La nueva ley antiprotestas parece no haber surtido efecto alguno entre los manifestantes ucranianos. O sí, quizás el contrario al que buscaba. Este domingo (19.01.2014) unas 100 mil personas (200 mil según otras fuentes) salieron a las calles a expresar su malestar con la política prorrusa del Gobierno del presidente Viktor Yanukovich, lo que derivó en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que dejaron decenas de heridos.

En horas de la noche se informó que distintos líderes opositores se reunieron con el mandatario en su residencia para buscar una salida a la crisis. Yanukovich prometió en ese encuentro llamar este mismo lunes 20 de enero a la formación de una comisión para resolver la crisis. Ésta sería compuesta por miembros del oficialismo y de la oposición.

Más temprano, cientos de opositores, armados con bastones de madera y enmascarados, intentaron romper las barreras de seguridad instaladas por la policía en torno al Parlamento, para ingresar a éste. Incluso el líder de las protestas, el opositor y exboxeador Vitali Klitschko, fue atacado y rociado con el contenido de un extintor de incendios cuando intentaba tranquilizar a la multitud.

La policía, por su parte, se defendió lanzando granadas de humo y gases lacrimógenos. Del otro lado hubo ataques con cócteles molotov, bengalas y otros objetos, que provocaron daños al menos a un autobús policial. El ministro del Interior ucraniano informó que 70 agentes resultaron heridos en la jornada. Se desconoce el número de manifestantes lesionados.

Falta determinación

Las protestas, que originalmente buscaban dar un impulso a los planes de acercar Ucrania a la Unión Europea, han sumado también expresiones de malestar por la norma antiprotestas, que ha sido calificada por diversos gobiernos occidentales como antidemocrática. Ésta fue aprobada el jueves 16 de enero y apunta a prohibir cualquier instalación no autorizada de carpas, escenarios o uso de altavoces en lugares públicos. Castiga, asimismo, la participación en “desórdenes masivos”.

Pese a las semanas de manifestaciones, la oposición ha sido incapaz de encontrar coordinación y sus demandas parecen no ser escuchadas por el Gobierno. Esto ha llevado a que muchos de los presentes este domingo abuchearan a Klitschko, al que acusan de actuar sin determinación y sin un plan claro. Mientras él pide un cambio de Gobierno pacífico, otros dentro del movimiento exigen algo más rápido.

“Necesitamos un líder que nos conduzca aquí y ahora a la victoria. Necesitamos un nombre”, dijo Dmitri Bulatov, uno de los líderes de las protestas callejeras. Klitschko intenta, por ahora, recomponer fuerzas. Una portavoz suya dijo por Twitter que el presidente Yanukovich se reuniría con el exboxeador, algo que no pudo ser confirmado, mientras el opositor acusaba al régimen de “robar el país a la población”.

DZC (Reuters, dpa, Europa Press, AFP)