Para llegar al Parque Serengueti hay dos opciones: caminar 5 kilómetros en medio del campo desde la estación de trenes de Hodenhagen o manejar un automóvil por la autopista A7. En este último caso, y debido a las vacaciones de verano, es probable que la fila para pagar sea bastante extensa. Hodenhagen está a 35 minutos en tren desde Hannover.

Esta foca descansa sin preocuparse por la enorme cantidad de visitantes que llega diariamente a verla. En algunos sectores del parque es posible abandonar los vehículos. En otros, está prohibido incluso bajar las ventanillas. En temporada alta (todo julio y la mitad de agosto), el parque abre sus puertas entre las 9:30 am y las 6:30 pm. Entre noviembre y febrero, permanece cerrado.

Cuando la afluencia de público es mucha, en el recorrido por el safari se suelen formar atascos. Y estos pueden durar largos minutos, especialmente si las cebras se cruzan en el camino, los rinocerontes deciden descansar sobre el asfalto o los papiones sagrados se suben a la carrocería de un vehículo. De cualquier modo, siempre el personal de seguridad está atento.

En el sector de “El mundo de los monos”, los visitantes pueden estar en contacto directo con distintas especies de lemures y simios. Pero atención: hay que tener cuidado con anteojos, billeteras y comida: estos monos son increíblemente hábiles a la hora de apoderarse de lo ajeno.

La zona de los monos ardillas es la preferida por los visitantes, pues estos pequeños simios son animales sociables y disfrutan del contacto con las personas. En la imagen, un niño aprovecha esa cercanía y acaricia a uno de los ejemplares.

Mally, el mono capuchino que Justin Bieber ingresó ilegalmente a Alemania y que le fue confiscado por las autoridades germanas, ahora vive en una pequeña isla en el Parque Serengueti de Hodenhagen. Tras pasar el período de cuarentena, ahora intenta adaptarse a su nueva vida en permanente contacto con una cuidadora, que lo alimenta y consiente a cada minuto.

Acostumbradas al contacto humano, las jirafas suelen acercarse a los vehículos a pedir comida. Sin embargo, las normas del parque son estrictas y se solicita a los visitantes no alimentar a los animales. Asimismo, se exige especial cuidado en la conducción de los vehículos, sobre todo en la zona de los monos.

Un puente colgante de 800 metros atraviesa parte del bosque del recinto, para llegar a una enorme plataforma desde donde se puede apreciar la zona de la "sabana africana", donde jirafas y antílopes comparten un enorme terreno que reconstruye fielmente su hábitat natural. Procure no correr sobre el puente: ¡se mueve todo!

La entrada al Parque Serengueti cuesta 27 euros. El recorrido en bus por el safari cuesta 5 euros adicionales y dura una hora y media. Las demás atracciones son gratuitas, como “El mundo de los monos”, donde hay chimpancés, o el paseo en tren por las diversas estaciones del enorme parque de entretenimientos.

El parque tiene, además del safari y las atracciones relacionadas con la vida salvaje, distintas zonas de entretenimiento para niños, restaurantes, zonas de compra de recuerdos y espectáculos en vivo. El paseo por el recinto completo toma por lo menos una tarde entera.

El Aqua-Safari es una de las grandes atracciones del recinto de Hodenhagen. Creado en 2010, es un viaje de 25 minutos por el imaginario reino de King Kong. Los visitantes abordan un Airboat y viajan por una laguna llena de sorpresas, incluida una travesía a alta velocidad e inesperados juegos de agua.

Al final del recorrido aparece King Kong, que cierra la jornada lanzando chorros de agua a los pasajeros del Airboat. Cuando hace calor, como en este verano de 2013, esas gotas son bienvenidas. En caso de lluvia, y por razones de seguridad, el juego permanece cerrado. Los niños deben usar de forma obligatoria chaleco salvavidas en este juego.