México captura al narcotraficante "Nini" buscado por EE.UU.
23 de noviembre de 2023
Néstor Pérez Salas era jefe de seguridad de "los Chapitos", grupo formado por los cuatro hijos del convicto narcotraficante Joaquín "Chapo" Guzmán.
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Las autoridades de México capturaron el miércoles (22.11.2023) a Néstor Isidro Pérez Salas, alias "Nini", miembro del grupo criminal "los Chapitos" -parte del poderoso Cártel de Sinaloa- y buscado por Estados Unidos.
El Registro Nacional de Detenciones y medios locales reportaron que Pérez Salas fue detenido tras un fuerte operativo de la Guardia Nacional en Culiacán, la capital del estado de Sinaloa (noroeste), donde se desplegaron helicópteros y personal en tierra, según reportes periodísticos.
Washington acusa al "Nini" de ser jefe de seguridad de "los Chapitos" y de traficar como parte del cártel de Sinaloa "masivos" flujos de fentanilo a ese país, por lo que ofrece hasta tres millones de dólares por su captura.
El Departamento de Estado de EE.UU. sostiene que Pérez Salas trabaja "directamente para el principal adjunto de Iván Archivaldo Guzmán Salazar", uno de los hijos del encarcelado Joaquín "Chapo" Guzmán y actual jefe del cártel de Sinaloa junto a Ismael "Mayo" Zambada, uno de los fundadores de la organización.
Pérez Salas es señalado como uno de los comandantes de "los Ninis", grupo armado y "particularmente violento" encargado de resguardar a los hijos del "Chapo", según la dependencia estadounidense.
En abril pasado, una corte federal del sur de Nueva York acusó al "Nini" de conspiración para la importación y tráfico de fentanilo, así como por posesión de ametralladoras y otros dispositivos destructivos, agregó el Departamento de Justicia.
El Cártel de Sinaloa es señalado por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) como responsable "en gran medida" del tráfico de fentanilo hacia ese país en los últimos años.
gs (afp, ap, efe)
Narcocultura en América Latina: de narcotours a narcocementerios
El próspero negocio del narcotráfico ha dejado una huella profunda en las sociedades latinoamericanas. En países como Colombia y México, generaciones de jóvenes imitan el estilo de vida de los grandes capos.
Imagen: Eduardo Verdugo/AP/picture alliance
Los Tigres del Norte
En México, los Tigres del Norte son los principales representantes del género musical de los narcocorridos, que nació en la década de los 70 del siglo XX. Las canciones que narran la vida de los grandes narcotraficantes se remontan a los movimientos revolucionarios, donde trovadores musicales hacían el relato y la crónica de las hazañas de algunos bandidos sociales, dice Hugo Sánchez, de la UNAM.
Imagen: Cristopher Rogel Blanquet/Getty Images
Narcocementerios
La influencia de la estética del narco también ha llegado a los cementerios. En panteones, como Jardines del Humaya, en la ciudad de Culiacán, descansan los restos mortales de grandes figuras de los cárteles de la droga. Impresionantes mausoleos glorifican a los capos, construyendo leyendas.
Imagen: Pedro Parado/AFP/Getty Images
Jesús Malverde
El culto a Jesús Malverde, patrono de los narcotraficantes, se originó en el estado mexicano de Sinaloa, cuna del cártel del mismo nombre. Hoy día, la figura de Malverde es venerada por muchos mexicanos, en todo el país. Xavier Andrade, de la Universidad de los Andes, cuenta que incluso se encuentran estatuillas y estatuas de Malverde en tiendas de mercancías religiosas en Colombia.
Imagen: Eduardo Verdugo/AP/picture alliance
La Santa Muerte
La Santa Muerte es otra figura que surge del entorno del narcotráfico, donde la muerte está siempre presente. Juan Carlos Hayala, de la Universidad Autónoma de Sinaloa, explica que los grupos criminales han incorporado prácticas de la santería, de origen caribeño, a sus rituales religiosos.
Imagen: Pedro Parado/AFP/Getty Images
Souvenirs de Pablo Escobar
En Colombia, es evidente la proliferación de mercancías que aluden a Pablo Escobar. También son muy populares los narcotours y otras formas de consumo en la ciudad de Medellín, como el culto al deporte de stunts en motocicletas, directamente derivados de la afición de Escobar por éstas, y, de su uso extendido en formas del sicariato, explica Xavier Andrade.
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Ídolos del siglo XXI
Series como "Narcos", "La Reina del Sur" o "El Señor de los Cielos" son productos de la narcocultura. En Colombia, amplios sectores de la población se sienten atraídos por "la ética hiper capitalista de lo narco y la capacidad de exceso consumista que promueve", indica Andrade.
Imagen: Agencia EFE/imago
Un museo dedicado a Pablo Escobar
En 2019, el alcalde de Medellín ordenó cerrar el museo dedicado a Escobar. Sin embargo, estas medidas no han podido frenar el turismo del narco. Paradójicamente, el Museo de la Policía de Bogotá, que intenta brindar una imagen exitosa de la lucha contra el narcotráfico, es visitado regularmente por turistas que quieren ver los objetos asociados a famosos capos, asegura el académico colombiano.
Imagen: imagebroker/IMAGO
Hacienda Nápoles
En la entrada de la antigua hacienda Nápoles, dos turistas toman fotos de la avioneta con la que Escobar envió el primer cargamento de cocaína a Estados Unidos. La atracción hacia formas estéticas, visuales y materiales relacionadas con la imagen del capo, por ejemplo, es mucho más expandida ahora que en los años de auge del Cártel de Medellín, asegura Andrade.