Más popular que el Kaiser
21 de junio de 2002"Naturalmente estamos dichosos de haber llegado a la semifinal. Es algo sensacional para este equipo tan joven. Pero no estoy cien por ciento satisfecho con el modo en que lo hemos conseguido", comentó el jefe de la selección alemana, al término del encuentro con Estados Unidos.
Völler se muestra consciente de las debilidades de su equipo. "Ahora tenemos que superarnos, a como dé lugar. Si no, todo habrá acabado en la semifinal", reconoció el seleccionador. Y esa actitud comedida, que evita generar demasiadas expectativas, le ha granjeado el aprecio general.
Hasta el momento, lo caracteriza su serenidad. Las presiones propias de un mundial no han logrado sacarlo de sus casillas. Sólo se ha sabido de un episodio en que se excedió en un comentario sobre el héroe del fútbol sudcoreano, Bum-Kun Cha, quien había criticado el juego de los alemanes. Rudi Völler comentó que al parecer el asiático había tomado demasiadas aspirinas cuando estuvo en Alemania. Pero el altercado no pasó a mayores y se superó rápidamente, mediante las correspondientes disculpas. La agresividad no es su estilo.
Candidato provisional
En un comienzo, Völler fue convocado a hacerse cargo de la selección de fútbol alemana como una solución de emergencia y transitoria. La idea era mantener el puesto libre para el entrenador Christoph Daum, quien quedó descartado finalmente por un escándalo en torno al consumo de drogas. Sin embargo, desde que asumió el cargo, el 2 de julio del 2000, no ha hecho sino conquistar adeptos.
Hoy nadie pone en duda que Rudi Völler continuará al mando de la selección germana por lo menos hasta el 2006, año en que Alemania será el país anfitrión del Mundial. Es más: el presidente de la Federación Alemana de Fútbol, Gerhard Mayer-Vorfelder, lo sitúa ya en un mismo nivel con el Kaiser, Franz Beckenbauer.
"No son iguales, pero ambos han sido una suerte para el fútbol alemán. Incluso creo que, en sus tiempos de jugador activo, Rudi fue más popular que Franz. Beckenbauer siempre estuvo marcado por esa relación de amor-odio que caracteriza al Bayern de Múnich. En cuanto a Rudi, en cambio, todos estaban de acuerdo en que se trataba de un tipo estupendo", dice Mayer-Vorfelder.
Los consejos de Beckenbauer
Esas comparaciones, sin embargo, tienen sin cuidado al seleccionador germano. No obstante, confiesa que antes del Mundial pidió consejos al Kaiser. "Él me dijo que en 1986, en el Mundial de México, cometió el error de haberse desgastado en muchos frentes diferentes. Yo he seguido su consejo de no disgregarme. Con frecuencia lo he logrado. Pero, desgraciadamente, no siempre", cuenta Völler.
Según los entendidos, su gran logro al frente de la selección alemana actual ha sido volver a restablecer la confianza del equipo y su espíritu de unidad. Rudi Völler ha conseguido preparar mentalmente a sus jugadores para ganar. Lograrlo también en el plano futbolístico, al parecer le tomará algo más de tiempo.