La tasa de inflación en Francia se redujo al 5,6 por ciento en marzo, 1,3 puntos menos que en febrero a causa de la energía, según el Instituto Nacional de Estadística (INSEE), que publicó este viernes (31.03.2023) sus primeras cifras provisionales.

El incremento interanual de los precios de la energía pasó del 14,1 por ciento en febrero al 4,9 por ciento en marzo, lo que se explica por el tirón súbito que habían experimentado con el comienzo de la invasión rusa de Ucrania a finales de febrero de 2022.

También hubo una muy ligera ralentización de los servicios, ya que la subida pasó del 3 por ciento en febrero al 2,9 por ciento en marzo.

En el otro extremo, los alimentos aceleraron su encarecimiento en marzo al 15,8 por ciento, frente al 14,8 por ciento el mes anterior. Eso se debió tanto a los productos frescos (del 15 por ciento en febrero al 16,6 por ciento en marzo) como al resto de los alimentos (del 14,8 por ciento al 15,6 por ciento).

Menos pronunciada fue el alza interanual de los productos manufacturados, del 4,7 por ciento en febrero al 4,8 por ciento en marzo. La tasa de inflación en Francia no había sido tan baja desde septiembre de 2022, cuando también se situó en el 5,6 por ciento. (EFE)