Manifestación contra Putin: oposición rusa en Berlín, unida
16 de noviembre de 2024"¡No a Putin! ¡No a la guerra! ¡Libertad para los presos políticos!". Los miembros de la oposición rusa quieren manifestar este domingo (17.11.2024) en Berlín bajo estas tres demandas. Esperan marchar hasta la embajada rusa, cerca de la Puerta de Brandeburgo. La convocatoria fue hecha por los destacados políticos de la oposición Ilja Jaschin y Vladimir Kara-Mursa, liberados en agosto durante el intercambio de prisioneros entre Rusia y Occidente. También está Yulia Navalnaya, la viuda del crítico del Kremlin y líder de la oposición Alexei Navalny, que falleció estando preso. Desde su muerte en febrero, ella ha buscado cada vez más presencia pública para perseguir los objetivos de su esposo.
Disputa por la bandera rusa
Cualquiera que en Rusia proteste contra la guerra en Ucrania se arriesga a largas penas de prisión. Sólo hubo manifestaciones al principio de la gran invasión en 2022, desde entonces las leyes se han endurecido drásticamente. Los opositores rusos que viven en el extranjero no tienen este problema, pero se enfrentan a otro: las acusaciones de no ser prácticamente visibles. En concreto, los activistas ucranianos, que regularmente enarbolan la bandera contra la guerra rusa en toda Europa y especialmente en Alemania, se preguntan dónde están los oponentes rusos a la guerra.
Hablando de banderas: los días previos a la manifestación ha habido disputas en las redes sociales sobre si se podía caminar por Berlín con la bandera tricolor rusa. El anuncio de la marcha de protesta mostraba imágenes de una manifestación de la oposición en Moscú contra la anexión de Crimea en 2014, en aquel momento con banderas rusas y ucranianas. Los críticos dicen que la brutal guerra ha desacreditado ya los colores rusos. "Los criminales de guerra y sus cómplices marchan bajo esta bandera", afirma Ksenia Larina, una periodista que abandonó Rusia antes de la invasión rusa de Ucrania. El politólogo Alexander Kynew no está de acuerdo: cualquiera que establezca condiciones adicionales, ya sean banderas, música o ropa, contribuye a que venga menos gente. Esto conduce a "divisiones", afirma.
Parte de la oposición rusa utiliza una bandera blanca, azul y blanca para distinguirse visiblemente de la Rusia de Putin. Para Jaschin no hay restricciones. "Dejamos al margen eso (la cuestión de la bandera), no es relevante". Vladimir Putin no tiene ningún derecho sobre la tricolor rusa, afirma a DW.
Dos bandos en la oposición rusa en el exilio
La bandera es sólo un ejemplo de lo dividida que está la oposición rusa en el exilio, que también se agrupa en torno a diferentes líderes. Un grupo apoya el proyecto más conocido de Navalnaya y su esposo: la Fundación Contra la Corrupción (FBK). Su principal objetivo es que los documentales que producen lleguen a los ciudadanos de Rusia a través de YouTube y otras redes sociales.
Otros son leales a Mijaíl Jodorkovski, el exmagnate del petróleo y destacado crítico del Kremlin que pasó 10 años en prisión. Ambos grupos compiten por el liderazgo y también organizan eventos separados. El foro de Navalnaya tuvo lugar en Vilnius, Lituania, a principios de noviembre, al mismo tiempo que la reunión del "Comité Antiguerra" en Berlín, al que pertenece Jodorkovski.
La oposición iraní en Berlín como modelo a seguir
¿La protesta en Berlín nos hará olvidar las divisiones? Jaschin así lo espera. "La situación en la oposición no es fácil. No hago sólo un llamado a la consolidación, hay carencias. En la oposición hay muchos enfrentamientos, la competencia no siempre se desarrolla como debería", admite el político de la oposición. "Sin embargo, no está claro por qué".
Las disputas y el desacuerdo no deben sin embargo exagerarse, opina el opositor ruso Dmitri Gudkov. "No hay espacio para una verdadera lucha por hacerse con el poder". En cuanto hubiera realmente algo en juego, los ahora adversarios políticos de la oposición rusa se reunirían sin duda "en una mesa redonda", dice a DW.
Jodorkovski apoyó la marcha en una entrevista con Bild, pero se quejó de lo que consideraba acuerdos verbales inadecuados. A Jaschin le hubiera gustado evitar tal disputa; más bien, la manifestación en Berlín debería dar voz también a los opositores a la guerra en Rusia, que están "siendo silenciados". Por eso acordaron unas demandas básicas compartidas indiscutiblemente por todos. Una de ellas es llevar a Putin ante la justicia.
Lo que pasará después con la oposición rusa sigue sin estar claro. "Me parece que nadie tiene un plan", lamentó Navalnaya, premio de DW a la Libertad de Expresión 2024, en una entrevista para el canal de televisión Doschd. "Si alguien tuviera un plan, todos lo habríamos aceptado y aplicado", añadió. Se debería intentar hacer "algo útil" cada día.
"Nos guiamos por las experiencias de la oposición iraní: en condiciones similares organizaron manifestaciones en Berlín con 50.000 participantes", afirma Jaschin. Desde entonces se les ha tomado en serio "como una fuerza política".
(lgc/rr)