En la película “Una vida alemana“, la taquígrafa de Goebbels, Brunhilde Pomsel, habla sobre la época en que trabajó con el ministro de Propaganda nazi. La cinta llega ahora a los cines. DW conversó con sus autores.
Imagen: Filmfest München 2016
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¿Cómo era la vida durante el nacionalsocialismo? ¿Sabía la gente de los crímenes nazis? Estas preguntas, que aún hoy determinan el debate sobre el período entre 1933 y 1945, forman la estructura central de la película "Una vida alemana”. Christian Krönes, Olaf Müller, Roland Schrotthofer y Florian Weigensamer comenzaron hace cinco años a entrevistar a Brunhilde Pomsel, quien durante los tres últimos años de la II Guerra Mundial fuera secretaria del Ministerio de Propaganda y taquígrafa personal de Joseph Goebbels.
Es una película minimalista, rodada en blanco y negro. Las largas secuencias de conversación solo son interrumpidas por breves trozos de documentales, tanto de los nazis como de los aliados. No hay contrapreguntas ni comentarios. Un recurso estético, dirigido a hacer pensar al espectador.
Brunhilde Pomsel murió en enero de 2017. Sobre la cinta, que ahora llega a los cines, conversamos con Christian Krönes y Florian Weigensamer.
DW: ¿Accedió Brunhilde Pomsel de inmediato a hacer esta película con ustedes?
Krönes: Dimos con la Sra. Pomsel casualmente, mientras investigábamos otra cosa. Este encuentro con una leyenda viviente nos motivó a hacer el intento. Cuando comenzamos, ella tenía 101 años, de modo que sabíamos que no disponíamos de mucho tiempo. Pero queríamos hacerlo a como diera lugar.
Los realizadores junto a Brunhilde Pomsel.Imagen: Filmfest München
Al ver la película, uno tiene la impresión de que la Sra. Pomsel habla con sinceridad y también reflexiona. ¿Tuvieron esa misma sensación durante la filmación?
Krönes: No creo que se haya reprimido. De seguro reflexionó. También sobre la actualidad y sobre su propia vida. Seguramente hubo cosas que no nos contó. Pero cuando le mostramos la película, que le gustó mucho, dijo una frase memorable sobre la importancia que tiene, al término de la vida, mirarse en un espejo para ver todo lo que se hizo mal.
Hay un vaivén entre el rechazo de culpas y su reconocimiento. ¿No es acaso el reflejo del comportamiento de mucha gente al término de la guerra?
Krönes: Creo que ella representa a millones de personas que hicieron posible ese sistema. Ese probablemente sea el aspecto que vuelve esta película, este documento histórico, tan relevante para la actualidad. El film da cuenta de una sociedad que se descarrila: Crisis económica mundial, desempleo, auge del nacionalsocialismo. Una década más tarde, todo eso desemboca en una de las mayores catástrofes de la historia de la humanidad.
En una escena, la Sra. Pomsel muestra una reacción muy emocional, al hablar de la muerte de los niños de Goebbels. No ocurre tanto al hablar de otras víctimas…
Momentos de reflexión.Imagen: Filmfest München 2016
Weigensamer: Hay otra escena más, que se trata de Sophie Scholl y la resistencia. La Sra. Pompsel opinó "esos pobres jóvenes, ejecutados por un panfleto”. Me parece que ambas escenas muestran muy bien que a la Sra. Pomsel solo le importaban las emociones personales y no el cuadro político en su conjunto. Nunca vio eso. A ella le daban pena las dos personas que habían sido ejecutadas por un panfleto. Algo parecido ocurre con los hijos de Goebbels. Solo se trata, para ella, de emociones personales y no de toda la locura circundante.
Las secuencias documentales en la película no son comentadas, Tampoco las filmadas por los aliados. ¿Por qué?
Weigensamer: Naturalmente tenía que haber en cierto sentido también un contrapunto a la visión de la Sra. Pomsel sobre ese tiempo: "Dios mío, los judíos…de eso no me enteré… los campos de concentración”. Hay que mostrar que uno podía enterarse si quería. Ese es el reproche que se le puede hacer. Mirar hacia otro lado, y ser apolítico, ya es culpa suficiente.
La II Guerra Mundial en Europa
El 1º de septiembre de 1939, las fuerzas de la Wehrmacht de Hitler invadieron Polonia. Los pueblos europeos lucharon unos contra otros hasta el 8 de mayo de 1945, día de la liberación de Europa del régimen nazi.
Imagen: AP
Invasión de Polonia
El 1º de septiembre de 1939, las fuerzas de la Wehrmacht de la Alemania nazi atacaron Polonia, según Hitler, para responder a los ataques de ese país, lo cual fue una mentira para justificar la invasión. Francia y Gran Bretaña, aliados de Polonia, también le declararon la guerra a Alemania, pero no se inmiscuyeron en los combates. También Italia, aliado de Alemania, se mantuvo en espera.
Ejército soviético ocupa Polonia
Polonia apenas contaba con medios militares para contraatacar a la Alemania nazi, que venció a las tropas polacas en cinco semanas. El 17/9/1939, el Ejército soviético ocupó el este de Polonia como resultado de un acuerdo secreto al que el Imperio Alemán y la URSS llegaron una semana antes del ataque alemán a Polonia.
Imagen: AP
Ocupación de Dinamarca
La Wehrmacht invadió Dinamarca en abril de 1940, usando ese país como trampolín hacia Noruega. Desde allí llegaban materias primas necesarias para la Alemania nazi en guerra. Gran Bretaña intentó interrumpir el abastecimiento enviando soldados a Noruega, pero allí los aliados también capitularon en junio. La campaña nazi hacia Occidente ya había comenzado.
Ocupación nazi de Holanda, Bélgica y Luxemburgo
El 10 de mayo de 1940, la Wehrmacht atacó a Holanda, Luxemburgo y Bélgica, países neutrales. Los ocupó en un lapso de pocos días sorteando la fortificación militar francesa.
Imagen: picture alliance/akg-images
Los nazis ocupan París
Los alemanes atacaron por la espalda a las tropas francesas y se dirigieron a París, que fue ocupada a mitades de junio. El 22 de junio de 1940, Francia capituló y fue divida en un territorio ocupado por la Alemania nazi y en la Francia de Vichy, gobernada por un gobierno títere del régimen bajo el mando del general Pétain.
Imagen: ullstein bild/SZ Photo
Ataque nazi a Gran Bretaña
Hitler bombardeó Gran Bretaña en el verano de 1940, dejando a ciudades como Coventry convertidas en cenizas y escombros. Al mismo tiempo, aviones nazis y británicos luchaban en el espacio aéreo del Canal de La Mancha, entre el norte de Francia y el sur de Inglaterra. La Royal Air Force venció a la Fuerza Aérea Alemana, y en 1941, los ataques nazis cesaron considerablemente.
Imagen: Getty Images
Invasión del sur y este de Europa
Luego de las derrotas contra Gran Bretaña, Hitler se dirigió hacia el sur, y luego hacia el este de Europa, llegando incluso hasta el norte de África, los Balcanes y la Unión Soviética.
Invasión de Yugoslavia
El 6 de abril de 1941, fuerzas alemanas, italianas, húngaras y búlgaras invadieron Yugoslavia, acabando con la rendición del ejército yugoslavo el 17 de abril y con la creación de un estado títere en Croacia y Serbia. También el 6 de abril, Alemania invadió Grecia desde Bulgaria.
Imagen: picture-alliance/akg-images
"Operación Barbarroja"
La "Operación Barbarroja", emprendida el 22 de junio de 1941, fue el nombre en clave dado por Adolf Hitler al plan de invasión de la Unión Soviética por parte de las Fuerzas del Eje durante la Segunda Guerra Mundial. Esta operación abrió el Frente Oriental, que se convirtió en el teatro de operaciones más grande de la guerra.
Imagen: Getty Images
1942, punto de inflexión
Al principio, el Ejército Rojo de la URSS opuso apenas resistencia al ataque nazi, pero luego la Wehrmacht sufrió graves pérdidas, y se vio debilitada. Hitler dominaba casi toda Europa, parte de África del Norte y de la Unión Soviética, pero en 1942, el desarrollo de la guerra dio un giro decisivo.
Retirada de África
Italia, aliado de Alemania, entró en guerra en junio de 1940, y atacó a las tropas británicas en el norte de África. Hitler envió refuerzos en 1941. Luego de la batalla de El Alamain, en otoño de 1942, los alemanes emprendieron la retirada de África y capitularon el 13 de mayo de 1943.
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Campos de exterminio nazis
En el este de Europa, el régimen de Adolf Hitler erigió campos de exterminio como los de Auschwitz-Birkenau. Más de seis millones de personas fueron asesinadas por los nazis en estos campos de la manera más inhumana. En esos crímenes también participaron miles de soldados alemanes y oficiales de las SS.
Imagen: Yad Vashem Photo Archives
Los Aliados llegan a Italia
En el cuarto año de la guerra, la guerra cambió su derrotero: en el este, el Ejército Rojo se dispuso a contraatacar a los nazis, y las fuerzas occidentales aliadas llegaban a Italia, con lo cual los nazis se dieron a la retirada.
Batalla de Stalingrado
El 6 de enero de 1942, Stalin, confiado después de su victoria en Moscú, ordenó una contraofensiva general. El símbolo del giro que dio la guerra fue la capitulación de Stalingrado. Los alemanes vieron que la lucha no tenía sentido.
Imagen: picture-alliance/dpa
Invasión de Italia
Los aliados desembarcaron en Italia en septiembre de 1943, a lo que Hitler respondió invadiendo ese país.
En el este de Europa, el Ejército Rojo hacía retirarse a los nazis cada vez más. Asimismo, los aliados occidentales reforzaron su ofensiva y desembarcaron en Normandía, Francia, en la primavera de 1944.
Entrada de los Aliados
En el invierno boreal de 1944/1945 los Aliados logran romper la resistencia nazi en el oeste de Europa y se movilizan para atacar al régimen nazi.
Imagen: imago/United Archives
Capitulación del régimen nazi
El 8 de mayo de 1945, la Alemania nazi capituló sin condiciones. Hitler se había suicidado el 30 de abril de 1945. Europa se enfrentaba a los despojos y al horror que dejó la II Guerra Mundial, en la que murieron casi 50 millones de personas en Europa.