Era el mito de la Alemania de la posguerra, y símbolo del "milagro económico alemán", término que se refiere al tremendo auge económico de este país en los años 50. Incluso el equipo nacional de fútbol realizó su paseo triunfal en un "escarabajo" abierto cuando ganó la copa mundial en 1954.

También se hizo una película en la que el pequeño escarabajo "Herbie" ocupaba el papel protagonista. Era un coche de carreras con vida propia, el número 54. No hablaba, pero tenía su propia voluntad, y a pesar de su tamaño ganó en todas las carreras.

Los orígenes del legendario modelo datan de los años 30, cuando el régimen nazi lo promovió como "coche del pueblo", lo que en alemán significa precisamente "Volkswagen". Efectivamente sirvió como símbolo de identificación para un amplio espectro de la población. Años más tarde, adquirió gran popularidad entre los "hippies".

Vida trasatlántica

En 1978, terminó la producción del escarabajo en Alemania, pero siguió en América Latina. Desde 1996, cuando también en Brasil se dejó de producirlo, la planta mexicana de Puebla quedaba como última factoría del emblemático modelo, que en realidad se llama "Sedan".

Ahora un portavoz de Volkswagen confirmó la noticia de que el grupo quiere dejar de producir el antiguo modelo – los hermanos de aquel "Herbie" del cine – antes de finales de 2003. Probablemente, ya en verano de este año. El coche casi ya no tiene compradores. Las ventas bajaron a unos 50 al día.

El mito seguirá

El escarabajo es el coche que más se construyó en el mundo: desde la Segunda Guerra Mundial, se han fabricado unos 21,5 millones de unidades. Pero aunque se deje de fabricar el modelo antiguo, seguirá la producción de la nueva versión.

Una cosa queda clara: el mito del escarabajo va a sobrevivir. Existen unos cientos clubes de aficionados al pequeño coche en el mundo, y hay revistas y páginas web que cuentan del antiguo "bocho".