Un fatídico día para la Unión Europea: la ansiada política exterior común, que debería reforzar el peso de Europa en el mundo, fracasó en la cuestión siria. Los ministros de Exteriores no se pusieron de acuerdo, y el embargo de armas que expira el viernes no se prolongará. La jornada maratoniana tuvo un disputado final. Francia y Gran Bretaña podrán proveer de armas a los rebeldes.