Ante la llegada de numerosos refugiados e inmigrantes, Alemania se enfrenta a desafíos inusuales y enormes. Y por el hecho de ser inusuales se acaba de formar una alianza igualmente inusual en pro de la multiculturalidad, la solidaridad, la democracia y el Estado de derecho para luchar contra la intolerancia, la misantropía y la violencia: la Alianza por la Solidaridad, la Tolerancia y la Democracia contra el Prejuicio, el Odio y la Violencia.

En una labor conjunta de organizaciones y federaciones de cooperación social, religiosas, deportivas, de beneficencia, protección ambiental y cultura, esta alianza forma probablemente una de las mayores coaliciones de la sociedad civil que jamás se hayan visto en Alemania.

Con nuestro llamado queremos enviar una señal política clara y urgente. Sí, los desafíos son grandes. Pero estamos convencidos de que podremos vencerlos juntos, como sociedad civil y codo a codo con los refugiados. Eso no será posible sin el esfuerzo de todas las partes, tanto nuestro como también de los refugiados e inmigrantes. Y tampoco será posible sin las condiciones necesarias, formuladas en nuestro llamado, y sin inversiones en educación, infraestructura y recursos humanos.

Necesitamos y ya tenemos una postura claramente definida frente a aquellos que contraponen el racismo, la misantropía y el odio a tales desafíos. Con más de 900 ataques contra albergues para refugiados y con el innegable guiño hacia la extrema derecha en numerosos países miembros de la Unión Europea, se ha generado una dinámica que es preciso frenar de inmediato.

Cada ataque a un albergue para refugiados es un ataque demás. Pero es necesario dejar en claro que el movimiento de mayor envergadura e importancia que se observa en estos momentos en Alemania y también en otros países que acogen a los refugiados es el gran y generoso compromiso de miles de voluntarias y voluntarios y el incansable empeño de colaboradoras y colaboradores en los municipios, las escuelas, la Policía, las empresas y en los alojamientos para refugiados e inmigrantes.

Con este llamado, nos oponemos a los populistas y extremistas de derecha -no importa bajo cuál disfraz se presenten- y proclamamos nuestro compromiso contra ellos en las calles, en los lugares de trabajo y en internet.

Dimos inicio a esta alianza porque los lugares de trabajo –sean escritorios o fábricas, obras en construcción o supermercados- son los lugares en los que la integración se vive en todas sus facetas. En ellos se reúnen personas de diferentes culturas y orígenes, desde hace décadas. La gente que emprende algo en conjunto tiene la oportunidad de conocerse y dejar de ser extraña. Nuestros socios de alianza se esforzarán por cumplir las metas de este llamamiento dentro de sus propias estructuras, pero también se desarrollarán modelos conjuntos.

Los diez socios actuales de esta iniciativa desean, además, que la Alianza por la Solidaridad, la Tolerancia y la Democracia contra el Prejuicio, el Odio y la Violencia crezca aún más. No se trata de un evento único y exclusivo. Para ello, en las próximas semanas promoveremos la cooperación de otras organizaciones o personalidades de la vida pública para que colaboren con nosotros y se unan a nuestro trabajo.