Este fin de semana los principales noticieros en Alemania mostraron con el poder de la imagen las marchas multitudinarias de inmigrantes latinoamericanos y asiáticos que protestaron en Nueva York y otras metrópolis estadounidenses en contra del endurecimiento de las leyes migratorias. Toda vez que nos encontramos ante un fenómeno global que no excluye a Europa, la opinión pública está sensibilizada ante este problema, como lo muestra un artículo de opinión publicado por uno de los diarios líderes alemanes, el conservador Frankfurter Allgemeine Zeitung.

En tiempos de guerra fría contra del terrorismo y el contrabando de drogas, el problema migratorio es una de las prioridades de todo país occidental, no menos desde la perspectiva de seguridad como de la política económica y laboral. En el caso de Estados Unidos hay que recordar que la mayor parte de los 500.000 inmigrantes que ingresan ilegalmente cada año son centro y sudamericanos.

Estallido de conflictos sociales

Si esta válvula se cierra abruptamente se detendrá el volumen de remesas que los inmigrantes envían a sus familias en sus países de origen. Si eso sucede, incluso un país como México, considerado desarrollado por pertenecer a la OCDE, tendría conflictos sociales de dimensiones considerables.

Todo país tiene su vecino en el Este, su "patio trasero" como dirían los estadounidenses. La mejor política de seguridad estadounidense, concluye el diario, es aquella que ataque de raíz el problema, aquella que sea también la mejor política económica y social para su vecino del sur.

A la sombra de la sociedad

Por su parte el diario Hamburger Abendblatt, señala que el presidente mexicano Vicente Fox, tuvo que esperar cinco años para recibir este reconocimiento de su poderoso vecino del norte. Bush exhortó a sacar a los inmigrantes de la sombra de la sociedad estadounidense. Según el Banco Interamericano de Desarrollo, BID, unos 25 millones de estadounidenses son de origen latinoamericano.

Las transferencias que envían, salvan de la quiebra a economías de países como El Salvador, Haití y Cuba. En el 2005, dichas remesas ascendieron a 53,600 millones de dólares y crecen en importancia año con año. En el 2005 se registró un aumento del 17%, y este año se espera un incremento similar.

Propuesta represiva

Lo que en Estados Unidos provoca malestar es la inmigración ilegal, integrada por unos 12 millones de personas, más de la mitad de ellos, mexicanos. En diciembre fue aprobada una represiva propuesta de ley que criminaliza la inmigración ilegal y propone aumentar en 3.000 kilómetros un muro de contención fronterizo de un costo de 2.000 millones de dólares.

La pobreza en la que se encuentra casi la mitad de los 100 millones de mexicanos que viven con menos de 5 dólares diarios es la causa de la inmigración explosiva. Eso, al otro lado de la frontera, es el salario mínimo por hora de trabajo. El TLCAN, Tratado de Libre Comercio de América del Norte que, junto con Estados Unidos y Canadá prometía mejorar la economía mexicana, ha provocado todo lo contrario. La brecha en el ingreso per cápita de ricos y pobres ha aumentado en los 12 años desde que dicho tratado entró en vigencia.

Fue el semanario británico The Economist, el primero en proponer que Estados Unidos destine fondos de infraestructura para mejorar los medios de transporte para que México saque provecho de los beneficios del libre comercio. Finalmente esto ocurrió con España y Portugal cuando ingresaron a la entonces Comunidad Económica Europea, CEE, en 1980.