Los dos principales partidos de Alemania sufrieron otro golpe significativo en las elecciones europeas, este domingo (26.05.2019),  ya que los votantes de este país continuaron son su huida del centro político tradicional.

Una importante migración hacia el partido Los Verdes sugirió que el electorado está demandando una acción más contundente para proteger el clima.

Poco después del cierre de las urnas, las proyecciones indicaban que la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Angela Merkel ganaría más del 28% de los votos en Alemania, 7 puntos menos que en 2014, mientras que las cosas fueron aún más dramáticas para sus socios de la coalición menor, el Partido Socialdemócrata (SPD), que cayó en un 11%, obteniendo solo un 15.5% de los votos, y colocándose así solo en el tercer lugar

Esto, que supone otra humillación para los socialdemócratas de centro-izquierda, podría ser una derrota aún más significativa para Merkel. El declive del SPD en los últimos años, marcado por un empeoramiento constante de los resultados electorales, ha provocado un creciente malestar dentro del partido, especialmente en su flanco izquierdo, donde la insatisfacción con la "gran coalición" con la CDU se ha ido acumulando durante años.

El resultado del domingo solo habrá fortalecido ese sentimiento, reforzado como lo fue por una derrota histórica en las elecciones en Bremen, el estado federado más pequeño de Alemania, donde el SPD pierde el poder en la ciudad por primera vez en siete décadas.

Futuro incierto para el gobierno de Merkel

¿Podría desmoronarse la coalición?

Si el ala izquierda del SPD gana la lucha interna por el poder, existe la posibilidad de que ese respetado y antiguo partido deba retirarse de la coalición con Merkel, con la consecuencia de un llamado a nuevas elecciones anticipadas.

Ya que la canciller anunció que no volvería a postularse, y su sucesora como líder de la CDU, Annegret Kramp-Karrenbauer, espera entre bastidores, ya ha habido especulaciones de que los resultados del domingo podrían acelerar la salida de Merkel.

Pero las principales figuras de la CDU restaron importancia a la idea de que el gobierno podría derrumbarse.

El secretario general de la CDU, Paul Ziemiak, dijo a la emisora alemana ZDF que la coalición "tenía que seguir" para "asegurar la estabilidad" en el país. Ziemiak también admitió que los resultados para la CDU "no cumplieron con nuestras expectativas", aunque afirmó que su partido había "hecho su parte" para ayudar a Manfred Weber a su esperado puesto como presidente de la Comisión Europea.

La CDU va a la cabeza en Alemania, pero con grandes pérdidas, y Los Verdes suman votos

Weber fue el principal candidato para el Partido Popular Europeo (PPE) de centro-derecha, el bloque al que pertenece la CDU, lo que lo coloca en la posición de salida para sustituir a Jean-Claude Juncker cuando la nueva Comisión sea elegid. en el otoño boreal de 2019.

Mucho por discutir

El secretario general del SPD, Lars Klingbeil, por su parte, fue más evasivo y dijo que "el resultado no puede quedar sin consecuencias". Añadió que los socialdemócratas tendrán mucho que discutir en las próximas horas y días.

Eso fue repetido por el líder del SPD, Andrea Nahles, quien dijo que los resultados "extremadamente decepcionantes" mostraron que el partido "aún tenía mucho que hacer". También se plantearon preguntas sobre su liderazgo tras el resultado.

Kramp-Karrenbauer, mientras tanto, reconoció que la CDU había tenido un desempeño inferior. "Este resultado de la elección no es un resultado que haga justicia a nuestras expectativas hacia nosotros mismos como partido popular", dijo en un discurso ante los miembros del partido. Pero celebró haber logrado lo que, según dijo, eran los dos objetivos principales de la CDU del día: llegar primeros en las elecciones de la UE y derrotar al SPD en Bremen.

Sin embargo, es probable que el resultado a nivel europeo, con una pérdida importante de votos, también haga mella en su figura como nueva líder, ya que Merkel se mantuvo en gran medida fuera de la campaña.

De pie junto a ella, Weber dijo que el resultado fue una victoria para la democracia europea y pidió a otros socios europeos que establezcan una agenda para los próximos cinco años.

Tema definitorio: la crisis climática

El éxito masivo del Partido Verde en Alemania, que casi duplicó su resultado de 2014 para ganar el 20.6% de los votos, se debió en parte a su popularidad entre los votantes jóvenes. Una estadística publicada por Infratest dimap en la noche electoral reveló que el 36% de los votantes de Alemania que votaron por primera vez lo hicieron a favor de los Verdes, más de tres veces más de los que votaron por los conservadores de Merkel.

"Todos los partidos, de repente, se refirieron a la protección del clima en sus afiches de campaña, hace algunas semanas", dijo la líder del Partido Verde, Annalena Baerbock, a la emisora pública ARD. "Esta campaña de protección del clima debe reflejarse en la agenda de los partidos". Otros políticos alemanes reconocieron que ella probablemente tenía razón: la crisis climática había sido el principal problema en la campaña y ellos no habían definido una línea clara.

La principal candidata del SPD y ministra de Justicia de la gran coalición, Katarina Barley, admitió que su partido quizás no haya estado bien preparado en ese frente. Sin embargo, Barley dijo a sus seguidores: "Di todo lo que pude; no pude hacer nada más", lo que motivó un largo y emotivo aplauso.

Las elecciones europeas también traerán una reorganización, en principio, menor en el gabinete de Merkel, y la ministra de Justicia anunció de antemano que dimitirá después de las elecciones para ocupar su asiento en el Parlamento Europeo. Está por verse cuánto resuenan los resultados de los comicios europeos en el gobierno alemán de coalición y qué envergadura tendrán en realidad.

(cp/eal)

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