Actualmente, las promesas de armas a Ucrania constituyen una oportunidad para que el Gobierno alemán desvíe la atención sobre los misiles de crucero de largo alcance llamados Taurus que Ucrania tanto desea.

Como parte de la ayuda militar, Alemania desea enviar otros 500 millones de euros a Kiev, incluida munición de artillería que a Ucrania le urge.

Este fue el resultado de una reunión de las naciones occidentales que le están brindando apoyo a Ucrania desde que este país fuera invadido por las tropas rusas. La reunión se llevó a cabo en la base aérea estadounidense de la ciudad alemana de Ramstein.

Lo que Ucrania sigue sin recibir son los misiles Taurus, los cuales cuentan con un alcance de 500 kilómetros y podrían incluso alcanzar objetivos lejanos, como la propia ciudad de Moscú. 

Sin embargo, el canciller alemán Olaf Scholz  está en contra de una posible entrega de los mismos. Manifestó que ve el peligro de que Alemania se vea arrastrada a una guerra. Sin embargo, no logra zafarse de la discusión sobre el asunto, ni siquiera dentro de la coalición tripartita que conforma el actual Gobierno alemán, integrado por su propio partido, los socialdemócratas del SPD, además de los Verdes y los liberales del FDP. 

¿Qué significa "congelar un conflicto"?

Una frase pronunciada por el líder del grupo parlamentario de los socialdemócratas, Rolf Mützenich, en un debate la semana pasada causó indignación dentro y fuera de Alemania: "¿No es hora de que no solo hablemos de cómo librar una guerra, sino que también pensemos en cómo congelar una guerra y terminarla más tarde?", señaló Mützenich a modo de pregunta.

Las voces críticas han interpretado la palabra "congelar" como un abandono de Ucrania.

Friedrich Merz, líder del mayor partido de la oposición, la Unión Demócrata Cristiana (CDU), declaró: "La guerra en Ucrania ya fue congelada en una ocasión, concretamente en 2014x, con los dos Acuerdos de Minsk. Y cada día vemos en las noticias lo que Putin entiende por 'congelar".

Desacuerdos dentro de la coalición

Marie-Agnes Strack-Zimmermann, presidenta de la Comisión de Defensa, del partido de los liberales, acusó en la emisora radial Deutschlandfunk a los socialdemócratas de seguir una política de "apaciguamiento".

Strack-Zimmermann ya ha votado dos veces en contra de los misiles Taurus en votaciones que se han desarrollado en el Bundestag, a pesar de que su partido forma parte de la coalición que actualmente gobierna Alemania. El politólogo Johannes Varwick, de la Universidad de Halle, ciudad del estado germano de Sajonia-Anhalt, defiende la idea de "frenar” de la guerra: "Congelar un conflicto no significa resolverlo, sino evitar que siga escalando", argumenta a DW.

Elogios por parte de personas equivocadas

Lo complicado para Scholz en esta compleja situación son los elogios que llegan de personas con las que no quiere tener nada que ver políticamente. Por ejemplo, de Björn Höcke, líder del partido alemán de ultraderecha AfD. O de Sahra Wagenknecht, que acaba de fundar su propio partido político. Ambas fuerzas políticas ya han expresado anteriormente su desacuerdo con el apoyo militar que le brinda Alemania a Ucrania.

Además, Scholz recibió halagos de parte del excanciller (1998-2005) Gerhard Schröder, quien ha criticado la invasión rusa a Ucrania, pero continúa siendo amigo del presidente ruso, Vladimir Putin, lo cual ha sido tema de controversia.

"Ser elogiado por Gerhard Schröder demuestra claramente que va por mal camino", apuntó el líder de la Unión Social Cristiana (CSU), de Baviera, Markus Söder, refiriéndose a Olaf Scholz.

¿Quiere Alemania reservarse los misiles Taurus para sí misma?

Mientras tanto, continúan las especulaciones sobre el trasfondo de la negativa de Scholz. El político de los conservadores de la CDU, Roderich Kiesewetter declaró a DW que las razones esgrimidas para impedir la participación de Alemania en la guerra eran "falsas".

Del mismo modo, indicó que el canciller podría estar dispuesto a aceptar una "falsa paz dictada" por Rusia para Ucrania.

Kiesewetter se manifiesta a favor de que Ucrania adquiera los famosos misiles de largo alcance.

Sin embargo, Johannes Varwick cree que los Taurus están sobrevalorados para la continuación de la guerra: "La solidaridad con Ucrania no significa suministrar tantas armas como sea posible, sino del grado de iniciativas diplomáticas para poner fin a esta guerra, con planteamientos impopulares pero realistas".

Por otro lado, las supuestas declaraciones de Carsten Breuer, inspector general del Ejército alemán, en una reunión secreta de la Comisión de Defensa del Bundestag, han alimentado aún más las especulaciones.

El máximo responsable de la Bundeswehr habría hablado de un déficit de capacidades de las fuerzas armadas alemanas en caso de que se lleve a cabo la entrega de los misiles Taurus, según informa el portal "t-online".

Mayoría de alemanes en contra de la entrega de los Taurus

Aunque Olaf Scholz se enfrenta a duras críticas por parte de sus socios de coalición: Verdes y liberales, así como también de la oposición que conforman entre otros, los partidos Unión Demócrata Cristiana y la Unión Social Cristiana de Baviera, está casi seguro de que la mayoría de la población alemana apoyará su postura sobre Taurus.

Según indica una nueva encuesta del Instituto Forsa de investigación social y análisis estadístico, el 66 por ciento está en contra de la entrega de los misiles Taurus a Ucrania.

Mientras tanto, Olaf Scholz, así como los líderes de otros partidos, estarán muy atentos a cómo continúa el debate. Especialmente con vistas a las próximas elecciones europeas de principios de junio. La guerra en Ucrania y cómo ponerle fin a la misma será probablemente un tema importante de esta cita. (yv/ms)