Liberation, de París: “Es casi medianoche en Europa y los incendiarios de siempre se abocan al trabajo con alegría. En Berlín, en Fráncfort, en París o en Amsterdam, los responsables de la clase política discuten sobre las medidas necesarias para rescatar al euro. (…) A todo esto, lo único que podría aportar algo de tranquilidad y sensatez sería el anuncio de un concepto político para el euro. El Tribunal Constitucional alemán no se equivocó la semana pasada al declarar con firmeza que los ciudadanos deben participar –a través de los parlamentos- de las medidas urgentes y de las grandes decisiones políticas de sus gobiernos.”
 

“Salvar al euro cuanto antes”

Die Welt, de Berlín: “El fundamento de Europa ha degenerado en una sociedad de garantes que estará dominada durante muchos años por las luchas de reparto entre los países receptores y los países dadores. ¿Y todo eso por Grecia? No, Grecia es sólo un símbolo del fracaso de los gobiernos de la Unión Europea. Europa se ha convertido en un continente incontrolablemente endeudado. La deuda reprimirá el crecimiento y dañará a las generaciones futuras. Grecia pronto hará una conversión de deuda, y los contribuyentes alemanes perderán con eso miles de millones de euros. Pero los que salvarán al euro deben seguir de una vez ese camino, ya que, cuanto más esperen, más caro les saldrá.”
 

“¿El principio del fin?”

Nowyje Iswestja, de Moscú: “La situación financiera de Europa empeora día a día. Y, hasta tanto los gobiernos de los países europeos no tomen medidas concretas como para, al menos, estabilizar los sistemas financieros a nivel regional, los índices de las bolsas seguirán cayendo. La cumbre del G-20 seguirá tan vacía de contenido como el encuentro de los ministros del G-7 en Marsella si los líderes europeos no entienden que la confianza en ellos es casi igual a cero. Los inversionistas no creen hoy ni una sola de las promesas políticas. Y a la crisis de la eurozona se suma también una crisis de credibilidad del poder ejecutivo que lleva a que se cuestionen cada una de las declaraciones políticas.”
 

“¿Cómo evitar que los bancos también caigan?”

Le Figaro, de París: “Parece que es sólo cuestión de días. Grecia está, supuestamente, al borde de la insolvencia, al menos en lo que respecta a una parte de sus deudas. El escenario que la Unión Europea no quiso aceptar está a punto de convertirse en realidad: un país de la eurozona podría dejar de estar en condiciones de pagarle a sus acreedores –a pesar de la movilización política de sus socios y de los inmensos esfuerzos financieros realizados. Tal vez Grecia deba salir de la eurozona. (…) Y con eso se plantea una cuestión bien pragmática y candente: ¿cómo se podrá evitar que la cesación de pago de Grecia no arrastre a los bancos a la crisis?”
 

“Habilidades políticas, inadecuadas en la crisis”

El País, de Madrid: “(…) Con independencia del muy cuestionable comportamiento de los Gobiernos griegos desde el acceso de ese país a la Unión Monetaria y de algunos de los pecados originales en la concepción del área monetaria, lo que esta crisis está demostrando es la incapacidad de los Gobiernos, en especial del alemán, para arbitrar una salida a la crisis. (…) Las tensiones en los mercados de estos días, que ayer se tradujeron en una nueva jornada negra para las Bolsas, no solo reflejan esa indecisión alemana, sino también la creciente evidencia de un menor crecimiento económico y la correspondiente erosión en los beneficios empresariales. (…) De persistir situaciones como las observadas ayer en los mercados a propósito de los bancos, lejos de ser parte de la solución a la crisis económica actual, estos podrían constituir un problema adicional. Nunca como ahora las habilidades políticas fueron tan inadecuadas a la magnitud de los problemas planteados y a las amenazas sobre el bienestar de los europeos.”

Autora: CP/ dpa
Editora: Emilia Rojas