Un político del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD) dice haber recibido información aún no publicada del jefe de la inteligencia. ¿Cierto o falso? ¿Qué motivos hay detrás? Un intento de explicación.
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El próximo martes, la carrera de Hans-Georg Maaßen podría terminar abruptamente, después de seis años. Los líderes de los partidos de la gran coalición decidirán sobre el futuro del controvertido presidente de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BFV). El pasado miércoles, el ministro federal del Interior Horst Seehofer (CSU) expresó su confianza en él. Pero solo un día después, la cadena de televisión ARD informó que un político de la AfD había recibido de Maaßen en junio pasado cifras no públicas del Reporte de Investigaciones sobre contravenciones o delitos contra la Constitución.
"Hablamos de ciertos números"
El momento de la nueva revelación no podía ser peor para el controvertido jurista. Hasta altas horas de la noche, Maaßen había respondido a las preguntas de la Comisión de Control Parlamentario (PKGr), después de haber comparecido ante el Comité de Interior del Bundestag. Se trataba de establecer si sus declaraciones sobre los disturbios de la ultraderecha en Chemnitz eran o no veraces. No logró convencer a todo el foro.
Pero ahora, el diputado Stephan Brandner, de AfD, revela que se reunió con Maaßen hace unas cinco semanas, antes de la publicación del informe de Protección de la Constitución. "Hablamos sobre las diferentes cifras del reporte", lo cita el programa de televisión "Contrastes". La oficina de Maaßen no lo ha negado, por lo que probablemente haya sucedido. Brandner es uno de los 196 parlamentarios de todos los partidos con los que ha habido reuniones desde 2012, dice su oficina.
Periodistas también reciben cifras
Brandner cuenta que hablaron sobre islamistas sospechosos de cometer potenciales actos terroristas y del presupuesto de la Oficina para la Protección de la Constitución. Como los diputados, también los periodistas reciben informaciones de la misma oficina. En eso no hay nada de malo. Lo raro es que el diputado de la AfD saque a relucir una conversación presumiblemente confidencial.
Pero la palabra "presupuesto" sí tiene carga explosiva, toda vez que no aparece en ningún reporte de los entes del Estado. Sobre los presupuestos decide el llamado Comité de Confianza (BfV), al que pertenecen solo pocos miembros del Comité Presupuestario del Bundestag.
Maaßen, empero, ha rechazado los términos de la revelación televisiva. Un portavoz dijo que el presidente sostenía conversaciones con miembros de todos los partidos del Bundestag "por pedido expreso" del ministerio Federal del Interior. "Charlas en las que también se hablaba de seguridad y terrorismo islamista”, agrega. La oficina de Maaßen critica que el informe de ARD diera "la impresión de que la información se ha entregado sin base legal".
Pero incluso si Maaßen no hubiera hecho nada prohibido, las acusaciones coinciden con su mala imagen y la pérdida de confianza en su persona. Con esto, él mismo le facilita a sus críticos pedir su despido.
Pero el hecho de que la AfD, con su supuesta indiscreción, debilite aún más la posición de Maaßen, parece incomprensible, a primera vista. Hasta ahora, este es el único partido que no ha exigido su dimisión. Sin embargo, los populistas de derecha están cada vez más en la mira de los protectores constitucionales. Los estados federales de Bremen y Baja Sajonia piden que la organización juvenil de AfD sea inspeccionada por la oficina de Maaßen, que lo ha rechazado, hasta ahora. Pero los ultraderechistas podrían estar tejiendo la leyenda de que el Gobierno de Merkel retira de su cargo a una figura como Maaßen que se opone a investigarlos.
Marcel Fürstenau (jov/er)
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La Constitución de Weimar: "Democracia sin demócratas"
Alemania, 1919: la guerra se perdió, el emperador dejó el país. Se necesita una nueva Constitución. Los disturbios de Berlín llevan a elegir a la ciudad de Weimar como sede de la Asamblea Constituyente.
Imagen: AFP/Getty Images
Constituyente en Weimar
Entre el 6 de febrero y el 21 de agosto de 1919 sesionó la Asamblea Constituyente en la localidad de Weimar, en Turingia. 423 representantes electos asumieron la gran tarea de formar un gobierno provisional, redactar una Constitución democrática y elaborar un tratado de paz con las potencias vencedoras de la I Guerra Mundial.
Imagen: picture-alliance/DUMONT Bildarchiv
Disturbios en Berlín
Alemania perdió la guerra, que dejó 17 millones de muertos. Los aliados atribuyen a los alemanes la responsabilidad exclusiva del estallido de la conflagración. El emperador se marcha al extranjero. La joven república se ve sacudida por levantamientos y se cierne sobre ella la amenaza de una guerra civil. Prácticamente a diario hay manifestaciones, como la de la foto, del 11 de mayo de 1919.
Imagen: picture-alliance/dpa
El Reichstag
La Asamblea Nacional no puede sesionar en el edificio del Reichstag ya que este se utiliza para acuartelar soldados. Un reporte de mayo de 1919 indica que el interior del inmueble está “tan sucio y dañado” que no es posible usarlo para reuniones parlamentarias. Primero hay que desinfectarlo y sanearlo a fondo.
A diferencia de Berlín, Weimar resulta fácil de defender. Varios miles de hombres protegen la localidad, cuyas vías de acceso fueron bloqueadas en gran parte. Lo que no muestra esta postal de 1919 es que en los balcones que rodean al teatro donde sesionó la Constituyente había apostados soldados armados.
Imagen: picture-alliance/akg-images
El primer presidente
El espacio es escaso. La Asamblea elige presidente a Friedrich Ebert, del Partido Socialdemócrata. El SPD tiene el mayor número de escaños, seguido de del Partido de Centro, católico, y el Partido Democrático Alemán, de corte liberal. Estas tres colectividades conforman la “Coalición de Weimar”. La Asamblea Nacional aprobó la Constitución el 31 de julio de 1919.
Imagen: picture-alliance/akg-images
El poder del pueblo
La de Weimar es la primera Constitución democrática alemana. El texto fue elaborado por el jurista liberal Hugo Preuß. El político socialdemócrata Eduard David afirmó que Alemania era “la democracia más democrática del mundo”, mientras el político de centro Konstantin Fehrenbach calificó a los alemanes de “el pueblo más libre del mundo”. Sabido es que la historia tomó luego un rumbo diferente…
Imagen: Museum der Stadt Weimar
Fallas de nacimiento
Las fallas de nacimiento de la Constitución de Weimar no se vislumbraban por ese entonces. El presidente Friedrich Ebert firmó la Carta Fundamental el 11 de agosto de 1919, en el palacio de Schwarzburg. El cargo de presidente está concebido como un fuerte contrapeso al Parlamento, el Reichstag. Es elegido por el pueblo en votación directa y tiene amplias atribuciones.
Imagen: picture-alliance/dpa
“Democracia sin demócratas“
Estos caballeros son demócratas a carta cabal: Friedrich Ebert (izquierda) y Konrad Adenauer, por ese entonces alcalde de Colonia, quien después de 1945 fue clave en el nacimiento de la República Federal de Alemania. El primer intento de establecer la democracia en Weimar falló por falta de conciencia democrática. Algunos observadores de la época hablaban de “una democracia sin demócratas”.
Imagen: picture-alliance/dpa
Pregunta sin respuesta
Cuando Friedrich Ebert prestó juramento a la nueva Constitución, en 21 de agosto de 1919, no hubo ninguna ceremonia solemne. No obstante, mucha gente se congregó en la Plaza del Teatro de Weimar. 95 años más tarde se sigue discutiendo en qué medida las presuntas fallas de nacimiento de esa Constitución facilitaron el colapso de la república y la llegada al poder de Hitler.
Imagen: Museum der Stadt Weimar
Las lecciones de Weimar
La Carta Fundamental es la base del sistema político de la República Federal de Alemania. En comparación con la época de Weimar, en la actual Constitución las facultades presidenciales son mucho más reducidas, al igual que la posibilidad de realizar referendos. Además, los partidos deben obtener más del 5 % de los votos para tener representación parlamentaria, con lo que se evita su atomización.