Merkel: la alianza con la extrema derecha es "imperdonable"
6 de febrero de 2020
El terremoto político que supuso la elección de un candidato liberal en el estado federado de Turingia con apoyo de la AfD y de la CDU ha llevado a la canciller alemana a pronunciar unas contundentes palabras.
Publicidad
"Imperdonable", ha dicho Angela Merkel. "La elección de este primer ministro regional es un hecho aislado que ha roto con una convicción básica mía y también de la CDU", dijo la canciller este jueves (6.02.2020) durante su estancia en la ciudad sudafricana de Pretoria. "Como era previsible (que esto podía pasar), hay que decir que es algo imperdonable", prosiguió. "Por eso hay que anular este resultado. Al menos rige para la CDU la directriz de no tomar parte en un Gobierno presidido por el primer ministro regional electo", advirtió Merkel. "Debemos hacer todo lo posible para que quede claro que esto de ninguna manera concuerda con aquello que la CDU piensa y hace".
La elección por sorpresa al frente del estado federado alemán de Turingia de un candidato liberal, Thomas Kemmerich, con el apoyo de la ultraderechista AfD y de la gubernamental CDU, ha causado un terremoto político en Alemania, pues rompe con el "cordón sanitario" impuesto hasta ahora a cualquier cooperación con la ultraderecha.
La "ruptura del tabú", como ha sido calificada la elección de Thomas Kemmerich por algunos analistas, se ha producido justamente en el estado federado donde la AfD es liderada por una de sus figuras más radicales, Björn Höcke. Höcke es considerado como uno de los principales exponentes de un grupo llamado, "El ala," que incluso es observado por la Oficina Federal para la Protección de la Constitución por considerar que desde allí pueden impulsarse planes en contra del orden constitucional alemán.
MS (dpa/dlf)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
Diez argumentos a favor de Turingia
Es un estado federado que no limita con el mar ni con el extranjero, pero que alberga el centro geográfico de Alemania. Turingia está rodeada de mucha naturaleza, historia y arte.
Imagen: picture-alliance/dpa
Bauhaus
La ciudad natal de una nueva forma de construcción fue Weimar, en los años veinte. La Bauhaus estatal, que fue fundada por Walter Gropius, era una de las universidades más importantes de diseño del siglo XX. Aquí la arquitectura y el diseño fueron reinventados por artistas internacionales. A partir del 6 de abril de 2019, uno podrá llevarse su propia impresión del nuevo museo de Bauhaus.
Imagen: picture-alliance/dpa/Martin Schutt
Goethe
En esta casa, uno de los poetas más famosos de Alemania trabajó en sus obras como “Las afinidades electivas” y “Fausto”. Hoy día, se puede visitar la casa de Johann Wolfgang von Goethe en Weimar. Goethe vivió aquí por 50 años hasta que murió, en 1832. A partir de 1792, vivió aquí con su amante y luego esposa, Christine Vulpius, y su hijo August.
Imagen: picture-alliance/Mathias Michel
Schiller
También en Weimar, se puede visitar la casa de Friedrich Schiller. El poeta vivió aquí por tres años junto con su familia. Regularmente se encontraba con Goethe, hasta que murió en 1805, a la edad de solo 45 años. Quien quiera saber más acerca de los dos autores, puede leer también algunas de sus cartas personales en el Archivo de Goethe y Schiller, en Weimar.
Imagen: picture-alliance/dpa/Martin Schutt
La salchicha de Turingia
Esta especialidad regional se encuentra por todos lados. Solamente si es originalmente de Turingia, tiene autorizado llamarse así. Antes era obligatorio que la mitad de los ingredientes fueran de Turingia, particularmente la carne de cerdo, la sal, la pimienta, la mejorana, el comino de prado y el ajo. La salchicha se come dentro de un panecillo, y todo se adereza con mostaza de Turingia.
Imagen: picture-alliance/dpa/Hendrik Schmidt
El bosque de Turingia
El bosque de Turingia ofrece senderos aventureros. Uno de los senderos más populares de Alemania es el Rennsteig. Por etapas, se llega aproximadamente hasta 1.000 metros de altura, arriba de la punta de árboles del bosque de Turingia. El Rennsteig disfruta de una longitud de 170 kilómetros. La mayoría de los caminantes necesita seis etapas para llegar al fin.
Imagen: Picture alliance/dpa/Michael Reichel
Parque Nacional Hainich
Debido a sus viejas hayas, el Parque Nacional Hainich fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. A través de plataformas, que están ubicadas en 24 metros de altura, se puede descubrir también las partes inaccesibles del parque.
Imagen: picture-alliance/dpa/Martin Schutt
El castillo de Wartburg
Aquí, en 1521 Martin Luther tradujo el Nuevo Testamento en solamente once semanas del greco al alemán. En aquel entonces se escondió en el castillo de Wartburg en Eisenach de sus enemigos. El reformador supo cómo usar este tiempo muerto: Su traducción de la biblia sentaba la base de un idioma alemán uniforme.
Imagen: picture-alliance/dpa/Martin Schutt
Bach
Escuchar la música de Bach, solo o en compañía en uno de los pequeños conciertos que tienen lugar cada hora: en la Bauhaus, en Eisenach, ambas cosas son posibles. Johann Sebastian Bach nació en esta ciudad en 1685 y vivió aquí por diez años. Cada año se puede escuchar música del famoso compositor en las Thüringer Bachwochen, el festival más grande de música clásica.
Imagen: picture-alliance/dpa/Martin Schutt
Erfurt
Quien dice Turingia, también se refiere a Erfurt. Una particularidad ubicada en la capital del estado es la Kramerbrücke. Este es el puente más largo de Europa, que está totalmente edificado y poblado. ¿Qué más se podría visitar en Erfurt? El centro medieval, la catedral St. Marien, la sinagoga más antigua de Europa y mucho más.
Imagen: Picture alliance/dpa/Hendrik Schmidt
Los naipes
¿Quién inventó el tresillo? Los Turingios. En 1813 este juego de naipes fue desarrollado en la ciudad de Altenburg. También el naipe más antiguo, producido en Alemania en 1509, y todavía conservado, procede de esa ciudad. Hoy día aun se producen y venden los naipes en Altenburg. Es el recuerdo perfecto de Turingia.