Querétaro está situada a unos 200 kilómetros al noroeste de Ciudad de México. Hasta ahora, se había librado de la espiral de violencia del crimen organizado que aqueja al país, siendo considerada una de las ciudades más seguras de México.

El sábado (9.11.2024) en la noche, cuatro sicarios con armas largas perpetuaron la peor masacre registrada en la ciudad, dejando diez personas sin vida y siete más con diversas lesiones.

10 víctimas mortales

Los asaltantes bajaron de un auto estacionado frente al bar Los Cantaritos, situado en la circunvalación que rodea el centro histórico de Querétaro. Una primera grabación muestra cómo irrumpieron en el local. En la terraza, los clientes huyeron o se tiraron al suelo para escapar de los disparos, según otra grabación que muestra imágenes de la fiesta bruscamente interrumpida.

"Cuatro personas llegaron con armas de largo alcance en una furgoneta", dijo Juan Luis Ferrusca Ortiz, titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Querétaro  en un video publicado en X.

 "Dentro murieron diez personas y al menos otras siete resultaron heridas". Según la Fiscalía del estado de Querétaro, entre las víctimas había tres mujeres. Al parecer, hay una persona está detenida y será remitida a la Fiscalía General, añadió Ferrusca.

Mensaje del gobernador del estado de Querétaro

Los agresores llegaron al bar Los Cantaritos en un vehículo cuyo número de matrícula fue identificado, agregó. El vehículo fue incendiado "por los presuntos responsables" del ataque. Los hechos han sido comprobados por imágenes de videovigilancia difundidas por medios de comunicación mexicanos.

"Todo el sistema de seguridad de Querétaro está movilizado para encontrar a los delincuentes", dijo, por su parte, el gobernador del estado, Mauricio Kuri, en la red social X.  "Reitero al pueblo de Querétano que los responsables de este brutal hecho serán sancionados", añadió. "Continuaremos sellando nuestras fronteras y manteniendo la seguridad de nuestro estado". MS (afp/efe)