A raiz de los recientes ataques de rebeldes contra fuerzas de seguridad del Estado, unos 3 mil rohinyás han huido a Bangladesh en los últimos días.
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El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, condenó este lunes (28.08.2017) el nuevo estallido de violencia en Birmania, que desde el viernes ha dejado un centenar de muertos. Guterres urgió al Gobierno de ese país asiático a implementar las recomendaciones del diplomático Kofi Annan para frenar la violencia.
"El secretario general está profundamente preocupado por los informes sobre muertes de civiles durante las operaciones de seguridad en el estado de Rakhine en Birmania", dijo en un comunicado el portavoz de Guterres, Stephane Dujarric.
Guterres reiteró "la importancia de dirigirse a la raíz de la violencia y la responsabilidad del Gobierno de Birmania de proveer seguridad y asistencia a quienes lo necesiten", señaló Dujarric.
La escalada de violencia ocurrió a represalia de ataques contra fuerzas de seguridad que perpetraron los rebeldes rohinyás en el conflictivo estado de Rakhine el pasado viernes.
Más de un millón de rohinyás viven en Rakhine, donde la comunidad ha sufrido bajo una creciente discriminación desde el brote de violencia sectaria de 2012, donde murieron 160 personas y unas 120.000 quedaron desplazadas.
Las autoridades birmanas no reconocen la ciudadanía de los rohinyás, los consideran inmigrantes ilegales bengalíes y les imponen múltiples restricciones.
La líder de facto del Gobierno de Birmania, Aung San Suu Kyi, acusó a las organizaciones extranjeras de connivencia con los rebeldes de la minoría rohinyá, a los que denominó de "terroristas extremistas bengalíes".
Por su parte, los rebeldes acusaron al Ejército birmano de cometer crímenes de guerra contra civiles rohinyás y defendieron la legitimidad de sus ataques contra las fuerzas del Estado.
Un día antes del estallido de violencia, una comisión liderada por el exsecretario general de la ONU Kofi Annan presentó un informe con 88 recomendaciones para poner fin a la violencia sectaria en Rakhine y promover el desarrollo de la región.
Guterres expresó su apoyo total a las recomendaciones del informe de Annan y urgió al Gobierno birmano "a implementarlas efectivamente".
Los Rohinyás huyen
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) estima que "más de 3.000" rohinyás podrían haber entrado al vecino país de Bangladesh desde que comenzó el brote de violencia el pasado viernes.
El Gobierno de Dacca se ha resistido a aceptar los nuevos refugiados y ha desplegado fuerzas de seguridad en la frontera, sobre todo a orillas del río Naf, entre Bangladesh y Birmania.
Las autoridades de Bangladesh ya han expulsado a al menos 511 rohinyás, 221 en las últimas 24 horas
"Debido al flujo natural de gente en movimiento, las cifras están cambiando. Muchos de los recién llegados son mujeres y niños, incluidos algunos que no vienen acompañados", informó Joseph Surjamoni Tripura, portavoz del organismo de la ONU en Bangladesh.
Por el momento, ACNUR se ha encargado de recibir a los recién llegados a Bangladesh con sus "propios recursos". En coordinación con el Programa Mundial de Alimentos (PMA), han entregado raciones de comida a los nuevos refugiados, además de información sobre otros servicios disponibles, "incluida asistencia médica", detalló el portavoz.
JCG (EFE, Reuters)
El destino de los refugiados: huir hacia una vida incierta
Las imágenes de las grandes masas de refugiados de camino hacia Europa en 2015 y 2016 dieron la vuelta al mundo. Nunca se había documentado de forma tan amplia el sufrimiento que implica el proceso de la huida.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Messinis
El objetivo principal: sobrevivir
Un viaje vinculado a las penurias y a los peligros para el cuerpo y el alma: huyendo de la guerra y la miseria, más de un millón de personas, sobre todo de Siria, se pusieron en camino en 2015 y 2016 hacia Turquía y Grecia. En las islas de Lesbos, Quíos y Samos todavía aguantan más de 10.000 personas en los campamentos. Desde enero hasta mayo de 2017, llegaron más de 6.000 nuevos refugiados.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Messinis
A pie hacia Europa
Millones de personas intentaron llegar en 2015 y 2016 a Europa Occidental desde Grecia o Turquía siguiendo a pie la ruta de los Balcanes a través de Macedonia, Serbia y Hungría. Las masas de gente disminuyeron cuando se canceló oficialmente esta ruta y muchos países cerraron sus fronteras. Hoy, la mayoría de los refugiados llega a través de otra ruta muy peligrosa, de Libia a Europa por mar.
Imagen: Getty Images/J. Mitchell
Conmoción mundial
La imagen del niño de tres años, Aylan Kurdi, muerto en una playa turca dio la vuelta al mundo, causando una gran conmoción. Las imágenes de dicha tragedia se hicieron virales y se convierton en el símbolo de la crisis de los refugiados sirios. Europa no debe mirar hacia otro lado, era el mensaje que aparecía en las redes sociales.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/DHA
Caos y desesperación
Avalancha en el último minuto. Muchos sabían que su única vía de escape a través de Europa ya no estaba abierta, así que miles de personas intentaron desesperadas tomar trenes y buses abarrotados en Croacia. Unos días más tarde, Hungría también cerró sus fronteras. Al mismo tiempo, adecuaron contenedores, para que los refugiados pudieran quedarse hasta que llevasen a cabo su proceso de asilo.
Imagen: Getty Images/J. J. Mitchell
Ataques contra los refugiados
La irritación de la opinión pública fue enorme cuando una camarógrafa húngara puso una zancadilla a un hombre con su hijo en brazos, que intentaba cruzar un bloqueo principal en Röszke, Hungría, cerca de la frontera. En uno de los momentos más críticos de la crisis de los refugiados, en Alemania también aumentaron los altercados y ataques contra los refugiados.
Imagen: Reuters/M. Djurica
Fronteras cerradas
Cuando se cerró la ruta de los Balcanes en marzo de 2016, se produjeron muchos tumultos en las zonas froterizas. Miles de refugiados se quedaron atascados y la policía reaccionó de forma ruda. Muchos intentaron, como estos refugiados cerca de la frontera entre Grecia y Macedonia, evitar las fronteras, que se habían cerrado hacía poco tiempo.
Un niño bañado en polvo y sangre. La foto de Omran en Alepo, de cinco años de edad, dejó a la opinión pública en estado de shock y se convirtió en el símbolo de la crueldad de la guerra civil siria y la miseria del pueblo sirio. Un año más tarde, la red mostró nuevas fotos del menor en buen estado de salud. Los seguidores de Al Assad criticaron entonces que la imagen se usó como propaganda.
Imagen: picture-alliance/dpa/Aleppo Media Center
Incertidumbre en la nueva patria
Un hombre sirio carga a su hija, bajo la lluvia, en la frontera griego-macedonia, cerca de Idomeni. Espera encontrar seguridad para su familia en Europa. Según el Reglamento de Dublín, las solicitudes de asilo se deben procesar en el país de llegada de la UE. Muchos tuvieron que regresar al país de llegada. Grecia e Italia están sobre todo superados por la cantidad de solicitudes de asilo.
Imagen: Reuters/Y. Behrakis
Esperando el apoyo de Alemania
Alemania es el país de destino número uno de los refugiados, aunque su política de refugiados y de asilo se haya vuelto más restrictiva debido al gran flujo de inmigrantes. En Europa, ningún país ha acogido a tantos refugiados como Alemania: 1,2 millones. La canciller Angela Merkel se convirtió en un ícono para muchos de ellos.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Hoppe
Estado de emergencia en los campamentos de acogida
El campamento de acogida de refugiados en el norte de Francia, en Calais, fue desalojado. El lugar se incendió y las cerca de 6.500 personas tuvieron que ser evacuadas y ubicadas en otros centros. Medio año más tarde, los informes de organizaciones humanitarias aseguran que muchos menores siguen merodeando y viviendo en los alrededores de Calais.
Imagen: picture-alliance/dpa/E. Laurent
Ahogados en el Mar Mediterráneo
Las embarcaciones de salvamento marítimo civiles y estatales no paran. A pesar del peligro extremo que pueden correr sus vidas, muchos refugiados huyen de la pobreza o de la guerra en sus países con la esperanza de tener un futuro mejor en Europa. Solo en 2017, 1.800 personas han perecido en el viaje. En 2016, 5.000.
Imagen: picture alliance/AP Photo/E. Morenatti
Sin ley en Libia
Cientos de miles de refugiados del África subsahariana y de Oriente Próximo esperan en los campamentos de Libia para poder cruzar a Europa por mar. La situación en dichos campamentos es catastrófica, advierten las organizaciones humanitarias. Hay testigos que hablan de esclavitud y prostitución forzada. Y a pesar de todo, no dejan de soñar con Europa.
Imagen: Narciso Contreras, courtesy by Fondation Carmignac