En la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional, los cerca de 3.000 delegados votaron, tal como se esperaba, a favor de Li Keqiang, un experto en economía de 57 años y ex-vice primer ministro.

Li fue elegido con sólo tres votos en contra y seis abstenciones. Su elección marca el punto culminante de un relevo generacional en el gobierno chino, cuatro meses después del ascenso de líderes más jóvenes a la cúpula del Partido Comunista Chino.

El nuevo primer ministro se enfrenta a la difícil tarea de encauzar la segunda economía mundial, cuyo dinamismo se ha ido desacelerando, hacia un nuevo modelo de crecimiento.

El reto de la urbanización

El impulso que las exportaciones y las inversiones dan al crecimiento de la economía china es cada vez menor. Li pretende urbanizar el país más poblado del mundo e incentivar el consumo interno para impulsar el futuro crecimiento económico.

El jueves, el nuevo jefe del Partido Comunista de China y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Xi Jinping, había asumido la presidencia del país como sucesor de Hu Jintao, de 70 años.

Los delegados también eligieron como nuevo presidente del Tribunal Supremo a Zhou Qiang, de 52 años. Zhou, quien dirigía el Partido Comunista en la provincia de Hunan, y es considerado como un protegido de Hu Jintao.

el/er (dpa,reuters)