevo Estado, dijo Ceku ante
periodistas en Pristina. Pero antes puede negociarse al respecto durante 120 días con Serbia, como prevén los planes estadounidenses y de la UE.
Kosovo espera recibir, después de esa posible declaración de independencia unilateral, el reconocimiento de Estados Unidos y de algunos grandes países de la UE.
La provincia de Kosovo es administrada desde junio de 1999 por las Naciones Unidas. Alrededor de dos millones de albaneses aspiran a la independencia, mientras los 100.000 serbios que viven en la
provincia, así como la república de Serbia, quieren que la región siga unida a Serbia. Belgrado ofrece en lugar de la independencia una amplia autonomía para la provincia.