María Corina Machado: "Es el logro de toda una sociedad"
10 de octubre de 2025
Cuando informó a María Corina Machado que sería la receptora del Nobel de la Paz 2025, al Director del Instituto Noruego del Nobel, Kristian Berg Harpviken, se le quebró la voz de la emoción.
La respuesta de Machado a la llamada de Harpviken fue solemne: "Estoy sin palabras, muchas gracias, pero debe entender que esto es un movimiento y un logro de toda una sociedad. Solo soy una persona, no me lo merezco".
Noruega conoce muy bien la lucha democrática en Venezuela, ya que desempeñó un papel clave como mediador en las negociaciones de paz en Venezuela entre 2019 y 2024, facilitando el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición. Sin embargo, el informe final publicado por Noruega en junio de 2025 reconoció que el modelo de mediación no logró una solución política integral. El país escandinavo admitió que su estrategia fue insuficiente frente a un "régimen autoritario", y que la falta de condiciones claras pudo haber legitimado prácticas inaceptables. Conocer ese panorama pudo haber sido la causa tras al gran emoción de Harpviken.
En su comunicado oficial, el comité resaltó que Machado es "una figura valiente y comprometida con la paz” que "mantiene viva la llama de la democracia en medio de una oscuridad creciente”. Señala también su papel como "figura unificadora” dentro de una oposición venezolana previamente fragmentada, y valora cómo su movimiento logró consenso en torno a la exigencia de elecciones libres y gobierno representativo.
Un camino lleno de obstáculos
La lucha democrática de María Corina Machado ha estado enfrentada a eventos insólitos que han puesto a prueba su determinación. La persecución política comenzó con inhabilitarla para optar a cargos públicos, sus colaboradores han sido arrestados arbitrariamente, algunos incluso desaparecidos forzosamente. La administración de Nicolás Maduro ha ido a los extremos de fabricar conspiraciones, acusarla de terrorismo, magnicidio y otros complots que no han prosperado. El mensaje de Machado siempre ha sido que "la verdad es la verdad y la vamos a defender hasta el final".
María Corina Machado siempre se ha enfrentado con firmeza al régimen autoritario que gobierna a Venezuela. La respuesta ha sido represión política, persecución judicial y amenazas constantes. Machado es una de las pocas líderes de la oposición que continúan dentro de Venezuela. En ocasiones, Machado ha sido un punto de discordia entre partidos y líderes de la oposición por no negociar los principios básicos de la democracia. Por esta razón, la dirigente opositora podía pasar temporadas en el anonimato o en condición de ocultamiento para evitar arrestos, o divisiones más profundas dentro de la oposición. Sin embargo, nunca abandonó su lucha desde dentro del país.
La paz de la oposición también ha sido puesta a prueba desde hace varios años. Los mítines, manifestaciones y actos públicos han sido interrumpidos con violencia y represión por parte de las fuerzas del Estado y los colectivos armados afines al chavismo. Tras las elecciones presidenciales del 2024, la administración de Maduro arrestó a más de 2.000 personas, entre los que había centenares de menores de edad. Los disturbios generados por la proclamación de Nicolás Maduro como presidente sin mostrar aún los resultados dejaron al menos 24 muertos a manos de las fuerzas de seguridad.
En enero de 2025, tras reaparecer en una manifestación contra la proclamación de Maduro, después de meses de clandestinidad, María Corina Machado fue detenida unas horas por fuerzas represivas, sufriendo agresiones físicas, y fue luego liberada, tras ser obligada a grabar un video como condición para su libertad.
El Comité Noruego del Nobel destacó que Machado ha permanecido en Venezuela pese a graves amenazas a su vida y a la persecución política, lo que ha inspirado a millones. El comité interpretó que su acción ciudadana, aun en condiciones adversas, representa uno de los ejemplos más extraordinarios de coraje civil en América Latina de los últimos tiempos.
Impacto simbólico y desafíos futuros
El triunfo de Machado marca un hito: pone a Venezuela y su crisis democrática en la agenda global de manera renovada. Para sus seguidores, el Nobel representa una inyección moral y diplomática, una señal de que la comunidad internacional aún apuesta por la esperanza democrática. Para el gobierno venezolano, supone un golpe simbólico difícil de ignorar.
Si bien el Nobel de la Paz no garantiza el cambio político inmediato en Venezuela, puede fortalecer el liderazgo de María Corina Machado y el movimiento opositor, legitimar su mensaje y abrir nuevas puertas diplomáticas para la causa venezolana.
(chp)