"Para un presidente que usa retórica en el estilo salvaje del oeste, debe ser algo bochornoso el que todavía no haya logrado encontrar vivo o muerto a ninguno de sus enemigos. El hecho de que Sadam no haya sido hallado no es un hecho sin importancia. Es de un simbolismo que no se puede subestimar. Demuestra que el poder estadounidense tiene sus límites. El débil eco de la guerra de Vietnam comienza a influír en la psicología estadounidense", afirma el diario británico liberal The Independent.

"Además pareciera que Bush y Blair no sólo subestimaron la dimensión de la hostilidad iraquí tras el derrocamiento del régimen de Sadam Husein. Tampoco entendieron que aquellos que tienen simpatías por Sadam, se rehusarían a ayudar a un enemigo extranjero a encontrarlo". Concluye el matutino.

Sadam, de gran importancia

También el periódico ruso Iswestija, se ocupa de la búsqueda del derrocado dictador por parte de Estados Unidos. "Si Sadam sigue vivo, tiene para los estadounidenses sobre todo un significado psicológico. Que siga en libertad el enemigo número uno, es un duro golpe para el orgullo de la última superpotencia de la tierra".

"Si uno recuerda, que el terrorista Osama bin Laden, hasta la fecha no ha sido apresado, entonces comprende uno la obstinación estadounidense en encontrar al antiguo dictador, pues hace creer que la muerte de Sadam Husein podría poner fin a los ataques de los partisanos iraquíes", señala el rotativo.

Una nueva palestina

"Irak no es un segundo Vietnam. Falta la jungla en la que podían esconderse los sublevados y también falta un Vietnam del Norte que apoye a los rebeldes. La situación en Irak se parece mucho más a la intifada de los palestinos o a la guerra de independencia de los argelinos contra los franceses", escribe el diario español El Mundo.

"Los americanos no conocen el terreno en Irak ni entienden el idioma. Están menos motivados que los israelíes en el conflicto en Oriente Medio, o que los franceses en Argelia. Algunos creen que capturando a Sadam Husein todos los problemas estarían resueltos. Resulta más bien optimista el pronóstico que afirma que las tropas estadounidenses deberán permanecer diez años en Irak", afirma el periódico madrileño.