El semanario alemán Der Spiegel, que ha seguido el caso de los estudiantes desaparecidos desde que se produjera hace casi un mes, publica en su edición digital un artículo sobre la renuncia del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero. El político del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), dice el diario, afirmó que lo prioritario es encontrar a los estudiantes desaparecidos. “Tal vez con su correligionario, el alcalde de Iguala José Luis Abarca, podría obtener más información sobre su paradero”, dice el diario. “Abarca fue quien dio la orden para evitar que los estudiantes interrumpieran un discurso de su mujer, a su vez, líder del grupo criminal Guerreros Unidos”.

La edición online del semanario muestra un mapa interactivo que reza: “México bajo control de los cárteles: una lucha por el poder y el dinero a través de los medios más brutales”. Un archivo brinda al lector todos los antecedentes, desde una galería de fotos sobre el caso Iguala, hasta análisis sobre la criminalidad organizada que ha tomado al estado, los hallazgos de fosas comunes, la ira estudiantil que prendió fuego a la sede administrativa de Chilpancingo (capital de Guerrero) y la alianza entre la policía y los cárteles de la droga en México.

Gran atención mediática

La prensa del mundo germanoparlante concedió una gran atención a la dimisión de Ángel Aguirre, el político mexicano que pasó a las filas del PRD, después de 30 años de militancia en el Partido de la Revolución Institucional (PRI), para ganar la gubernatura del estado más violento y pobre de México. Desde el berlinés Tageszeitung, el sensacionalista Bild, la revista Stern o el periódico Die Welt, hasta el suizo Neue Zürcher Zeitung, el austríaco Der Standard y el Liechtensteiner Volksblatt, del pequeño principado de Liechtenstein, entre muchos otros, se ocupan del tema, lo que demuestra cómo ha conmocionado el caso de los estudiantes desaparecidos a la sociedad civil europea.

Medios católicos como el portal DomRadio, de la diócesis de Colonia comentan las declaraciones del sacerdote y activista pro Derechos Humanos, Alejandro Solalinde, que informó a la Procuraduría General de la República, (PGR) sobre lo que le dijeron varios testigos que se mantienen en el anonimato: que los estudiantes, algunos de ellos heridos, fueron quemados vivos. Solalinde llegó a la fiscalía mexicana acompañado de la escritora y periodista Elena Poniatowska.

El portal hace un repaso de los sucesos ocurridos desde la desaparición de 43 estudiantes de la escuela normalista de Ayotzinapa el pasado 26 de septiembre, cuando se trasladaban a Iguala para protestar contra los bajos salarios que perciben los maestros. “Viajaban en autobuses cuando la policía local los detuvo y abrió fuego, matando a varios y trasladando al resto en patrullas y vehículos oficiales. Desde entonces se desconoce su paradero”, concluye el artículo.

Peña Nieto: reacción tardía

El diario de centro-izquierda Frankfurter Rundschau señala que México vive estos días una ola de solidaridad. El país entero se ha puesto del lado de los familiares de los 43 jóvenes desaparecidos hace casi un mes, que con toda probabilidad fueron quemados y enterrados en una fosa común en el extenso estado de Guerrero.

“El presidente Enrique Peña Nieto tardó mucho en percatarse de la dimensión del drama. Primero ignoró el caso, después intentó presentarlo como un problema local del estado de Guerrero. Hasta que vio el tsunami de consternación que los hechos provocaron a nivel internacional, apenas entonces reaccionó como jefe de Estado. Deja la impresión de que está más preocupado porque se eche a perder la reputación del país, que por el paradero de las víctimas y el sufrimiento de sus familiares”, dice el diario en un extenso artículo.

El muniqués Sueddeutsche Zeitung cuestiona el acuerdo en materia de seguridad que tiene previsto firmar con México la canciller alemana Ángela Merkel. “El Parlamento debería estudiar el caso minuciosamente antes de dar su aprobación pues en México el Estado y la criminalidad organizada son cómplices. La lucha contra las drogas es en realidad, violencia politizada”, escribe el jurista de origen estadounidense John Ackerman, que investiga sobre corrupción en la Universidad Nacional Autónoma de México. La aportación de Ackerman muestra el interés en medios germanoparlantes por entender lo que parece incomprensible.