En Berlín, la canciller alemana, Angela Merkel, afirmó que su gobierno no descarta la posibilidad de estatizar bancos a fin de hacer frente a la crisis financiera internacional.

Durante una conferencia de prensa junto con el primer ministro polaco, Donald Tusk, Merkel afirmó que "esencialmente, estamos a favor de que las empresas solucionen por sí mismas sus problemas".

Sin embargo, agregó, "la crisis obliga a tomar acciones decididas y a la vez razonables".

Horas antes, la Oficina Federal de Estadistica, con sede en Wiesbaden, informó este jueves que el volumen de exportaciones alemanas se ubicó durante el mes de agosto en casi 76 mil millones de euros, lo cual significa un decremento de 2,5 por ciento en comparación con el año anterior.

Desde 2003 no se registraba una caída tan pronunciada de las exportaciones germanas. Pero, de acuerdo con portavoces del organismo, "es demasiado pronto para saber si esta disminución obedece a la crisis financiera internacional". El mes de agosto se caracteriza por un comportamiento irregular de las exportaciones, agregó el funcionario.

Ante todo, precaución

Anton Börner, presidente de la Cámara Federal del Comercio Mayorista y Minorista, no fue menos cauteloso. Según él, "el decremento en las exportaciones responde a los altos precios del petróleo y a la fuerza del euro". Al mismo tiempo, reconoció que "la inseguridad en los mercados internacionales es hoy mucho mayor" debido a la crisis financiera.

Está claro, pues, que el entorno no es el mejor para realizar operaciones a gran escala. Prueba de ello es que el gobierno alemán anunció, también este jueves, que no se realizará por el momento una de las operaciones financieras más importantes de los últimos años: la salida a la bolsa de la empresa ferroviaria alemana, Deutsche Bahn (DB).

La emisión bursátil estaba planeada para comenzar el próximo 27 de octubre, con la oferta de 24,9 por ciento de las acciones de Deutsche Bahn Mobility Logistics, filial de DB.

Extrema inseguridad

El ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, dijo que "el patrimonio federal no será puesto en la bolsa de valores en un momento inadecuado". En un comunicado conjunto, el mencionado ministro y la Deutsche Bahn calificaron a las condiciones del mercado financiero como "extremadamente inseguras".

Así, la emisión accionaria se producirá cuando más pronto en febrero de 2009. Se continuará el diálogo con posibles inversionistas quienes, en principio, han reaccionado positivamente a la postergación de la oferta, anunció el consorcio ferroviario.

SAP se ve afectada

La crisis repercutió en otro global player alemán: SAP, el mayor fabricante europeo de aplicaciones para computadora. En comunicados internos, la empresa anunció a sus empleados que está en puerta todo un paquete de medidas de ahorro entre las que se cuenta una veda a las nuevas contrataciones de personal.

SAP fue una de las primeras firmas alemanas en alertar sobre los efectos de la crisis financiera, debido a la contracción en el mercado de herramientas y artículos para oficina.

El presidente del consorcio, Henning Kagermann, ya anunció que los estados financieros del tercer trimestre del año se ubican por debajo del plan de negocios. Las cifras concretas, que en parte servirán como termómetro de la crisis financiera en Alemania, serán dadas a conocer por la empresa el próximo 28 de octubre.