Los líderes europeos piden en Davos que la UE mejore su competitividad
29 de enero de 2011"El euro será estable, estamos dispuestos y podemos defender la estabilidad del euro", aseguró en el ministro de Economía alemán, Wolfgang Schäuble, aunque acto seguido tuvo que reconocer que la tarea es "es difícil y tenemos mucho de lo que discutir". Más optimista fue su homóloga francesa, Christine Lagarde. “El cambio ya está hecho”, dijo, y desmintió rotundamente que la situación de la divisa comunitaria haya pasado de "grave a crónica".
La cúpula de la política mundial abandona poco a poco la suiza Davos. El Foro Económico Mundial 2011 llega paulatinamente a su fin. Pero los europeos no querían marcharse sin volver a repetir el mensaje que desde sus respectivos países habían traído: el euro vive; tal vez esté débil, pero no ha muerto.
Menos déficit, más competitividad
En comparación con el resto del mundo, la situación de la Unión Europea no es mala, opinó Schäuble en el encuentro económico. La eurozona debería, sin embargo, mejorar su competitividad, para lo cual es necesario armonizar las políticas europeas sociales y de economía: "Estamos un poco retrasados en este campo”, concluyó el alemán, e instó- como previamente lo había hecho su canciller, Angela Merkel, y antes que ella el presidente galo, Nicolas Sarkozy- a reducir la deuda pública como condición para seguir creciendo en Europa.
En la misma tónica que el ministro de Economía, hoy volvió Merkel a reclamar recortes en las prestaciones sociales de los socios comunitarios, ingrediente necesario para la receta que permita superar la crisis monetaria: "La solidaridad no puede ser a coste cero", afirmó ante los delegados de su partido, la Unión Demócrata Cristina (CDU), durante reunión en el sur de Alemania.
Los países de la UE que todavía mantengan una edad de jubilación por debajo de la alemana, recientemente extendida hasta los 67 años, deberían de elevar la cifra, exigió la mandataria germana. “No puede ser que unos inviertan y otros consuman", añadió.
Disciplina y eurozona reales
Christine Lagarde insistió por su parte en Davos en que, tras los paquetes de ayuda y los pactos de estabilidad financiera, "la situación se está asentado" en el Viejo Continente. Y no obstante, hay que dar pasos hacia adelante, pidió, como aplicar sanciones duras a quien no cumpla con las normas financieras e imponer una "disciplina real": "Hemos aprendido de nuestros errores, aprendimos de la crisis", dijo.
Quien también apretó las tuercas a la zona euro fue el ministro británico de Economía, George Osborne, al decir que su país tiene "un enorme interés en que la eurozona funcione bien" y en que el euro estable. Para ello, los países deben hacer los deberes. Los socios tienen problemas diferentes que deberán resolverse por caminos diversos, apuntó. "El mercado común (europeo)”, aseveró, “debe convertirse de una vez por todas en una realidad". (dpa)
Editora: Luna Bolívar Manaut