México acusa a Isabel Marant de plagiar diseños indígenas
31 de octubre de 2020
Según las acusaciones, Isabel Marant lanzó una línea de ropa en la que está "copiando, literalmente, patrones de diseños purépechas".
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El Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) de México se sumó este viernes (30.10.2020) a la condena por el plagio de diseños artesanales de comunidades del estado de Michoacán supuestamente hecho por la diseñadora francesa Isabel Marant.
"El plagio vulnera el derecho fundamental de los pueblos indígenas de conservar y proteger su propiedad intelectual y su patrimonio cultural", dijo el INPI en un comunicado que respaldó las acusaciones del Senado de México en contra de la diseñadora.
Según estas acusaciones, Marant lanzó una línea completa de ropa en la que está "copiando, literalmente, patrones de diseños purépechas de artesanos de Charapan, Michoacán; en particular una línea de gabanes" sin dar crédito a los verdaderos creadores.
Los senadores Casimiro Méndez y Susana Harp señalaron que la diseñadora francesa cometió el plagio de los diseños artesanales de las comunidades indígenas de Charapan, Angahuan y Santa Clara del Cobre, Michoacán.
Denunciaron que las vestimentas tradicionales (sarapes, gabanes, servilletas, fajas y otras prendas de uso cotidiano) han sido literalmente copiadas y presentadas como propias en una línea de ropa, sin dar crédito a las y los verdaderos creadores. La senadora Susana Harp expresó su esperanza de que con esta denuncia "saquen la marca del mercado" mexicano.
Al respecto, el INPI condenó "enérgicamente el plagio porque vulnera el derecho fundamental de los pueblos y comunidades indígenas de conservar y proteger su propiedad intelectual y su patrimonio cultural". La institución defendió los diseños y manifestaciones artísticas indígenas como un producto de su historia, identidad, conocimientos y cosmovisión. Asimismo, llamó a la sociedad y a las empresas a que respeten las creaciones artísticas y culturales de los pueblos indígenas de México.
Hace cinco años, Isabel Marant fue acusada de plagiar diseños de la cultura mixe para utilizarlos en una de sus colecciones. De acuerdo con su página web, la prenda tiene un valor de 530 euros (poco más de 622 dólares) y no hace mención de que se haya inspirado en las comunidades indígenas.
ama (efe, Tiempo, La Silla Rota)
Bordando historias: mascarillas indígenas andinas en Bolivia
En Bolivia, mujeres indígenas bordan mascarillas andinas que cuentan historias de su diario vivir. Las mascarillas buscan prevenir el contagio de coronavirus y revalorizar la cultura de los pueblos aymaras y quechuas.
Imagen: DW/Tania Frank
De la necesidad a la oportunidad
Filomena Mamani es una mujer indígenas de la cultura Mollo en la provincia Muñecas de La Paz. Es una de las bordadoras de las mascarillas andinas y cuenta que una necesidad para poder evitar el contagio de coronavirus se convirtió en una oportunidad para hacer conocer su cultura.
Imagen: DW/Tania Frank
Lana de oveja y tela de bayeta de la tierra
Filomena Mamani espera cada mañana la llegada de sus compañeras que vienen a su casa para bordar las mascarillas andinas. En la foto se la ve con una mascarilla andina con lana de oveja y tela de bayeta de la tierra.
Imagen: Tania Frank
Cinco a diez unidades al día
Filomena trabaja con 100 mujeres en el pueblo de Ticamuri y cada una de ellas elabora entre cinco a diez unidades al día. Estas singulares mascarillas están hechas de bayeta de la tierra, un tejido del Altiplano hecho de lana de animales del lugar. Virginia Lipa (a la izquierda) y Carmen Soruco ( a la derecha) viven en la comunidad de Tijimuri.
Imagen: DW/Tania Frank
Cultura tradicional
Verónica Mollo (parada) y Celestina Apaqui (sentada) bordadoras de la comunidad de Tijimuri. “Las hermanas de arriba traen las lanas de llama, de oveja en este sector también hay ovejas de eso lo hacemos también y con los mismos hilos hacemos los telares”, cuenta Filomena.
Imagen: DW/Tania Frank
Líder indígena y artesana
Una vez terminado los bordados, Filomena los envía hasta el pueblo de Ayata, donde se encuentra Ana Alicia Layme, un líder indígena, artesana que se encarga de coordinar el trabajo de las mujeres y explica que cada prenda cuenta una historia de cómo es la vida en su comunidad.
Imagen: DW/Tania Frank
Reflejando la vida de las mujeres andinas
“Promocionar el trabajo de una mujer como es aquí, por eso vas a ver en los bordados la mama cargando su guagüita (hijo) y haciendo hilando y eso es el diario vivir de la mujer siempre esta acompañada con un animal o con unas plantitas”, cuenta Ana Alicia Layme. En la foto: Elizabeth Khuno, bordadora y creadora de mascarillas andinas.
Imagen: DW/Tania Frank
1.700 unidades en siete días
Son 700 mujeres de 15 poblaciones que se dedican a bordar con prisa las mascarillas. Cada uno tiene un costo de 15 bolivianos (2 euros). Ana Alicia explica que en 7 días lograron vender más 1.700 unidades y que con su trabajo son visibles ante la sociedad. En la foto: Celestina Apaqui, artesana de la comunidad de Tijimuri.
Imagen: Tania Frank
De moda en La Paz
En la capital boliviana se ponen de moda los mascarillas andinas para poder evitar el contagio con el coronavirus. “Es cómodo, es calientito y bueno lo que más resalta aquí son los diseños mas que todo, los diseños los colores y así demostrando nuestra cultura boliviana”, cuenta la compradora local Itai González.
Imagen: DW/Tania Frank
Mascarillas andinas para el mundo
Por la pandemia las mascarillas son de uso obligatorio en Bolivia y quienes usan el barbijo andino sienten que están apoyando a promover su cultura. Las artesanas mujeres intentan ahora exportar sus mascarillas a los mercados internacionales. "Este es el trabajo de las mujeres que se está visibilizando en las artesanías y una oportunidad de hacernos conocer al mundo", subraya Ana Alicia Layme.