Este lunes (27.02.2024) fue arrestada Daniela Klette, de 65 años, en el barrio berlinés de Kreuzberg, tras más de 30 años de ser buscada por la policía. Se la acusa de haber pertenecido a la "Fracción del Ejército Rojo" (RAF) en la década de 1990 y de estar implicada en una serie de robos durante los últimos 20 años.

A principios de febrero, la Policía inició una nueva búsqueda de Klette, Burkhard Garweg (55) y Ernst-Volker Staub (69), conocidos como "los jubilados de la RAF". Una serie de robos hizo que las autoridades les siguieran la pista a los terroristas. Estos delitos no tuvieron ningún propósito politico, sino el de financiar los costos de su vida en la clandestinidad.

En Alemania no se ha pasado página con la RAF, sobre todo porque los asesinatos, atentados con bombas y atracos cometidos entre 1970 y 1998, con más de 30 muertos y más de 200 heridos aún, no se han esclarecido del todo.

El agente provocador Peter Urbach

Tampoco está claro el papel de la Oficina para la Protección de la Constitución en el fenómeno de que partes del movimiento de protesta estudiantil hayan derivado hacia el terrorismo a finales de los años 60 y principios de los 70 del siglo pasado. Para el politólogo hamburgués Wolfgang Kraushaar, una figura clave en este contexto es el agente de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución Peter Urbach (1941-2011). Kraushaar explicó en entrevista con DW hace unos años: "Urbach jugó un papel importante, pero no decisivo, en la transformación de un pequeño, pero duro núcleo de la escena de las manifestaciones de entonces en grupos militantes, y finalmente en círculos de los que surgió luego el terrorismo".

El líder estudiantil Rudi Dutschke resultó gravemente herido en un intento de asesinato por parte de un extremista de derecha. 2.000 estudiantes marcharon furiosos hacia el edificio de la editorial Springer que, con su rotativo Bild, había criticado masivamente las protestas estudiantiles y a Dutschke. Allí, el 11 de abril de 1968, según informa el experto en la RAF, Urbach tenía una cesta de mimbre con cócteles molotov, que distribuyó entre los enardecidos manifestantes. "Después de que no se lograra con el lanzamiento de los primeros artefactos incendiarios prender fuego a unos autos, Urbach les mostró cómo hacerlo. Luego volcaron esos vehículos para poder acceder mejor a los tanques de gasolina en la parte inferior y luego los encendieron. Después estallaron en llamas uno tras otro y se quemaron", explicó Kraushaar.

Para Kraushaar, Urbach fue el primero en distribuir armas de fuego en el marco de las protestas de izquierda, un agente provocador con una influencia significativa en las acciones de la oposición extraparlamentaria en ese momento.

Esto lleva a la pregunta de qué motivó al Senado de Berlín y probablemente a los aliados occidentales (EE. UU., Francia y Gran Bretaña, que ocuparon y controlaron Berlín Occidental hasta la reunificación alemana) a darle tanta libertad a un hombre así. Según Kraushaar, "el objetivo era animar a manifestantes particularmente militantes a desacreditarse a sí mismos y a otros, pero en última instancia a todo el movimiento extraparlamentario de izquierda con actos de violencia".

Bomba de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución

La RAF era el grupo terrorista de izquierda más conocido, pero no el único; otros fueron las Células Revolucionarias, el Movimiento 2 de Junio o Tupamaros de Berlín Occidental. Con este último comenzó el terrorismo en Alemania, recuerda el historiador Michael Sontheimer: con un atentado con bomba, que afortunadamente fracasó por casualidad, en el Centro Comunitario Judío de Berlín, abarrotado con 250 personas, en el 31. aniversario de los pogromos el 9 de noviembre de 1969. Y de nuevo se vio involucrada la Oficina para la Protección de la Constitución. Sontheimer, que abordó el movimiento de protesta de finales de los años 60 en el libro "Berlín - Ciudad de la revuelta", dijo a DW tras la publicación de la obra en 2018: "¡Hay que imaginarse esto!: se atacó una institución judía con una bomba de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, que consiguió ese Peter Urbach. Este es el comienzo del terrorismo en Alemania Occidental, en Berlín Occidental".

Décadas después de la fase tan sangrienta del terrorismo de la RAF, los investigadores buscarán ahora información sobre esa época interrogando a Klette y analizando su apartamento.

Dust y Garweg siguen en la clandestinidad. Daniela Klette tenía pasaporte italiano con una identidad falsa. Probablemente, la identificaron por sus huellas dactilares. En su departamento encontraron municiones.

(rmr/ers)