En el partido amistoso contra Estados Unidos, el entrenador de la selección alemana, Joachim Löw, intentará darle la oportunidad de jugar a todos los jugadores posibles, dijo este martes (9.06.2015) en una conferencia de prensa junto con el entrenador estadounidense Jürgen Klinsmann. “Uno que otro jugador probablemente solo jugará en el primero o segundo tiempo” como, por ejemplo, Sami Khedira a quien le falta práctica, señaló. Por otro lado, aseguró que los defensores centrales Antonio Rüdiger y Shkodran Mustafi saldrán a la cancha. Su antecesor Jürgen Klinsmann calificó el partido de “experiencia especial. Es algo extraordinario”. Entre 2004 y 2006 Klinsmann fue asistente de Löw y desde 2011 entrena el once de Estados Unidos.

Asimismo, Löw dijo que les tiene mucho respeto a los estadounidenses. “Enfrentaremos a un adversario que se ha desarrollado enormemente en los últimos años”, subrayó el entrenador. Por ello es importante ir al partido con la actitud correcta.

Una defensa muy joven

No obstante, este miércoles Löw no contará con una defensa experimentada. Puesto que Benedikt Höwedes está herido, Mats Hummels canceló su participación y Jerome Boateng no se unirá al equipo hasta después del partido, la defensa de cuatro probablemente estará compuesta por Erik Durm (23 años/ 7 partidos internacionales), Antonio Rüdiger (22/5), Shkodran Mustafi (23/7) y Jonas Hector (25/3). Con ello, la edad media de la defensa es de apenas 23,3 años. En cuanto al portero, Löw solo podrá decidir entre Roman Weidenfeller (34), del Dortmund, que hasta ahora ha jugado en cuatro partidos internacionales y Ron-Robert Zieler (26) que ha defendido la portería en cinco ocasiones.

En el equipo de Estados Unidos jugarán por lo menos cinco “legionarios alemanes”: Timothy Chandler (Eintracht Frankfurt), John Anthony Brooks (Hertha BSC), Fabian Johnson (Borrusia Mönchengladbach) y Alfredo Morales (FC Ingolstadt).

Limpiar a la FIFA

Acerca del escándalo de la FIFA en torno a Sepp Blatter, el entrenador del once estadounidense dijo temer que todavía vaya a haber más revelaciones: “Si las autoridades estadounidenses tienen indicios, entonces seguirán investigando, y más cosas saldrán a la luz. Todo el mundo quiere que se limpie a la FIFA. Desde el punto de vista estadounidense una cosa es muy importante: lo que nuestras autoridades judiciales hacen, no tiene nada que ver con lo que nosotros hacemos. No tenemos ninguna información acerca de qué es lo que está pasando en la CONCACAF”. El próximo mes comienza la Copa de Oro, y “la cúpula está prácticamente disuelta”, dijo Klinsmann. “Estuvimos igual de conmocionados que el resto del mundo”.