1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Las noches de Portugal son demasiado luminosas

Jochen Faget
24 de octubre de 2022

La contaminación lumínica de Portugal es cuatro veces mayor que la de Alemania. Muchos de sus municipios siguen actualizando su tecnología de iluminación con farolas LED de bajo consumo.

Una foto del distrito de Celorico da Beita con luces LED.
En Portugal se están instalando farolas LED, comparativamente mucho más económicas, debido a la crisis energética. Imagen: Jochen Faget,/DW

"¡Más luz!" Esas fueron supuestamente las últimas palabras de Goethe y eso es lo que muchos portugueses siguen exigiendo hasta el día de hoy. Sin embargo, en la práctica, ya tienen demasiada. Según varios estudios, la emisión de luz por persona en Portugal es aproximadamente cuatro veces mayor que en Alemania. Esto se debe también a que, ante los altos precios de la electricidad, la mayoría de los municipios han estado instalando farolas LED comparativamente más económicas. 

"Corremos el riesgo de aumentar la contaminación lumínica con menos costos energéticos", advierte el investigador Raúl Lima. 

Un ejemplo de ello es el distrito de Celorico de Beire -ubicado en la frontera con España- que tiene unos 7.000 habitantes y casi el mismo número de farolas. En los últimos años ha sufrido un masivo éxodo de sus residentes hacia los centros urbanos de la franja costera pero, en cuanto a iluminación, está muy al día. "Somos el primer distrito de Portugal en cambiar completamente el alumbrado público a lámparas LED", afirma orgulloso Ricardo Sousa, de la administración de la comuna. "Aquí nadie se ha quejado de que hay demasiada luz, siempre es todo lo contrario", agrega.

El físico Raúl Lima, de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Oporto, tiene una opinión distinta. "Todavía no hay conciencia de la contaminación lumínica en Portugal", señala. Es uno de los pocos científico que lleva años investigando el problema en Portugal. "Quizás porque en los años 80 había muchos lugares no tenían ni electricidad ni alumbrado público, para mucha gente más luz por la noche significa progreso y seguridad", explica. 

Pero, ¿qué pasa con el daño al medio ambiente y a la salud humana que han sido claramente demostrados por estudios de otros países? "Para ser sincero, aún no he pensado en ello", admite Sousa.

Contaminación lumínica sin control 

Los políticos de Portugal -con subvenciones de la UE- están convirtiendo la noche en día con más y más luz. Existen normas mínimas para el alumbrado público, pero no hay límites máximos. Y, por supuesto, no hay autoridad estatal para intervenir en caso de excesos. 

En el pueblo de Salgueirais, en el distrito de Celorico da Beira, por ejemplo, parecen haber olvidado que muchas de las casas ahora están deshabitadas. "Aunque aquí viven solo tres personas, ahora hay cuatro lámparas alrededor de mi casa", se queja Cecilia Lisboa. "Puedo leer el periódico en la calle por la noche, es como si fuera de día", asegura. Según indica, solo puede dormir si cierra completamente las tradicionales persianas de madera. "¡Eso no es progreso!", reclama. 

"Aunque aquí viven solo tres personas, ahora hay cuatro lámparas alrededor de mi casa", se queja Cecilia Lisboa, de Salgueirais, en Portugal.Imagen: Jochen Faget,/DW

Se han hecho progresos, pero se han aplicado de forma incorrecta, afirma Pedro Gomes Almeida, ingeniero jubilado y profesor universitario que posee una casa en el casco antiguo de Celorico da Beira, iluminado con LED. Muchas farolas están demasiado altas y montadas en un ángulo incorrecto, lo que provoca que la luz se disperse y, además, con una temperatura equivocada, demasiado fría. "Por supuesto, también hay farolas LED más agradables y cálidas, de color ámbar. Pero son más caras y por eso la gente no las compra", señala. 

Un error que probablemente se pague en el futuro, advierte Raúl Lima, de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Oporto. 

Ricardo Sousa, por otro lado, sigue contento con la revolución de las luces LED en su distrito porque, después de todo, ahora hay más luz por menos dinero. La factura de electricidad de 500.000 euros ha bajado en más de 50.000, lo que se debe en parte a que todas las lámparas solo usan la mitad de su capacidad al ser tan luminosas. 

Y aunque el distrito de Celorico da Beir podría tener mucha más luz, lo cierto es que también podría tener menos.

(ng/ers)

Ir a la siguiente sección Descubra más