Desde Amsterdam, en donde Rembrandt vivió sus últimos años, hasta Leiden, donde nació, pasando por La Haya, Barcelona, Fráncfort, Berlín, Kassel y Londres, en numerosas ciudades europeas se han preparado homenajes al gran maestro del claroscuro del siglo XVII. Un acento trágico rodea la vida de uno de los pintores más extraordinarios del mundo, que nació el 15 de julio de 1606 en la ciudad holandesa de Leiden.

Rembrandt es considerado el pintor y grabador más trascedente del siglo XVII y, aunque Amsterdam y Leiden ahora se pelean por él, en vida sufrió duros golpes del destino y murió sumido en la pobreza. Murió en 1669 en Amsterdam y su tumba quedó sin nombre. Holanda celebra su nacimiento por todo lo alto, con excursiones a pie a través de los canales a un paso de la última casa en la que vivió y recorridos por los lugares favoritos del gran maestro. Dos musicales han sido estrenados con motivo de su aniversario. Uno que aborda su accidentada vida amorosa y otro sobre su espíritu creador.

Exposición en Londres

Durante sus 63 años de vida, Rembrandt pintó casi 100 autoretratos y, al igual que sus descripciones de los ricos y pobres a su alrededor, sus cuadros son famosos por su extraordinario manejo de luces y sombras. También Londres se sumó a las celebraciones con una exposición en la National Gallery que incluirá las obras que posee en su colección que será complementada con obras de sus discípulos.

En Alemania, seis de los ocho paisajes existentes pintados por él han sido exhibidos en la Galería de los Viejos maestros en Kassel. La exposición ha sido complementada con 30 dibujos y grabados del maestro así como pinturas y dibujos de pintores que siguieron su escuela. Rembrandt pintó paisajes por un breve tiempo, pero característico fue su estilo realista dotado de un cierto dramatismo que lo diferencia claramente de sus contemporáneos.

Pintor, dibujante y grabador

En Berlín se recuerda al maestro con una trilogía que destaca su genio universal como pintor, dibujante y grabador. Las tres exposiciones estarán integradas por una selección de 80 obras provenientes de colecciones privadas y de la colección de la Galería de Pintura de Berlín. La muestra pone un acento especial en las nuevas investigaciones sobre la obra de Rembrandt. El gran pintor holandés murió sin pena ni gloria dejando un legado de 600 pinturas, 1200 dibujos y 300 grabados. El mundo prácticamente lo había olvidado hasta que fue redescubierto en 1850.