Pasó el Mundial y quedó atrás la era Jürgen Klinsmann. Lo que continúa, por ahora, es el fútbol de corte ofensivo mostrado por la selección alemana durante el pasado campeonato del Mundo. El nuevo entrenador alemán, Joachim Löw (conocido coloquialmente como 'Jogi') tuvo esta semana su primera prueba y la aprobó con nota: su equipo, pese a las importantes bajas por lesión, ganó con claridad (3-0) a Suecia, que también afrontó el partido con las destacadas ausencias de Ljunberg y Ibrahimovic. El partido era preparatorio para las eliminatorias de la próxima Eurocopa de Austria y Suiza de 2008.

39 días después de que la selección alemana consiguiese el tercer puesto de la Copa del Mundo frente a Portugal, los jugadores de Löw volvían a saltar a un campo como conjunto (porque la Liga alemana ya empezó el fin de semana pasado). Estaba por ver si 'Jogi' sería capaz de empezar como seleccionador con buen pie: dos de los pilares de su centro del campo, Michael Ballack y Sebastian Kehl, no pudieron jugar por lesión. Löw se enfrentaba a su primera decisión táctica: buscarles sustitutos. Schneider, que actuó de capitán, y Tim Borowski fueron los encargados de dirigir al equipo desde el centro del campo.

La defensa también le provocó quebraderos de cabeza al debutante Löw: Mertesacker, Metzelder y Huth, tres de los centrales que más jugaron durante la era Klinsmann, tampoco estuvieron a su disposición. El técnico alemán confeccionó el centro de la defensa con Friedrich y Nowotny, que desplazaron nuevamente a Lahm al lateral derecho de la zaga.

Buen resultado

Las decisiones tomadas por Löw dieron un buen resultado: Schneider, uno de los centrocampistas elegidos por él para sustituir a los ausentes, abrió el marcador a los cuatro minutos del inicio del partido, y gracias precisamente a un centro de Borowski, el sustituto de Ballack en el medio del campo. El delantero Klose hizo el resto con dos tantos más: uno cuatro minutos después del primer gol y otro al filo del descanso.

"Estoy contento con resultado de mi primer partido como entrenador: desde luego, es un muy buen comienzo para afrontar con optimismo los próximos meses", declaró Löw tras el encuentro. El nuevo técnico alemán reconoció haberse "tranquilizado" tras los dos primeros rápidos tantos de su equipo. "Hemos dominado absolutamente la primera parte", afirmó el defensa Philipp Lahm, mientras que su compañero debutante Friedrich llamaba a la calma: "Debemos saber contener la euforia ante este buen resultado".

Curioso récord

Joachim Löw releva a Klismann con una tarea nada fácil en el horizonte: mantener el buen sabor de boca que la selección alemana dejó a sus seguidores tras el pasado Mundial, pese haber conseguido sólo un tercer puesto final. Los medios germanos le dan margen al nuevo técnico y le dedican elogios y aprobaciones en sus titulares.

Además, el sucesor de Klinsmann puede alardear ahora de haber conseguido un curioso récord: 'Jogi' se ha convertido en el primer seleccionador nacional alemán que logra que su equipo no encaje ni un solo gol en su debut.