La resolución que permite a los estados observadores de Naciones Unidas con misión permanente, actualmente Palestina y El Vaticano, izar sus banderas en la sede de la ONU en Nueva York fue aprobada este jueves (10.09.2015) en el marco de la Asamblea General. La propuesta fue acogida con 119 votos a favor, 8 en contra (incluidos Israel y Estados Unidos) y 45 abstenciones.

La medida es vista como un triunfo diplomático para los palestinos en su campaña para convertirse en un estado pleno. La institución tiene ahora 20 días para concretar la medida, lo que permitirá que la bandera palestina ondee al momento en que el presidente de la Autoridad Nacional, Mahmud Abbas, visite la ONU, el próximo 30 de septiembre. Los diplomáticos palestinos realizaron un fuerte lobby para que la resolución fuera aprobada.

El proyecto fue defendido por varios países de Asia, África y Latinoamérica. El estado palestino se convirtió en observador el 29 de noviembre de 2012. Hasta ahora, las normas de la ONU, creada hace siete décadas, establecían que sólo los miembros de pleno derecho tenían la potestad de colocar sus banderas en la sede de la ONU. El Vaticano ha dicho que, por el momento, no tiene intenciones de ver ondear su bandera en el frontis de Naciones Unidas.

“Símbolo vacío”

Estados Unidos se opuso firmemente a la propuesta. Su embajadora, Samantha Power, sostuvo que “izar la bandera palestina en la sede de la ONU no es una alternativa a las negociaciones (entre Palestina e Israel), y no acercará a las partes a la paz”. Además de EE.UU. e Israel, dieron su voto negativo Australia, Canadá, las Islas Marshall, Micronesia, Palau y Tuvalu.

El embajador israelí, Ron Prosor, afirmó que “ningún voto puede convertir un gesto simbólico vacío en un estado”. Agregó que las vidas de palestinos e israelíes “seguirán siendo las mismas si ondea o no una bandera palestina en Naciones Unidas” y sostuvo que todo lo que oculta este triunfo diplomático es “una oportunidad fotográfica” para Mahmud Abbas. De los países europeos, Francia y Suecia votaron a favor, mientras que Alemania, Austria, Finlandia, Holanda y Chipre se abstuvieron.

DZC (AFP, EFE)