"La verdad es que nuestro comandante está en batalla (...) Pudiéramos decir que va remontando la cuesta, va avanzando y eso nos llena de gran felicidad", dijo Maduro en una reunión de gobierno.

Tras su regreso la noche del lunes de La Habana, donde visitó a Chávez para enterarse de su situación de salud, Maduro presidió un encuentro con gobernadores regionales recién elegidos.

Con la reunión retomó su actividad al frente del gobierno, que está bajo cuestionamiento de la oposición después de que Chávez no pudiera jurar el 10 de enero para el mandato 2013-2019 y un fallo judicial avalara la continuidad del mandato.

Explicó que en su reunión en La Habana "actualizó" a Chávez del desarrollo del gobierno y dijo que el mandatario está acompañado por sus hijas y familiares cercanos, que "siguen aguantando mentiras y maldades" en rumores que circulan.

"Nuestro comandante sigue remontando la cuesta, va avanzando y eso nos llena de gran felicidad, desde el punto de vista humano y de felicidad patria. Nuestro compromiso es trabajar desde aquí, todos los días, con serenidad, con confianza y seguridad. Decimos a nuestro pueblo que hay que tener el mismo coraje del presidente Chávez para enfrentar las dificultades de todos los días", resaltó.

Chávez convalece en La Habana desde la operación por la recurrencia del cáncer del 11 de diciembre, fecha desde la que no ha tenido contacto directo con su país.

Maduro dijo que durante su permanencia en La Habana, la oposición acusó al gobierno que dirige de estar recibiendo directrices del régimen cubano, que estaría poniendo en práctica una injerencia en vista de las frecuentes reuniones en Cuba de las principales funcionarios gubernamentales.

"Algunos nos acusan de que somos una colonia de Cuba. Esa es una ofensa contra Cuba y contra Venezuela porque somos dos países que conquistaron su independencia. Nadie nos regaló nada", señaló.

Maduro indicó que Venezuela sufrió una cruenta guerra hace 200 años para lograr su independencia y ahora "nadie puede decir que la revolución bolivariana nos la regalaron".

"Es una ofensa contra Venezuela. Aquí estamos con lucha, lucha y más lucha y un pueblo consciente que en 2002 (por una huelga general) prefirió cocinar con la madera de sus muebles antes que rendirse. Es una ofensa contra Cuba porque la isla luchó siempre por su independencia. Cuba se levantó mil veces contra las tropas del imperio", indicó.

Maduro dijo que después llegaron los "barbudos" de la Sierra Maestra como "ángeles" que conquistaron con las "armas su independencia y ha resistido 54 años el bloqueo yanqui y ahí están viviendo con su educación y su salud".

"Si nos quieren acusar a Venezuela y a Cuba debe ser de antiimperialistas y anticolonialistas. Cuando dos antiimperialistas y anticolonialistas se ven las caras, nos vemos como hermanos y cuando nos unimos es para luchar por la independencia, por el coraje de nuestro pueblo por la educación, por la salud", alegó.

Agregó que en la oposición "hay quienes nos juzgan por la forma en que ellos actúan, se van a la embajada de Estados Unidos o a Washington de rodillas y creen vernos a nosotros así con Cuba".

"Con Cuba tenemos la hermandad más grande que pueda existir", dijo Maduro, quien agradeció la atención que los médicos cubanos le han dado a Chávez durante su convalecencia.

dpa

Editor: Pablo Kummetz