Donald Trump pretende ser el próximo presidente de Estados Unidos. En caso de lograrlo, su esposa sería, por primera vez en casi doscientos años, una primera dama europea. Visitamos su ciudad natal, Sevnica.
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El increíble ascenso de una chica de Sevnica, una hora al este de la capital eslovaca, no es indiferente en la zona. Los equipos de televisión toman el lugar donde Melania Knavs y su hermana mayor, Inés, se criaron. En el castillo local se congratula el alcalde Srecko Ocvirk: "Estamos algo apartados de las carreteras principales, ahora viene más gente", admite. "Melanie es un modelo para las jóvenes. Ella demuestra lo que se puede conseguir".
También los padres de Melanie viven ahora en Estados Unidos, explica el alcalde. Pero vuelven por vacaciones. Abajo, en el centro de la ciudad, todo el mundo conoce a Melanie Trump. "Por supuesto que estamos orgullosos, creo que es bueno para Sevnica y Eslovenia", dice la empleada Moyca Jevsevar. Boris Stamulak, camionero, afirma: "Para nuestro país sería un 'plus' si la hicieran primera dama; eso situaría a Eslovenia mejor en el mapa".
Hija de un comunista
Melanie está de moda en Eslovenia y eso atrae a los autores. El exparlamentario Igor Omerza le escribió, junto al periodista Bojan Pozar, una biografía. Sus investigaciones concuerdan con los rumores de que su padre era miembro del Partido Comunista. Un tema controvertido para los republicanos.
"Viktor Knavs no era un comunista activo, se unió al partido porque eso tenía sus ventajas", explica Omerza, para quien Melanie y su hermana fueron educadas con esmero. En cualquier caso, opina, estaría a la altura de tan importante papel: "Está acostumbrada a los actos públicos, viste bien y tiene presencia; además es muy natural… sería una muy buena primera dama".
Recuerdos de un novio de juventud
Eslovenia es un pequeño país europeo de dos millones de habitantes, así que todos los que han tenido algo que ver con Melania están en el ojo público.
Por ejemplo, el especialista en relaciones públicas Peter Butoln, de 47 años. Se refiere a sí mismo como su primer novio. Se conocieron en la capital, Ljubljana, por la que paseaban en su Vespa, una moto que ahora quiere subastar. Él quiere que el vehículo pronto subastar al mejor postor. "Ella era una chica tranquila, normal, nada forzada", dice Butoln. Y enseña la postal que le escribió con 16 años durante unas vacaciones familiares en el Adriático. Se separaron cuando él fue llamado al servicio militar. Aún hoy, casados con hijos, suspira cuando ve sus fotos en internet.
Stane Jerko, su descubridor
"Tenía un gran piernas largas y pelo largo y hermoso", dice el fotógrafo de 79 años de edad, Stane Jerko, un pionero de la moda en la antigua Yugoslavia.
Descubrió a Melanie con 17 años, cuando buscaba nuevas modelos en Ljubljana. Tras esas primeras fotos de estudio, tomadas en 1987, ella se centró en sus estudios. Pero esas imágenes la ponen en contacto con las agencias de modelos y la eslovena da el salto a Milán y París.
No hubiera sido una 'top-model', porque era reservada y rara vez iba a fiestas, dice Stane Jerko. "Cuidaba de su salud, su cuerpo. Cuando llegó en los noventa a Estados Unidos mantuvo esa disciplina de trabajo". Fue invitada por un amigo modelo a un desfile de moda, en el que conoció a Donald Trump. "Creo que, como primera dama, se convertiría en un icono de la moda; como Jackie Kennedy o Michelle Obama. Todos los diseñadores se pelearían por ella. Estoy orgulloso de haberla descubierto", concluye Jerko.
Colección propia de joyas y cosméticos
Hoy en día, Melanie Trump disfruta de un lujoso estilo de vida junto a su marido. Residen en Nueva York en el ático de la Torre Trump con el hijo de ambos, Barron. Aunque ella, a punto de cumplir 46 años, se declara "madre a tiempo completo", saca tiempo para su propia línea de cosméticos y de joyas.
"Cuando fui candidata por mi país a Miss universo, en 2006, conocí a Melanie y a Donald Trump en Los Ángeles", recuerda la modelo Nataša Pinoza. "Mira, aquí hay alguien de tu tierra, de Sevnica", le dijo él a ella, que vino enseguida a hablarme en esloveno. "No sólo sería una buena primera dama, sería una de las mejores", afirma Pinoza. "Es tranquila, paciente y habla con el corazón en la mano".
Políticos en la mira de la sátira
Trátese de Merkel, Putin, Trump o Bush: cada quien tiene su propio estilo de hacer política y también reacciona de forma diferente a la sátira.
Imagen: ZDF Neo Magazin Royale
Angela Merkel
Durante el apogeo de la crisis del euro, muchas revistas y periódicos griegos retrataron a la canciller alemana, Angela Merkel, con símbolos nazis. En la portada que se puede ver en la imagen, la revista satírica "Mystiki Ellada" mostró en 2012 a Merkel vestida con el uniforme de soldado del Ejército de la Alemania nazi. En ningún momento la canciller sopesó proceder legalmente contra el medio.
Imagen: picture-alliance/Rolf Haid
Vladímir Putin
Las fotos vacacionales del presidente ruso, Vladímir Putin, sirven de inspiración a humoristas satíricos de todo el mundo. Desde que el hombre fuerte del Kremlin se dejó fotografiar montando a caballo a pecho descubierto, el torso desnudo del presidente es un motivo muy popular, por ejemplo en el Carnaval de Colonia de 2015.
Imagen: picture-alliance/dpa/R. Weihrauch
Donald Trump
El precandidato presidencial republicano Donald Trump es el blanco predilecto de muchos caricaturistas y humoristas. No obstante, el magnate es muy sensible a las críticas. El periódico Boston Globe publicó un encabezado ficticio, en el que hace parodia de las propuestas del precandidato en torno a la política de inmigración. Trump calificó al diario de “estúpido” y “despreciable”.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/The Boston Globe
Kim Jong-Un
El dirigente comunista de Corea del Norte no tiene mucho sentido del humor. Para impedir que la película satírica “La entrevista” se estrenara en 2012 en los cines estadounidenses, el régimen norcoreano lanzó una serie de ataques cibernéticos. Los estudios cinematográficos Sony fueron hackeados, y también se registraron muchas amenazas de atentados contra cines estadounidenses.
El expresidente estadounidense George W. Bush es uno de los políticos que más ha inspirado a los cómicos en Estados Unidos. La supuesta falta de intelecto del exmandatario de origen tejano ha sido motivo de burla por parte de los humoristas.
Imagen: Getty Images/M. Tama
Jaroslaw Kaczynski
A principios de año, un carro alegórico del desfile del Carnaval de Dusseldorf provocó tensiones diplomáticas entre Alemania y Polonia. Esta es representada como una mujer maltratada y pisoteada por el líder del partido de los nacionalconservadores, Jaroslaw Kaczynski. El ministro de Relaciones Exteriores polaco dijo que el carro mostraba el “desprecio hacia Polonia y los políticos polacos”.
Imagen: picture-alliance/dpa/F. Gambarini
Benjamín Netanjahu
El primer ministro israelí suele ser objeto de burla del programa de televisión “Eretz Nehederet” (Un país hermoso). En esta escena, los cómicos hacen una parodia de las negociaciones entre el jefe de Estado de Israel y la organización palestina Hamás. No obstante, Netanyahu nunca se ha indignado. Al contrario, en 2013 visitó el programa como invitado estelar.
Imagen: Getty Images/AFP/J. Guez
Winston Churchill
La sátira política tiene una larga tradición: esta caricatura británica de 1915 muestra a Winston Churchill, que en aquel entonces era ministro de Marina, como un Aquiles desaliñado en la guerra de Troya. El dibujo que lleva el título “La lucha de los barcos” hace alusión a la guerra marítima por los Dardanelos, que perdió Churchill.
Imagen: picture-alliance/akg-images
Hugo Chávez
El difunto expresidente venezolano Hugo Chávez tampoco se salvó de la sátira, como se puede apreciar en esta caricatura de 2012. Muchas personas cercanas al exmandatario aseguran que tenía un excelente sentido del humor y que sus bromas estaban cargadas de metáforas. Por ejemplo, se hizo famosa su frase “huele a azufre” con la que se refirió a George W. Bush.
Imagen: Roberto Weil
Jamenei y Carrell
En 1987 una sátira del líder de la revolución iraní, el ayatolá Jamenei, provocó un escándalo en la televisión alemana. El moderador Rudi Carrel había mostrado un montaje fotográfico de Jamenei: durante una visita de Estado a Alemania manifestantes supuestamente lanzan ropa interior contra el ayatolá. Como consecuencia, dos diplomáticos alemanes fueron expulsados de Teherán.
Imagen: picture-alliance/dpa/I. Wagner
Erdogan y Böhmermann
Aún está por verse si el poema del cómico alemán Böhmermann sobre el presidente turco llevará a una crisis diplomática parecida a la de 1987. Está claro que no es la primera ni la última vez que la sátira política provoca tensiones diplomáticas a nivel internacional.