Con el "Himno de la alegría" como telón de fondo, el presidente electo de Francia, Emmanuel Macron, llegó hasta el escenario montado frente al Museo del Louvre, en París, para darse su primer baño de masas tras el rutilante triunfo electoral sobre la ultraderechista Marine Le Pen. Vitoreado por miles de seguidores, Macron trazó este domingo (07.05.2017) las líneas de lo que espera sea su mandato.

 

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"Lo que hemos hecho desde hace tantos meses no tiene precedente ni equivalente. Todo el mundo decía que era imposible. ¡Porque no conocían Francia!", dijo el político, en referencia a la fundación de su movimiento "En Marche!”, con el que montó la plataforma necesaria para sustentar su candidatura. Sin embargo, carece de parlamentarios, por lo que recordó la necesidad de "construir una mayoría verdadera, fuerte, una mayoría del cambio que el país requiere”.

Las elecciones parlamentarias en Francia serán en junio, y Macron está obligado a obtener un número de parlamentarios que le permita gobernar tranquilo. Sin embargo, dicha posibilidad se ve lejana, por lo que es muy probable que el joven dirigente, de 39 años, se vea forzado a negociar con otros partidos. Macron reconoció que la tarea que viene ahora es "inmensa” y por ello pidió ayuda a sus seguidores, "porque los sigo necesitando”.

No abuchear, reconciliar

Tras mencionar a Marine Le Pen, pidió que no se abucheara su nombre, recordando que su misión como jefe de Estado será reconciliar a Francia. Con respecto a quienes votaron por la ultraderecha, dijo entender que "han manifestado enfado, desconcierto, a veces convicciones”, pero agregó que trabajará con ahínco para que, dentro de cinco años, los franceses "no tengan ninguna razón para votar al extremismo”.

Antes de este discurso ante sus seguidores, Macron había hablado de forma solemne desde su cuartel general de campaña. Allí prometió trabajar para "restablecer los vínculos entre Europa y los ciudadanos” y aseguró que defenderá "Francia, sus intereses vitales y su imagen. Asumo el compromiso ante ustedes. Defenderé Europa y a Francia. Está en juego nuestra civilización, nuestra manera de ser libres”.

Críticas por himno europeo

Macron, que nunca antes había competido por un cargo público, obtuvo el 66,10 por ciento de los votos, con el cien por cien de los sufragios escrutados, según actualizó el Ministerio del Interior galo en la mañana de este lunes (8.05.2017). El dato preciso llegó después de su discurso, pero la victoria estaba clara mucho antes. Marine Le Pen, en tanto, sumó un 33,90 por ciento. El exministro de Economía recibió el apoyo de 20,75 millones de electores, mientras que la líder del Frente Nacional (FN) fue respaldada por 10,64 millones.

La abstención, la más alta desde 1969, fue del 25,44 % y los votos en blanco y nulos registraron un récord, el 11,47 % de los sufragios depositados.
Macron, que será el presidente más joven de la República francesa a sus 39 años, logró sus mejores resultados en París, con un porcentaje cercano al 90 %, y en los departamentos circundantes de Hauts-de-Seine y Val-de-Marne, en los que en ambos casos superó el 80 %.

Los dos únicos departamentos de Francia donde la líder ultraderechista fue la más votada fueron los de Aisne y de Pas-de-Calais, ambos en el norte de Francia, con porcentajes superiores al 52 por ciento.

Tras finalizar su acto frente al Louvre, los presentes entonaron el himno de Francia. Pese a ello, el Frente Nacional criticó que, en la obertura, se escucharan los acordes del himno oficial de la Unión Europea, basado en la Novena Sinfonía de Beethoven.

DZC (EFE, AP)