La lucha contra los nombres de calles coloniales en Berlín
Gero Schließ
16 de julio de 2017
Asociaciones de africanos quieren hacer cambiar los nombres de calles berlinesas relacionadas con crímenes coloniales cometidos por Alemania. Ha llegado la hora de rendirle homenaje a las víctimas del colonialismo.
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"Decolonize Berlin", la Alianza para Descolonizar a Berlín reúne a un conglomerado de diversas ONG africanas y alemanas que buscan borrar del mapa capitalino alemán nombres de calles como la "del Moro", cerca del popular Gerdamenmarkt.
¿Es el término "Calle del Moro" racista? Me acuerdo que en la ópera 'La Flauta Mágica' de Mozart hay una figura de un negro lujurioso que acosa a las mujeres: el moro Monostatos. Asímismo existe el famoso "Moro de Sarotti", que lleva el nombre de unos chocolates. Un insulto a los descendientes de los antiguos esclavos en Alemania, toda vez que "moro" significaba antes "estúpido".
Según el historiador Christian Kopp, que investiga el pasado colonial para la Alianza para descolonizar a Berlín, "en Berlin-Mitte, en donde hoy los turistas se amontonan, vivían los esclavos negros en el siglo XVIII".
Hasta ahora siempre creí que la historia colonial de Alemania se había iniciado con el Kaiser Guillermo II y que había terminado con la estruendosa derrota en la Segunda Guerra Mundial. Un corto y vergonzante capítulo que degeneró en el cruel genocidio de las etnias Herero y Nama. ¡Vaya equivocación!
El Gran Príncipe Electoral fue un negociante de esclavos
Los antepasados de Federico el Grande, con poses de fino filósofo, eran comerciantes de esclavos y llevaron a muchos a Berlín. El mismo Gran Príncipe Electoral mantuvo una "fortaleza colonial" en Ghana e hizo una fortuna con diversas "transferencias" de esclavos al Caribe.
Federico el Grande vendía "moros" traídos en contra de su voluntad a Berlín para que deleitaran a las familias nobles en sus palacios haciendo música o sirviendo de criados y mensajeros. Así también era el cosmopolitismo de Prusia.
Casi 300 años después, los alemanes no hablan mucho del pasado colonial de su país, a pesar de las iniciativas de indemnización a Namibia y proyectos culturales, como el Foro Humboldt, el futuro Museo de las Culturas del Mundo de Berlín.
Ahora comprendo lo que motiva las iniciativas para borrar de las calles alemanas los nombres que evocan el cruento pasado colonial. A su vez, parece incomprensible que los residentes de la "Calle del Moro" en Berlín, hayan fundado otra asociación para no dejar cambiar dicho nombre, porque es "tradicional", actuando como si el comercio de esclavos fuera una "manifestación de la amistad germano-africana".
Gero Schließ (jov/lgc)
Racista, despiadada y cruel: la historia del colonialismo alemán
El Museo Histórico Alemán en Berlín realizó en 2016 la primera muestra dedicada a los variopintos capítulos de la historia colonial germana.
Imagen: public domain
"Nuestro futuro está sobre el agua"
Bajo el canciller Otto von Bismarck, el imperio colonial alemán se estableció en los territorios de la actual Namibia, Camerún, Togo, partes de Tanzania y Kenia. El emperdador Guillermo II, coronado en 1888, buscaba la expasión colonial aumentado las flotas (imagen). El Imperio Alemán deseaba su "lugar bajo el sol", declaró otro canciller posteriormente, Bernhard von Bülow, en 1897.
Imagen: picture alliance/dpa/K-D.Gabbert
Colonias alemanas
Se hicieron adquicisiones en el Pacífico (el norte de Nueva Guinea, el Archipiélago de Bismarck, las Islas Salomón y Marshall, Samoa) y en China (Tsingtao). En un congreso en Bruselas en 1890 se dictaminó que el Imperio Alemán obtendría los reinos de Ruanda y Burundi, conectándolos al este africano alemán. Al final del siglo XIX, la conquistas coloniales alemanas se habían completado .
Imagen: picture-alliance / akg-images
Un sistema de desigualdad
La población blanca en las colonias era reducida y muy privilegiada, rara vez suponía más del 1% de la población. En 1914, alrededor de 25.000 alemanes vivían en las colonias, considerablemente menos que la mitad de ellos en África del Suroeste. Los 13 millones de nativos en las colonias alemanas estaban considerados subordiandaos sin acceso a recursos legales.
Imagen: picture-alliance/dpa/arkivi
El primer genocidio del siglo XX
El genocidio contra los herero y los namaqua en África del Suroeste, en la actualidad Namibia, es el peor crimen de la historia colonial alemana. Durante la Batalla de Waterberg en 1904, la mayoría de los rebeldes herero huyeron hacia el desierto, donde las tropas alemanas bloquearon sistemáticamente el acceso de estos al agua. Se estima que fallecieron más de 60.000 herero.
Imagen: public domain
Crimen alemán
Solo alrededor de 16.000 herero sobrevivieron la campaña de exterminación. Estuvieron detenidos en los campos de concentración, donde muchos fallecieron. Nunca se pudo determinar la cifra exacta de muertos y en la actualidad sigue siendo un tema controvertido. ¿Cuánto tiempo sobrevivieron después de huir por el desierto? Perdieron todas sus pertenencias, su sustento y sus perspectivas de futuro.
Imagen: public domain
Guerra colonial con consecuencias
Entre 1905 y 1907, una amplia alianza de grupos étnicos se alzaron contra la norma colonial en África del Suroeste. Se estima que fallecieron 100.000 nativos en la rebelión de Maji-Maji. Aunque no es un tema que se haya debatido mucho en Alemania, sigue siendo un capítulo importante de la historia de Tanzania.
Imagen: Downluke
Reformas en 1907
Tras las consecuencias de las guerras coloniales, se restructuró la administración de las colonias alemanas con el fin de mejorar las condiciones de vida. Bernhard Dernburg, un empresario exitoso (imagen), se conviritió en 1907 en el Secretario de Estado de Asuntos Coloniales e introdujo reformas en la política colonial alemana.
Imagen: picture alliance/akg-images
Ciencias en colonias
En el marco de las reformas de Dernburg, se crearon instituciones científicas y técnicas para tratar asuntos coloniales, creando facultades en las universidades actuales de Hamburgo y Kassel. En 1906, Robert Koch dirigió una gran expedición al este africano para investigar la trasmisión de la enfermedad del sueño. La imagen muestra los especímenes microscópicos recolectados allí.
Imagen: Deutsches Historisches Museum/T. Bruns
Pérdida de las colonias
Derrotada en la Primera Guerra Mundial, Alemania firmó el tratado de paz en Versalles en 1919, especificando que el país renunciaría a la soberanía colonial. La imagen muestra el temor de Alemania a perder poder económico y a caer en la pobreza y la miseria.
Imagen: DW/J. Hitz
Ambiciones coloniales del Tercer Reich
Las aspiraciones coloniales resurgieron con los nazis. Y no solo con el "Plan General del Este" concebido para colonizar el Este de Europa a través del genocidio y la limpieza étnica. Los nazis también pretendían recuperar las colonias africanas perdidas, como evidencia este mapa de 1938, para proveer a Alemania con sus recursos.
Imagen: DW/J. Hitz
Proceso espinoso
Las negociaciones por una declaración conjunta sobre el genocidio se hallan en una fase difícil. Mientras Alemania no avanza en cuanto a compesaciones económicas se refiere, las estructuras políticas internas de Namibia también tienen sus deficiencias. Los representantes de los herero derivaron una demanda oficial a las Naciones Unidas para objetar su exclusión de las negociaciones actuales.