Olaf Hinrichsen no pudo dedicarse al magisterio debido a sus malas calificaciones. Pero ello no le impide dar clases de matemáticas a adolescentes. Este alemán de Niebüll, en el norte del país, explica complejas fórmulas matemáticas mediante videos en Internet. Los fondos para sufragar su idea los obtiene de la publicidad. Muchos jóvenes estudiantes recurren a su página para despejar sus dudas.