Más de 300 detenidos por pornografía infantil en 38 países
16 de octubre de 2019
Al menos 337 personas fueron detenidas y 23 menores liberados, en una operación contra la pornografía infantil en internet, en países como Estados Unidos, Brasil y España, anunció el Gobierno estadounidense.
Publicidad
El Departamento de Justicia señaló en un comunicado que usuarios de internet en varias partes de EE. UU., así como en España, Brasil, Corea del Sur, Reino Unido, Alemania, Arabia Saudí, Canadá, Irlanda y Australia, entre otros, fueron imputados y arrestados.
La operación resultó también en el rescate de 23 menores de edad residentes en EE.UU., España y el Reino Unido, que, según Washington, sufrían abusos.
La red funcionaba a través de transacciones en la criptomoneda bitcóin, que fueron rastreadas por los investigadores para determinar dónde estaba el servidor de la "darknet" (web oscura) y su administrador, ubicados en Corea del Sur.
Según el escrito de acusación, en marzo de 2018, agentes estadounidenses, británicos y surcoreanos arrestaron en el país asiático al sospechoso Jong Woo Son, de 23 años, e incautaron el servidor que presuntamente empleaba para operar un mercado en "darknet", donde se anunciaban vídeos de explotación sexual infantil, listos para ser descargados por los usuarios del sitio Welcome To Video.
El Departamento de Justicia subrayó que esta "darknet" es la primera de este tipo en monetizar vídeos de pornografía infantil con bitcóins. El sitio web contaba con más de un millón de descargas de ese tipo de grabaciones por parte de internautas, que recibían una dirección única bitcóin al crear una cuenta en esa página de internet.
Tras la detención de Jong y el decomiso del servidor, los investigadores compartieron los datos obtenidos con las autoridades de varios países para identificar a los usuarios de ese sitio, lo que llevó a pistas en 38 países y el arresto de 337 individuos. Solo en EE.UU. se han registrado las viviendas y los negocios de unos 92 sujetos, dijeron las autoridades.
Las autoridades estadounidenses también informaron este miércoles de una acción judicial para incautarse de los fondos que empleaba esa red y entregarlos a las víctimas de estos delitos. De acuerdo al escrito judicial, los agentes pudieron seguir los pagos en bitcóins a la página web e identificaron cuentas de esa criptomoneda supuestamente utilizadas por 24 personas en cinco países para financiar ese sitio de internet y promover la explotación de menores de edad.
rml (efe, afp)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
Lucha contra la explotación sexual infantil en Colombia
La ONG holandesa “Down to Zero Alliance” combate la prostitución infantil. Eline van Nes visitó Bogotá y Riohacha en Colombia para averiguar más sobre esta lucha contra el abuso comercial de niñas y niños.
Imagen: DW/E. van Nes
Vendiendo su cuerpo como mercancía
En Santa Fe, un populoso barrio de Bogotá conocido como la "zona de tolerancia", niñas, niños y travestis se paran en las calles para vender sexo. La edad de consentimiento en Colombia es de 14 años. Sin embargo, es un delito grave si alguien paga a una niña o un niño menor de 18 años por sexo. La prostitución es legal en Colombia, pero se limita a los burdeles y zonas designadas.
Imagen: DW/E. van Nes
Un lugar para sentirse seguro
Esta es una de las 16 niñas acogidas por la Fundación Renacer, un refugio para víctimas de explotación sexual comercial. La explotación sexual comercial de la niñez comprende la prostitución infantil, la pornografía infantil y el tráfico infantil con fines sexuales. A las niñas y niños - de 7 a 17 años de edad - se les brinda ayuda y apoyo psicológico.
Imagen: DW/E. van Nes
Un techo sobre sus cabezas
En el refugio, cada niña y niño tiene su propia cama y casillero para sus pertenencias. En promedio, las víctimas permanecen un año aquí, en donde reciben alimentos y asistencia psicológica. Algunos niños fueron abandonados por sus familias, otros tienen familiares que los visitan de vez en cuando, pero no tienen los medios para protegerlos de la explotación sexual comercial.
Imagen: DW/E. van Nes
Un hogar para niños colombianos y venezolanos
Una de las chicas en un refugio para víctimas de explotación sexual comercial frente a un mural de la organización. Las dos banderas representan los países de origen. Hay chicas colombianas, venezolanas e indígenas wayuu. Las niñas y los niños sufren cambios de humor extremos, pasando del llanto incesante a la violencia física.
Imagen: DW/E. van Nes
Creciente sensibilización
Mario Gómez es un fiscal de Bogotá, especializado en trata de personas. Gómez dirige una campaña nacional para aumentar la conciencia sobre los peligros que se esconden tras ofertas de trabajo que parecen demasiado buenas para ser honestas. Muchas víctimas no quieren hablar de su situación. Algunos no se ven como víctimas de la explotación sexual, otros se avergüenzan o tienen miedo de represalias
Imagen: DW/E. van Nes
Reflexionando sobre su futuro
William Plazas, un voluntario de 17 años, en su habitación. Según William, muchos colombianos y venezolanos en problemas económicos consideran la prostitución como una salida a la falta de dinero. Él conoce a muchas niñas y niños que son explotados sexualmente, pero no son conscientes de ello. Algunos niños, niñas y jóvenes hacen “favores sexuales” por conseguir un nuevo teléfono móvil.
Imagen: DW/E. van Nes
Un vínculo fuerte
Luz Ángela Lavao, la madre de William, protege a sus hijos, especialmente a su hija de 13 años, Valentina, porque viven muy cerca del distrito rojo de Bogotá. William tiene una fuerte relación con su madre y comparte todo con ella. Fue gracias a su madre que William terminó siendo voluntario de la Fundación Renacer, donde se involucró en proyectos de prevención.
Imagen: DW/E. van Nes
Superando su trauma
Una joven víctima de explotación sexual muestra un dibujo de su hogar. Para proteger a los niños, sus caras son ocultadas. La fotógrafa tampoco le hace preguntas sobre sus malas experiencias a los niños. Sus dibujos y juegos revelan cuán traumatizados están los niños y jóvenes, qué extrañan o sueñan. Y, en el caso de los venezolanos, a quién y qué han tenido que abandonar en su país.