Tras haber descendido al nivel más bajo en ocho años, el índice alemán DAX logró recuperarse levemente esta mañana. Pocos minutos después de haber abierto la Bolsa el DAX se encontraba en un plus de 1,6 por ciento, en 2238 puntos.
Luego de las graves pérdidas bursátiles de los últimos días, los "blue chips" alemanes se vieron impulsados por los buenos precedentes en los EE.UU.

"La esperanza de una solución pacífica al conflicto iraquí, logró que se repusiera el mercado general", comentan los comerciantes.

Durante los últimos días comerciantes e inversores se veían frente a un panorama siniestro. Los pedidos de venta dictaban los acontecimientos en las bolsas. El índice alemán DAX apenas si lograba mantenerse sobre la marca de los 2200 puntos, llegando así a su punto más débil en 8 años. El DAX había perdido 4,3 por ciento, una caída de tales dimensiones sólamente se conocía en el "mercado nuevo". Las pérdidas no se limitaron a ramos industriales particulares, sino que afectaron a toda la industria.

El DAX había perdido aproximadamente 15% de valor durante los últimos 7 días y hoy logró remontar ligeramente gracias a valores financieros y tecnológicos. Según los expertos se trata de una "recuperación técnica". Inversores y comerciantes esperan atentos el informe de gobierno, que presentará el canciller alemán Gerhard Schröder el día de mañana, y que incidirá decisivamente en la estibilidad del índice DAX.

Bayer, la perdedora del día

En contra de la tendencia del mercado, las acciones de Bayer fueron unas de las pocas perdedoras de esta mañana. Las acciones del consorcio farmacéutico perdieron un 3 por ciento de su valor, descendiendo así a la cifra de 10,11 Euros.

En el año 2002 los accionistas de Bayer se vieron enfrentados a una drástica pérdida del 46 por ciento en las ganancias, reduciéndose las mismas por lo tanto a 989 millones de Euros.

Sin embargo, el consorcio se muestra optimista y cree en la posibilidad de aumentar el resultado operativo durante el presente año, siempre y cuando no se agraven considerablemente las condiciones de mercado. En una primera toma de postura Bayer declaró que tanto las transacciones, como las ganancias fueron "alentadoras" en los primeros dos meses del año. Aunque en enero y febrero el movimiento de ventas aumentó en un 4,4 por ciento el consorcio se mueve con cautela. Los accionistas se encuentran aún bajo el "shock Lipobay".

El efecto Lipobay

En el año 2001 Bayer retiró del mercado el reductor de colesterol Lipobay, ya que aparentemente uno de sus posibles efectos secundarios es la debilidad muscular, que algunos casos llevó incluso a un desenlace fatal.

Bayer teme que las demandas formuladas en el caso de Lipobay excedan la cobertura de los seguros. El número de demandas aumentó a 8400, de las cuales 4600 son prácticamente idénticas. Hasta el momento el consorcio farmacéutico ha logrado recusar más de 500 demandas por medio de avenencias, pagando por ello unos 140 millones de dólares.