Pocas celebridades han provocado en Alemania tal controversia como Leni Riefenstahl. La cineasta quien murió el lunes por la noche a la edad de 101 años, era admirada por muchos por su extraordinario talento, pero también fue odiada por haber sido amiga de Hitler. Su obra estuvo marcada por su amistad con el dictador y por las dos películas que hizo para él: "Triumph des Willens", "El triunfo de la voluntad", filmada en 1935, que convirtió en una obra maestra el congreso del partido nacionalsocialista, y "Olimpia", producida con motivo de las Olimpiadas de Berlín en 1936. "Su corazón simplemente dejó de latir", dijo su compañero sentimental y quien fuera su camarógrafo, Horst Kettner. La directora de cine murió mientras dormía en su casa de Poecking, en Baviera, al sur de Alemania. 

Una de las celebridades del siglo XX

Desde hace meses la salud de la cineasta se había deteriorado. Padecía cáncer y sufría dolores constantes, pero eso no le impidió celebrar su 101 cumpleaños el pasado 22 de agosto, aunque en la cama, tras una operación reciente. La revista estadounidense TIME, la incluyó entre las 100 figuras más importantes del siglo XX. El coreógrafo e ideólogo comunista Johann Kresnik le dedicó un Ballet y tuvo muchos admiradores, entre ellos, el rockero Mick Jagger y los cineastas Francis Ford Coppola y George Lucas, quienes la consideraban una documentalista genial.

Sin embargo, la mayoría de los alemanes nunca le perdonó su amistad con Hitler y que hubiera rodado películas propagandísticas del nazismo. "Su peor carencia era su falta de visión", dijo con motivo de su muerte el director de los Museos de la ciudad de Nuremberg, Franz Sonnenberger. Bailarina, actriz y cineasta, Riefenstahl encarnó el modelo de mujer emprendedora y vital, que empezó a practicar el buceo pasados los 70 años. Con su compañero y camarógrafo incursionó en la fotografía submarina. La película documental "Impressionen unter Wasser", "Impresiones bajo el agua", fue transmitida por televisión hace apenas un año.

¿Amante de Hitler?

Leni Riefenstahl nunca ocultó su fascinación por Hitler, quien a su vez descubrió el talento de ella en la primera película que dirigió, "Das blaue Licht", "La luz azul", filmada en 1932 y premiada en el Festival de Venecia. Se dice incluso que fueron amantes, algo que ella siempre negó. Ella argumentaba haber filmado "El triunfo de la voluntad" en 1935, mucho antes de que se desatara la guerra y haber recibido por ese documental todos los premios imaginables.

"A ningún periódico se le ocurrió decir que era una película de propaganda nazi; después de la guerra todos empezaron a decir eso y eso ocurrió porque perdimos la guerra y porque se hicieron cosas horribles en nombre del pueblo alemán y había que buscar un chivo expiatorio, así que me escogieron a mí por haber hecho la mejor película de la época", dijo Rienfenstahl en una ocasión al presentar su autobiografía en la Feria del libro de Fráncfort.

Acusada de negar el Holocausto

En 1940 filmó la película "Tiefland", lo que desató una nueva controversia poco antes de su centenario. La comunidad gitana la acusó por haber utilizado como extras a presos de esa etnia confinados en campos de concentración. Riefenstahl dijo haber visto tras la guerra a los gitanos que participaron en sus películas, con lo que negó que hubieran sido asesinados en los campos de concentración. Dicha afirmación provocó un gran revuelo y condujo a que la fiscalía de Fráncfort le abriera un proceso por negar el Holocausto.

Lení nació en Berlín el 22 de agosto de 1902 y antes de ser cineasta fue bailarina, pero una lesión en la rodilla le impidió seguir. Empezó a hacer películas de esquiadores y alpinistas y pronto empezó a conducir sus películas. El ministro de propaganda nazi, Joseph Goebbels, la condecoró por sus méritos, pero tras la guerra y el proceso de desnazificación que tuvo lugar en Alemania, fue procesada como cómplice del régimen y quedó estigmatizada. La talentosa cineasta buscó refugio en su trabajo. Viajó a Africa en 1973 y filmó la estilizada belleza de los nubas, una tribu africana con la que convivió y sobre la que hizo un impresionante libro fotográfico.

Desde hace años se rumora que Hollywood estudia la idea de realizar una película sobre esta mujer indómita. Esto no le agradaba a Riefenstahl pues temía quedar estigmatizada como la cineasta del nazismo y pedía que pospusieran el proyecto para cuando estuviera muerta. Ahora seguramente ya no le importarán los riesgos de semejante retrato.