1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Líder de ultraderecha alemana sufre duro revés

22 de abril de 2017

Frauke Petry solicitó debatir los lineamientos futuros de AfD, lo que fue rechazado por el congreso de la colectividad que encabeza.

Köln AfD Parteitag Frauke Petry
Imagen: Getty Images/S. Schuermann

Humillante, aplastante y vergonzoso fueron los adjetivos con que la prensa calificó el revés que vivió Frauke Petry, la líder y rostro más visible del partido de ultraderecha alemana Alternativa para Alemania (AfD). Esto porque en pleno congreso del conglomerado político no se admitió incluir en el debate la moción de Petry para definir los lineamiento futuros de la colectividad.

Más información:

Disturbios enmarcan congreso ultraderechista en Colonia

Ni una cerveza para la AfD

AfD, asamblea en medio de interrogantes

Petry, que hace unos días comunicó su decisión de no encabezar las listas del partido para las próximas elecciones generales del mismo, quiere que el partido tome el rumbo de la "realpolitik” para ser el encargado de llevar a cabo un "cambio espiritual y moral" en Alemania y en el resto de Europa. Con esto busca moderar la postura del partido para "ser una opción de poder  realista hasta 2021 para no dejar el terreno de juego de manera permanente en manos de los partidos establecidos".

La cara visible de los ultraderechistas alemanes, que además dirige la bancada de la AfD en el Parlamento de Sajonia, insistió en que quiere que AfD tenga capacidad a medio plazo de integrar en un futuro coaliciones de gobierno. Sin embargo, esta postura es rechazada por el ala más radical del partido, que es liderada por el ultranacionalista Björn Höcke.

La división en el seno del partido es una lucha de poder entre el ala moderada, representada por su líder, Frauke Petry, y los radicales aglutinados en torno al vicepresidente Alexander Gauland y el líder regional Björn Höcke que en esta oportunidad se le prohibió participar del congreso derechista y que enfrenta un proceso de expulsión.

Los disensos al interior de la colectividad han debilitado a la AfD, a la que ahora los sondeos pronostican de cara a las elecciones generales alemanas un 8 % o un 9 %, frente al 11 % o hasta el 13 % que se le auguraba unos meses atrás.

MN (efe,dpa)

Ir a la siguiente sección Tema del día DW

Tema del día DW

Ir a la siguiente sección Más de DW