"Cuando hay demandas de un progreso social siempre existe el riesgo de populismo, pero si vemos la historia reciente en Latinoamérica, todos los gobiernos llamados progresistas que han llegado al poder por medios democráticos han sido muy respetuosos con la situación macroeconómica", dijo Iglesias en la que es su primera visita oficial a Bruselas.

El secretario general iberoamericano llegó a Europa con el objetivo de mantener contactos institucionales con las autoridades comunitarias y de preparar la cuarta cumbre entre la Unión Europea y Latinoamérica, que se celebrará el 11 y 12 de mayo en Viena, y en la que se espera impulsar las relaciones entre la Unión Europea y América Latina.

Sin miedo al cambio

"Hay que estar preparado para aceptar los cambios", declaró Enrique Iglesias, "siempre y cuando se hagan con una buena gestión macroeconómica", añadió. A lo que la comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, contestó que estos cambios son "bienvenidos si no desestabilizan la democracia en otros países".

Según el secretario iberoamericano, "lo fundamental es que se está fortaleciendo la democracia en Latinoamérica". Y calificó como "interesante" el ejemplo de Bolivia, donde recalcó las intenciones del presidente Evo Morales de efectuar cambios orientados a la presencia y fortalecimiento de la comunidad indígena, "pero todo ello en democracia y en mercado".

Proyectar a América Latina

Iglesias dijo haber venido a Bruselas para dar "proyección internacional" a la comunidad iberoamericana en sus relaciones con Europa. "Me preocupa un poco cómo vamos perdiendo terreno en Europa en los últimos tiempos por razones comprensibles, quizá la propia

Ampliación (de la UE)", indicó. "Es importante que en Europa se entienda que América Latina es un continente que en muchos aspectos es una Europa extendida", añadió.

En la agenda de Iglesias de esta primera jornada estaban, además de la charla con Benita Ferrero-Waldner, los encuentros con con el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, con el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, con el alto representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, y con diversos diplomáticos de la comunidad iberoamericana.

Cuarta cumbre UE-América Latina

Iglesias se mostró esperanzado ante la perspectiva de la futura cumbre ibero-europea. Según el secretario, sería "muy importante" aprovechar la cumbre para concluir acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europa, pero reconoció que "no es fácil" y que los problemas de la ronda de Doha, sobre todo en materia agrícola, "están condicionando el avance de las negociaciones".

La comisaria Ferrero-Waldner, por su parte, no quiso pronosticar los resultados de la cumbre, en la que sin embargo confió en que haya avances hacia la apertura de negociaciones para un acuerdo de libre comercio con Centroamérica y la Comunidad Andina.

La Comisión Europea se ha propuesto "reforzar la relación estratégica" con América Latina en la cumbre mediante la creación de un foro sobre cohesión social, intercambios de estudiantes y profesores y créditos para propiciar la interconexión de infraestructuras en el subcontinente.