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Los europeos sabían

Deutsche Welle7 de diciembre de 2005

Los gobiernos europeos estaban informados de los vuelos secretos de la CIA. La prensa comentan la visita de Condoleezza Rice a Alemania y pregunta si el aliado se ha convertido en cómplice de prácticas poco democráticas.

Tirando los derechos humanos a la papelera de la historia.Imagen: AP

Berliner Zeitung, de Berlín: "En su lucha contra el terrorismo el gobierno estadounidense convierte a la democracia europea en su cómplice. Pero el mayor cómplice de los terroristas islámicos es el gobierno estadounidense. Argumentar con desconocimiento de raptos, de detención en cárceles secretas o aplicación de tortura no es justificación convincente.

Ningún terrorista enloquecido ha violado los derechos humanos de forma más efectiva que el gobierno de George W. Bush. La lucha contra el terrorismo no puede efectuarse con métodos que atentan contra la legalidad internacional. Sólo cuando los gobiernos europeos lo hayan comprendido, sólo cuando el siguiente presidente de Estados Unidos lo comprenda, los cómplices volverán a ser aliados."

Un muro de silencio

Tages-Anzeiger, de Zurich: "No se escucha ni críticas ni protesta contra las transferencias secretas y prácticas de detención por parte de la CIA. Por el contrario, Merkel no quiere obstaculizar a los servicios secretos en sus labores. La única medida asumida: en el futuro, diputados selectos serán informados a puerta cerrada sobre el trabajo de los servicios secretos. El muro del silencio tras el que se esconde el gobierno berlinés sólo se puede interpretar como apoyo a las prácticas de la CIA.

Las dos políticas más poderosas hablan de democracia y de estado de derecho y tiran los derechos humanos al basurero de la historia."

Sólo apariencia

Corriere della Sera, de Italia: "Sólo hubo un verdadero acuerdo (entre Merkel y Rice) y fue la apariencia que trataron de despertar de una verdadera solidaridad femenina. Al final la Secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice partió de Berlín sin haber informado absolutamente nada ni sobre los vuelos secretos de la CIA ni sobre las cárceles secretas ni sobre posibles casos de tortura. Muy al contrario, incluso encargó a sus colaboradores aclarar inmediatamente el más mínimo viso de autocrítica que la canciller alemana Angela Merkel creyó entender en sus declaraciones."

Rice una secretaria de estado poderosa

The Times, de Londres: "El mundo entero se da cuenta de que George W. Bush ha encontrado en la persona de la Dr. Rice a una Secretaria de Estado poderosa. Un verdadero acierto en Washington, en donde las rivalidades entre la Secretaría de Estado, el Consejo de Seguridad Nacional y el Pentágono suelen desencadenar verdaderas luchas de territorio.

Cuando todavía era asesora de seguridad jamás intentó intervenir en decisiones de política externa o militares. Gracias a su análisis inteligente y agudo cuenta con la atención y la confianza de Bush, a diferencia del General Colin Powell. Y cuenta con su apoyo."